Columna de Opinión

Frente a la sequía y el cambio climático (El Mercurio, Editorial, 10/08/2021) —- Abogado Matías Cox, nuevo secretario ejecutivo de la Convención Constitucional.

Frente a la sequía y el cambio climático (El Mercurio, Editorial, 10/08/2021) —- Abogado Matías Cox, nuevo secretario ejecutivo de la Convención Constitucional.
LAS OPINIONES EN ESTA SECCIÓN, SON DE RESPONSABILIDAD DE SUS AUTORES Y NO REFLEJAN NECESARIAMENTE EL PENSAMIENTO DE LA UNIÓN
Si el sistema político no es capaz de generar incentivos para las inversiones que se necesitan, servicios vitales quedarán a merced de los efectos del fenómeno.
Por cierto, una situación de sequía como la actual sería aún más complicada para el sistema eléctrico luego de retiradas las centrales de carbón de la V Región. Esto nos muestra que, antes de concretar ese cierre, deben materializarse inversiones para almacenar y para transmitir la electricidad hacia las zonas de demanda; también, mecanismos regulatorios que permitan asegurar no solo la potencia, sino la disponibilidad de energía del sistema..

 

 

FRENTE A LA SEQUÍA Y EL CAMBIO CLIMÁTICO

El Mercurio, Editorial, 10/08/2021


Más de una década lleva el país con pocas lluvias, sufriendo lo que los expertos denominan una megasequía.
En el caso específico de 2021, los registros muestran solo dos años con menores cifras de agua caída a esta fecha. La nieve, que ayuda durante la larga temporada seca de la zona central, también escasea.
Esto podría significar problemas de abastecimiento de agua en algunas zonas, de riego insuficiente para la agricultura y consecuencias sobre el suministro eléctrico. Estas dificultades agregarán otro costo al país, además de los que provienen de la crisis social y de la pandemia.
Afortunadamente, en ciudades como Santiago y Valparaíso los embalses existentes y las inversiones realizadas por las empresas sanitarias permitirán asegurar el consumo hasta la próxima temporada de lluvias. En la V Región, por ejemplo, la empresa ha construido una tubería bidireccional con la desembocadura del río Aconcagua, de donde ha extraído agua que permitirá el abastecimiento seguro de las ciudades.
Según la Superintendencia de Servicios Sanitarios, la situación en otros núcleos urbanos también está controlada. Sin embargo, en zonas de menor población, sin embalses y con ríos casi secos, el escenario podría ser complejo, pues las capas freáticas serán más profundas; posiblemente, más que los pozos de extracción de las empresas sanitarias o los de las asociaciones de agua potable rural.
El problema también es grave en la agricultura, en que ya hay reportes de una posible reducción en la producción futura de hortalizas. Tal como hace pocos años, los agricultores podrían tener que tomar medidas drásticas para intentar salvar sus inversiones, por ejemplo, en árboles frutales.
En el sector eléctrico, en tanto, parecería a primera vista improbable que se repitieran los cortes que afectaron al país durante la última sequía extrema, en 1998-1999. La demanda máxima del mes pasado, por ejemplo, fue de 11,2 GW, en circunstancias que disponemos de una capacidad de 26 GW.
Si el sistema político no es capaz de generar incentivos para las inversiones que se necesitan, servicios vitales quedarán a merced de los efectos del fenómeno.
 
Pero se debe tener cuidado con estos números: las centrales renovables producen en promedio un 30% de su capacidad, cifra que en algunos días puede ser mucho menor. Además, en la noche, parte importante de la energía renovable desaparece. Se cuenta, por otra parte, con un stock de 3.000 MW de generadores diésel que deberían poder usarse en esta emergencia, pero estos no disponen de combustible para funcionar más de uno o dos días, y podrían ser incapaces de operar en forma continuada.
Además, no hay suficiente gas para operar en forma permanente las centrales que utilizan este combustible; en parte, por un exceso de demanda por gas de Japón y China, y también por la poca confiabilidad del suministro argentino. Eso no es todo: varias centrales a carbón están en mantenimiento, justo cuando se necesitan.
Es por esta combinación de hechos que durante la semana pasada se habría estado cerca de un corte de suministro: algunas informaciones indican que el margen del sistema llegó a ser de solo 3%.
Dados los enormes márgenes de capacidad instalada, este hecho debe llamar la atención: disponemos de capacidad (potencia), pero no de energía (la capacidad de operar en forma continua) cuando hay sequía.
La autoridad ha comenzado a tomar medidas de emergencia, pero debería considerar decretar el racionamiento, lo que le daría más herramientas para sortear este escenario.
Por cierto, una situación de sequía como la actual sería aún más complicada para el sistema eléctrico luego de retiradas las centrales de carbón de la V Región. Esto nos muestra que, antes de concretar ese cierre, deben materializarse inversiones para almacenar y para transmitir la electricidad hacia las zonas de demanda; también, mecanismos regulatorios que permitan asegurar no solo la potencia, sino la disponibilidad de energía del sistema.
Todo esto requiere recursos y reglas que faciliten e incentiven la inversión, algo que hasta ahora no se ha completado de manera satisfactoria.
Enfrentar el cambio climático —respecto del cual el “Comité Internacional de Expertos” ha entregado ayer un nuevo y lapidario informe— demanda enormes inversiones en plantas desaladoras y de tratamiento de aguas en ciudades costeras, y en regadío avanzado, así como en transmisión y almacenamiento eléctricos.
Por cierto, si el sistema político no es capaz de generar incentivos para esa inversión, tales servicios vitales quedarán a merced de los efectos del fenómeno climático que golpea al planeta.
Un aporte del Director de la Revista UNOFAR, Antonio Varas C.A

Abogado Matías Cox, nuevo secretario ejecutivo de la Convención Constitucional

Fuente: Diario Financiero
Un aporte de nuestro Director Raúl Godoy C.
Columna de Opinión

El despotismo igualitarista por Álvaro Pezoa B. (Viva Chile. Org. Política) — Rodear la Convención por Gonzalo Rojas Sánchez (Viva Chile. Org. Política)

El despotismo igualitarista por Álvaro Pezoa B. (Viva Chile. Org. Política) — Rodear la Convención por Gonzalo Rojas Sánchez (Viva Chile. Org. Política)
LAS OPINIONES EN ESTA SECCIÓN SON DE RESPONSABILIDAD DE SUS AUTORES Y NO REFLEJAN NECESARIAMENTE EL PENSAMIENTO DE LA UNIÓN.
La democracia liberal ha ido adoptando formas de coacción cada vez más contundentes para limitar la libertad de la persona, especialmente si difiere de la que el sistema decreta como correcta.
Lejanos van quedando los tiempos en que la democracia moderna entusiasmaba por los frutos de libertad que prometía. En la actualidad, con profusión, ella degrada al hombre, mutilándolo a través de la imposición de una mediocridad que limita aspiraciones, vocación espiritual y percepción trascendente.
EL DESPOTISMO IGUALITARISTA
Álvaro Pezoa B.
VivaChile.org, Política, 06/08/2021
La democracia liberal ha ido adoptando formas de coacción cada vez más contundentes para limitar la libertad de la persona, especialmente si difiere de la que el sistema decreta como correcta.
Un ejemplo claro es la hostilidad militante al cristianismo como elemento esencial de la idea impuesta de modernidad y progreso. En su seno, todas las consignas, desde el desprecio por la familia tradicional, la ideología de género, el multiculturalismo, hasta las climáticas o animalistas, tienen como objeto limitar al mínimo las opciones personales reales, esto es, la libertad.
Lejanos van quedando los tiempos en que la democracia moderna entusiasmaba por los frutos de libertad que prometía. En la actualidad, con profusión, ella degrada al hombre, mutilándolo a través de la imposición de una mediocridad que limita aspiraciones, vocación espiritual y percepción trascendente.
Las democracias están sometidas a una política de consenso en el proceso de alternancia en el poder que cada vez es más marcadamente socialdemócrata (Chile parece no ser la excepción).
Se encuentran sujetas a rigurosos dictados de la “corrección política”, que siempre llega definida por la izquierda, y son alimentadas por el poderoso combustible del resentimiento o veneno social que supone el “igualitarismo”.
El dictado moral de la igualdad ante la ley o el legítimo anhelo de igualdad de oportunidades deviene en exigencia insaciable de igualdad para lo que es desigual. Así se genera el torbellino de victimismo, y de indignados y ofendidos, que conduce al ejercicio de la violencia para acabar con la desigualdad, cualquiera que esta sea.
Todos los movimientos en contra de la ley y de la primacía de la separación de poderes se justifican -como las revueltas delictuales y el terrorismo- con la lucha por el supuestamente sacrosanto e incuestionable derecho a la igualdad, que abre las puertas a todo abuso, agresión y crimen.
Parafraseando a un personaje de Dostoyevski: “empezamos por la igualdad absoluta y terminamos en el despotismo absoluto”.
Se hacen gradualmente más patentes las previsiones de Alexis de Tocqueville (La democracia en América): “…Intento delinear los rasgos que revelen las nuevas formas de despotismo en el mundo. La primera impresión es la imagen de una multitud incontable de hombres iguales e indistinguibles, esforzándose sin cesar por procurarse los placeres más nimios y banales con que sacian sus vidas… Por encima, se levanta un inmenso poder tutelar encargado de asegurar sus goces y vigilar su suerte. Es un poder absoluto, minucioso, constante, próvido y afable. Como la autoridad paterna, si su objetivo fuera la preparación para la vida adulta. Al contrario, este poder promueve la eterna infancia. Le satisface que el pueblo se regocije, a condición de que solo piense en el regocijo”.
[1] Nota: Este artículo fue publicado originalmente por La Tercera el 03/08/2021

[1] NotaLa imagen corresponde a Alexis Henri Charles de Clérel, vizconde de Tocqueville (Verneuil-sur-Seine,Isla de Francia29 de julio de 1805Cannes16 de abril de 1859), fue un pensador, jurista, político e historiador francés, precursor de la sociología clásica y uno de los más importantes ideólogos del liberalismo.

RODEAR LA CONVENCIÓN
Gonzalo Rojas Sánchez
VivaChile.org, Política, 06/08/2021
En la reciente Mesa Redonda organizada por Foro Republicano, participaron Marcela Cubillos y Rodrigo Álvarez, convencionales de Vamos por Chile.
Fue impresionante lo que nos contaron sobre lo que está sucediendo en la Convención. Para que cada persona se forme su propia impresión, se puede ver la Mesa Redonda completa en https://youtu.be/rljI7LFlM1A
Aunque ciertamente hubo muchos momentos de gran interés en los que los dos convencionales nos contaron la realidad de su trabajo, conviene destacar el instante en que Marcela Cubillos, interrogada sobre cómo podíamos ayudarlos en sus muy difíciles tareas, nos dijo que debíamos “rodear” la Convención, recordando la amenaza del Partido Comunista, formulada a fines del año pasado.
Ciertamente, la abogada no se refería al uso de la violencia con la que los comunistas pretenden destrozar una vez más la institucionalidad sino, por el contrario, a la necesidad de usar todos los medios lícitos para dejar en evidencia los comportamientos ilícitos de la mayoría constituyente.
¿Qué hacer en concreto, entonces?
Por una parte, convendría usar todas las instancias presenciales que convoque la Convención, para que muy variados grupos y personas acudan a esas sesiones y refuercen nuestros principios y proyectos. Por cierto, cuando haya alguna negativa a recibir a gente amiga -ya se las ha anunciado- deberá enfrentarse esa discriminación arbitraria con toda la fortaleza y publicidad del caso.
En segundo lugar, habrá que escribir muchas columnas, grabar muchos videos y publicar muchos textos breves en las diversas redes, comentando los desaciertos y despropósitos de la mayoría izquierdista. Esto implica un contacto fluido con la información básica y con nuestros convencionales: si con el paso de las semanas y meses se pierde interés en el lamentable día a día de la Convención, se perderá también la capacidad de denunciar sus desvaríos.
Finalmente, sería muy conveniente formar una base de datos de las opiniones públicas de los convencionales de izquierda, para poder mostrar el contenido concreto de sus propósitos rupturistas. Para esa tarea, obviamente, se requiere de un grupo de voluntarios que revisen a diario la prensa y los restantes medios y formen así ese archivo.
Rodear la Convención con todos los medios lícitos, hacerles sentir a comunistas, frenteamplistas y populares que no podrán hacer lo que les dé la gana… ésa es la tarea.

 Un aporte del Director de la Revista UNOFAR.  Antonio Varas C.
Columna de Opinión

REMODELACIÓN EN MARCHA por Eugenio Tironi (El Mercurio, Columnistas, 10/08/2021) —– ¿OTRO MODELO? por Joaquín Fermandois (El Mercurio, Columnistas, 10/08/2021)

REMODELACIÓN EN MARCHA por Eugenio Tironi (El Mercurio, Columnistas, 10/08/2021) —– ¿OTRO MODELO? por Joaquín Fermandois (El Mercurio, Columnistas, 10/08/2021)

LAS OPINIONES EN ESTA SECCIÓN, SON DE RESPONSABILIDAD DE SUS AUTORES Y NO REFLEJAN NECESARIAMENTE EL PENSAMIENTO DE LA UNIÓN.

“…la Convención está fabricando un nuevo orden, con lenguajes, relaciones, ritos, jerarquías, normas, causas y banderas que expresan a grupos que permanecían subordinados, invisibilizados y ausentes…”.

Lo que más la saca de quicio es una Convención abocada a minucias procedimentales en lugar de entrar rápidamente en aquello para lo cual fue creada: escribir un texto constitucional.

Con respeto lo digo, pero quienes están presos de esa visión no están entendiendo bien lo que pasa. Nos guste o no, Chile ha entrado en un proceso de remodelación y estos, como se sabe, son siempre más caóticos, prolongados y costosos de lo que se previó.

 REMODELACIÓN EN MARCHA

Eugenio Tironi

El Mercurio, Columnistas, 10/08/2021

No faltan las voces de compatriotas que, con exasperación, alegan del tiempo perdido en materias tan etéreas como concordar una nueva Constitución, en circunstancias que hay cuestiones urgentes de las cuales hay que hacerse cargo: crisis sanitaria, sequía, cambio global, transformación del mundo del trabajo y de la educación, ineficacia del Estado, abultamiento de la tercera y cuarta edad.

Lo que más la saca de quicio es una Convención abocada a minucias procedimentales en lugar de entrar rápidamente en aquello para lo cual fue creada: escribir un texto constitucional.

Con respeto lo digo, pero quienes están presos de esa visión no están entendiendo bien lo que pasa. Nos guste o no, Chile ha entrado en un proceso de remodelación y estos, como se sabe, son siempre más caóticos, prolongados y costosos de lo que se previó.

Que la Convención se haya constituido, elegido una mesa, acordado normas provisorias de funcionamiento, y comisiones que ya empiezan a emitir sus primeras propuestas, es objetivamente un milagro.

Con la extrema hibridez de sus componentes —en su mayoría sin experiencia alguna en este tipo de entidades—, con las desconfianzas acumuladas y la polarización provocada por el estallido, sin contar con un patrón o guion que seguir y sin liderazgos intelectuales o carismáticos preconstituidos, el hecho de que no se haya quebrado o empantanado es prodigioso.

¿Qué ha tomado tiempo? Quizás, pero todos los que saben de procesos de diálogo entre partes que no comparten un mismo patrón cultural o que han estado en conflicto sostienen que el lapso destinado a presentarse, conocerse, entender los lenguajes ajenos y concordar normas básicas de respeto y operación es una inversión sin la cual no es posible entrar, luego, a los llamados “temas de fondo”.

“…la Convención está fabricando un nuevo orden, con lenguajes, relaciones, ritos, jerarquías, normas, causas y banderas que expresan a grupos que permanecían subordinados, invisibilizados y ausentes…”.

 

Sorprende, y hasta cabrea, la atención en definir cuestiones de lenguaje y protocolo. ¿Por qué no aplican —se preguntan los impacientes— los que prevalecen en otras instituciones, como el Congreso?

Esto es no entender nuevamente lo que está en juego. La Convención, frente a una población que la está viendo en tiempo real con una transparencia sin precedentes, está fabricando un nuevo orden, con lenguajes, relaciones, ritos, jerarquías, normas, causas y banderas que expresan a grupos que permanecían subordinados, invisibilizados y ausentes de una vida pública regida por instituciones creadas en el Chile de otro tiempo.

La Convención, entonces, no hay que juzgarla únicamente por lo que es su cometido oficial: redactar una nueva Constitución. Esta no será su única herencia, y quizás ni siquiera la principal. Hay que juzgarla también por lo que algunos llamarían su efecto performativo.

Ahí se están teatralizando, con las exageraciones del caso, formas de funcionamiento que marcarán el Chile del futuro. Instituciones como las familias, el Congreso, el gobierno, el Poder Judicial, las entidades educativas, las empresas, serán impactadas por lo que ahí está ocurriendo, y por lo mismo más vale observarlo con atención para aprender de ello.

La remodelación en curso no tiene como único agente la Convención. La política está viviendo un profundo recambio generacional. Los jóvenes han roto con la apatía política y se han vuelto actores activos de la democracia, lo que vendrá de la mano con una agenda centrada en la economía verde, la inclusión y la participación.

La misma revolución tiene lugar en el campo empresarial, como lo prueba el estallido de las start-ups.

“Estamos trabajando para usted”. Este es el cartel que Agustín Squella propone colocar en la sede de la Convención. Bien se podría agregar: “Remodelación en marcha”.

¿OTRO MODELO?

Joaquín Fermandois

El Mercurio, Columnistas, 10/08/2021

Dar con otro modelo “más humano” es el nuevo producto que se enseñorea del presente.

Un primitivismo (idealización de las sociedades originales previas a la civilización) mal entendido olvida que, salvo en algunas tribus recolectoras, los llamados originarios conocían perfectamente la práctica de una economía de mercado como diferente a la actividad de producción e intercambio al interior de una microsociedad, por ejemplo, la familia extendida.

En el intercambio con otras tribus se maximizaba el provecho. En casi todas ellas existió “capitalismo”, si entendemos por capital aquella parte de lo que se produce que no se consume, sino que se guarda, acto fundamental que está en la base de supervivencia del grupo.

Fue uno de los pasos que establecieron la civilización, para grandeza y cruz, porque en eso consiste y consistirá la historia humana.

Lo que hoy en general vulgarmente se llama capitalismo, y que prefiero denominar simplemente como “economía moderna” de mercado, fue una transformación radical, producto de un trabajo milenario —en términos técnicos, la depredación de la naturaleza comenzó con Adán y Eva— y por fenómenos originados en el último medio milenio: el surgimiento de la economía mundial, autoridad de la ciencia, revolución industrial, la empresa racional, la teoría económica que se hizo parte del debate público, donde, como en tantas partes, ciencia y valores no encajan a la perfección.

Lo más importante y estridente es haber dado a lo largo de 700 años un salto cualitativo abismante y temible en la creciente abstracción del dinero, desde las letras de cambio hasta el bitcoin.

Aportó, primero, la novedad de la superación de la pobreza para la gran mayoría de sus miembros, cuando se logra amaestrar a la economía. Segundo, en aquellos países donde sucedió, no sin avances y retrocesos, y a veces magnas conmociones, progresivamente se desarrolló la democracia y el Estado de derechos moderno.

“Un primitivismo mal entendido olvida que, salvo en algunas tribus recolectoras, los llamados originarios conocían perfectamente la práctica de una economía de mercado”.

No ocurrió por razones de causa-efecto —no fue la economía per se la que produjo la democracia—, pero sí hay contigüidad entre ambas. Este magno salto, apetecido y exigido, también arrojó una sombra, ya que no fue ni jamás será amado.

Su existencia se legitima con precariedad si mantiene un tenso equilibrio con otros ámbitos de la civilización: política, cultura, espiritualidad. La vida no es solo el proceso económico; pero también lo es.

Las aparentes excepciones, como el modelo colectivista del siglo XX, eran también capitalistas, un capitalismo de Estado, donde existían grandes grupos económicos, en el sentido de agrupar series de empresas diversas en una dirección para la eficiencia posible en esos sistemas.

Parece que la economía moderna no puede funcionar de otra manera. Sabemos cómo funcionaron y en qué terminaron, aunque quizás por ahí y por allá sea inextinguible la tentación de retornar a ellos.

La moderna economía de mercado, monstruo y salvación, mucho mejor (por decir lo menos) que el modelo colectivista, llevó a la humanidad a otro estadio, con nuevos y tenaces problemas y peligros.

Todos, sin embargo, demandan lo que nos ha entregado. Para esquivar sus trampas, Solzhenitsyn nos dice: “Solo podemos experimentar la verdadera satisfacción espiritual no en poseer, sino en negarnos a poseer, (que es) la autolimitación”.

No se trata de la adopción de un programa tecno-político, cual otro modelo, que lo desnaturalizaría, sino un punto de fuga que alimente la cotidianidad de la civilización moderna, de cada uno de nosotros.

Palabras que, en Chile, que emerge de un frenesí del advertisement como de la satisfacción instantánea, podrían devenir en oasis fecundo.

Columna de Opinión

EL DURO CAMINO QUE TENEMOS AL FRENTE por Juan Pablo Zúñiga H. — EL LEGADO DE UNA DERECHA COBARDE, UN REBAÑO SIN PASTOR por Mauricio Riesco V

EL DURO CAMINO QUE TENEMOS AL FRENTE por Juan Pablo Zúñiga H. — EL LEGADO DE UNA DERECHA COBARDE, UN REBAÑO SIN PASTOR por Mauricio Riesco V
LAS OPINIONES DE ESTA SECCIÓN SON DE RESPONSABILIDAD DE SUS AUTORES Y NO REFLEJAN NECESARIAMENTE EL PENSAMIENTO DE LA UNIÓN
La pérdida de visión de mediano y largo plazo ha llevado a que muchos candidatos no consideren el duro escenario que tendrá el Congreso y el ejecutivo en el próximo período considerando que recibirán un país con endeudamiento altísimo, un clima de división interna de proporciones peligrosísimas y una Convención Constitucional que aspira a convertirse en asamblea constituyente.
Sí, el camino por el que Chile transita hoy es difícil y lamentablemente seguirá siendo cuesta arriba. Si queremos avanzar, necesitamos tracción para llegar al llano y desde allí seguir avanzando.
No tendremos a nuestras valerosas Fuerzas Armadas que defiendan a esta nación; varios cientos de sus miembros ya han sufrido el pago con que Chile les agradeció el haber podido mantener nuestras cabezas sobre los hombros. Es imposible que quieran recibir, de nuevo, el mismo pago por liberar al país.
EL DURO CAMINO QUE TENEMOS AL FRENTE
Juan Pablo Zúñiga H.
VivaChile.org, Política, 06/08/2021


 
Por momentos da la impresión de que nuestro país, y particularmente la clase política, padece de un nuevo mal que se suma al brote de insensatez: miopía colectiva. Hay una preocupación por el hoy, y, en el mejor de los casos, por los próximos seis meses. ¿Y después, qué?
Sin contar con quién resulte electo, el camino de Chile hace rato que anda cuesta arriba y nada hace pensar que será llano el camino para quien llegue al Congreso y a La Moneda.
Habiendo -afortunadamente- quedado en el camino el candidato presidencial del PC, ahora le toca a Boric ser inflado por los medios y también por ciertos grupos influyentes e inclusive próximos al mundo intelectual.
En un reciente encuentro virtual entre el Sr. Boric y un conglomerado de emprendedores, de acuerdo con La Tercera (“Los pormenores de la reunión de Boric con Endeavor y su acercamiento a las startup”, 20 Julio 2021), el candidato ha mostrado un acercamiento al mundo empresarial.
Si bien este conglomerado -cuyo compromiso con el desarrollo nacional es loable y fundamental- señala no tener afiliación política, resulta preocupante el eventual espaldarazo a un candidato que no se pronunció en lo absoluto con la destrucción de miles de negocios y pymes, más aún, festinó con ello.
Ya sea porque fueron encantados por la juventud del candidato o por el apoyo que éste posee de otros emprendedores abiertamente frente amplistas, lo medular es que con el historial del Sr. Boric, me resulta poco creíble su repentina gran vocación empresarial.
En línea con lo anterior, ante la nueva asonada insurreccional, incitada y promovida por Campillai -que tiene la osadía de ser candidata a senadora- el silencio de Provoste, y también de Boric, quien, más aún, defiende a los destructores de emprendimientos y propiedad privada llamándolos de “presos políticos” o “presos de la revuelta”, el eventual apoyo a este último por parte de emprendedores resulta paradojal.
Por lo tanto, o se trata de miopía consciente, es decir, selectivamente escoger lo que se desea y lo que no se desea ver, o es un grave proceso de normalización de la violencia.
La pérdida de visión de mediano y largo plazo ha llevado a que muchos candidatos no consideren el duro escenario que tendrá el Congreso y el ejecutivo en el próximo período considerando que recibirán un país con endeudamiento altísimo, un clima de división interna de proporciones peligrosísimas y una Convención Constitucional que aspira a convertirse en asamblea constituyente.
A esto se suma la gravísima crisis hídrica. Habiendo ya pasado la mitad del invierno, la prácticamente nula pluviosidad en la zona central augura un futuro muy difícil en términos hídricos a no ser que se tomen medidas radicales, no sólo de ahorro sino de innovación tecnológica, que requieren atención inmediata.
Tenemos el ejemplo de naciones como Israel que han sabido sortear este problema, el cual hace más de una década debíamos de haber comenzado a tratar.
Como es de esperar, los candidatos de izquierda y los propios convencionales, que nunca se han caracterizado por ser buenos gestores, sólo proponen palabrerías. Solamente los Republicanos cuentan hoy con una propuesta concreta a este respecto.
Sí, el camino por el que Chile transita hoy es difícil y lamentablemente seguirá siendo cuesta arriba.  Si queremos avanzar, necesitamos tracción para llegar al llano y desde allí seguir avanzando.
En tiempos difíciles se requieren medidas extraordinarias. Solamente aquellos que tiene la convicción, la valentía y que buscan el bien común de la nación, son capaces de adoptarlas con coraje, aunque resulten desagradables y abominables para los llorones de siempre.
Solo estos serán los que tendrán las mejores chances de hacer posible el proceso de reconstrucción nacional.

La integridad y el futuro de nuestro país están en juego. Haga parte de la solución, comenzando por votar responsablemente.

EL LEGADO DE UNA DERECHA COBARDE, UN REBAÑO SIN PASTOR
Mauricio Riesco V.
VivaChile.org, Política, 06/08/2021
No hace tanto, tuve una triste experiencia con mi querida chaquetita azul que, según me confidenció mi señora, por el brillo de los años ya no era más que un mal espejo.
Aunque afligido, tuve que aceptar su consejo para cambiarla por una nueva, sin lustre. Ya en la tienda, caí en la cuenta de que la moda ahora es más acomodaticia, se amolda a las necesidades del momento por el que pasa cada cual. Así, muchas chaquetas las hacen con un forro interior tan estiloso que permite darlas vuelta y usarlas al revés sin mayor desmedro estético para quien las viste.
El buen vendedor trataba de convencerme de las prodigiosas propiedades de este nuevo estilo y me contaba que los sastres ya no daban abasto por su recarga de trabajo con esta innovación; “este es un año de elecciones, (me dijo), y han estado ocupadísimos en la confección de chaquetas reversibles por su alta demanda. Permítame darle un buen ejemplo en este asunto: dicen que aún deambula por el sector de Las Condes un señor que ha modelado por años una chaquetita multifacética, la más asombrosa que alguien haya confeccionado a la fecha, que le ha permitido exhibirse como ‘UDI-Aliancista-Bacheletista-socialdemócrata’. Es reversible para el lado que le guste a la gente”, me confidenció.
No será de buena tela pensé yo puesto que, según se comenta, no le ha dado los frutos esperados. Las vueltas de chaqueta tienen su costo, me dije.
Volviendo a casa (con las manos vacías, aclaro), me topé con un buen amigo mío y le conté sobre esta nueva forma de emperifollarse. Interesado en el fenómeno, él me relató que algo similar pasaba también con las cada vez más escasas pieles de ovejas, y que había sabido que en año de comicios las pobres ovejas no lo pasan bien.
Todos los políticos quieren vestirse con sus ropajes de mansedumbre y docilidad. En suma, chaquetas y pieles buscan lo mismo: que los demás crean que los disfrazados ahora son buenas personas, que cambiaron para bien, lo que, en una palabra, viene a ser engaño.
Hicimos recuerdos que al término del gobierno del presidente Augusto Pinochet hubo una estampida de muchos de sus cercanos colaboradores, que antes se empujaban unos a otros para figurar al lado del presidente en la foto, pero después, terminado su gobierno, corrieron a camuflarse entre el ganado ovino en un par de corrales.
Con mi amigo recordamos, además, que muchos de esos chaqueteados hoy forman parte de un amasijo medio gelatinoso que, si no me equivoco, lo llaman “derecha”.
Con cierta compasión comentamos que ellos parecieran suponer que nadie se ha dado cuenta de su travestismo político, cambiando de pellejo cada vez que necesitan uno distinto. Entiendo que Piñera (cuando le gustaban las cámaras), los llamó “cómplices pasivos” si bien muchos de esos pasivos trabajaron con él y varios aún lo hacen.
Por razones demasiado evidentes, él valora esa capacidad “camaleonesca”. Son de camadas afines. A varios les conocimos sus intimidantes rugidos en el Parlamento y, una vez instalados en algún sillón importante del gobierno, los convirtieron en sumisos maullidos.
¿Dónde estarán hoy, me pregunto yo, las fotos en que aparecían con pecho inflado, orgullosos, al lado de nuestro Presidente Pinochet como sus valientes paladines? ¿Rompieron las que exhibían con orgullo en sus escritorios junto a quien les salvó el pescuezo, aquel que encarnó el exitoso desarrollo de Chile, aquel único gobernante en el mundo que venció al comunismo?
La deslealtad, la ingratitud, la felonía, en algún minuto se paga, pensé. Lo malo es que casi siempre, junto con los que traicionan, la cuenta la pagan también los traicionados; de hecho, la estamos pagando desde hace ya demasiado tiempo y no ha sido exigua.
Chile no estaría de nuevo al borde del mismo precipicio del que salimos hace 48 años si no fuera por esta gente que, debiendo haber sostenido con coraje sus convicciones, sus principios (¿los habrán tenido?), su amor a la Patria, no se hubieran transformado en “sepulcros blanqueados”.
Nuestra clase política está agotada. No de trabajar, por cierto, sino por su creciente decadencia. Por intereses mezquinos y una grave infidelidad con el país, los chaquetas vueltas de esa peculiar “derecha” se han ido acercando, poco a poco, a quienes desde hace ya tiempo vienen negociando la venta de Chile al comunismo internacional.
Víctimas de una presumible necrosis cerebral (esa sí que es irreversible) y junto a un medroso y complaciente Ejecutivo, no quisieron apagar a tiempo la mecha de la asonada subversiva narcoterrorista desatada en todo Chile desde octubre de 2019; y, peor aún, en menos de un mes, un 15 de noviembre de aquel año, firmaron en el congreso el contrato de promesa de compraventa tan anhelado por la izquierda marxista. El pacto fue bautizado elegantemente como “Acuerdo por la Paz Social y nueva Constitución”.
Junto a los otros ocho presidentes de partidos políticos firmantes, también estuvieron por parte de los vendedores los presidentes de los tres partidos que aún conforman la coalición de gobierno, (cómplices activos para este efecto), vistiendo vanidosamente sus chaquetas vueltas. Todo muy bien coordinado con Piñera y sus cortesanos que ya habían ido entregando nuestro país a la tiranía de los DD. HH. y, en consecuencia, su administración quedó radicada en Ginebra desde donde hoy nuevamente nos controla la señora.
A los dos días de la firma de aquel contrato convenientemente aplaudido por el presidente de la República, en un solemne discurso nos advirtió él muy bravo, que ahora “No habrá impunidad ni con los que hicieron actos de inusitada violencia ni con aquellos que cometieron atropellos o abusos”, refiriéndose a los actores de la asonada narcoterrorista de aquellos días. Como Garrick, aún se ríen-llorando las víctimas en Arauco y en Chile entero, y hoy ya se propician fórmulas para dejar en libertad a los pocos desalmados que se pudieron apresar y condenar de los varios miles que participaron.
Escasos fueron los políticos visionarios que se opusieron valientemente a ese “Acuerdo por la Paz Social y nueva Constitución”, muy escasos. Nada cuesta comprender que para Chile el pacto aquel tendrá una trascendencia muchísimo mayor que la próxima elección presidencial; en efecto, el destino de nuestro país luego del plebiscito terminó quedando en manos de unos constituyentes que mayoritariamente son parte de una izquierda dura, ignorantes muchos, beligerantes, odiosos, amenazantes como su presidenta E. Loncón, que insiste en su discurso de lucha de clases.
Los hay incluso dispuestos a entrometerse en las responsabilidades de otros poderes del Estado como su vicepresidente; ahí está como ejemplo, la exigencia de liberar a los procesados o condenados por los saqueos, incendios, lesiones, daños a edificios, destrucción del Metro de Santiago y otros delitos que por cerca de US$4,500 millones provocaron aquellos subversivos a los que se refería nuestro presidente en los desmanes de fines de 2019.
Son jóvenes idealistas, como los llamaba S. Allende. Son los “presos políticos”, según J. Bassa, vicepresidente de la Convención Constituyente.
Chile huele a azufre. Resulta fácil imaginar que, así como vamos, quizás si pudiéramos ver instalada en la Moneda una pandilla mefistofélica que cada vez toma más fuerza y lo hace en la misma medida en que surte efecto el potente anestésico que han inyectado a los ciudadanos de este país.
Su jefe, don sata lo llaman, no olvida que fue destronado hace 48 años (“ni perdón ni olvido” acuñó como lema tiempo después), y esta vez viene algo más rudo por las facilidades frívolamente ofrecidas por un gobierno entreguista, inepto y miedoso del “cuco” de Ginebra, y por unos políticos chaqueteros que con su transformismo han traicionado sus conciencias y a nuestro querido Chile.
Todos ellos han dado las facilidades para que el marxismo retome el poder. Por mientras, ansioso de recibir oficialmente la batuta, el “destronado” ha estado ejercitando solapadamente sus destrezas en el palacio de gobierno, en nuestro parlamento, en los tribunales de justicia (incluido el Tribunal Constitucional), y en el Ministerio de Obras Públicas; desde allí dirige la repavimentación de nuestros anticuados caminos para poder alcanzar aún más rápido la idílica fantasía comunista.
Hoy, la nación chilena es un rebaño sin pastor. Y quienes aspiran a pastorearnos, salvo una valiosa excepción, los demás lucen esas inmaculadas pieles de oveja para cubrir sus verdaderos propósitos. Su codicia les ha hecho inhalar el azufre que regala a granel el director de esa orquesta.
Mientras seguía camino a casa, meditaba que tenemos a la vista solo dos oportunidades para revertir el proceso de demolición de nuestro querido Chile, de interrumpir la venta de este país al comunismo internacional: la primera será el 21 de noviembre de este año con las elecciones presidencial y parlamentarias, y se nos dará, incluso, unos pocos días para recapacitar (hasta el 19 de diciembre) si eventualmente los resultados lo requieren. Y la segunda y última ocurrirá durante el próximo año 2022, cuando a través de un plebiscito de salida se apruebe o rechace el texto de la nueva Constitución que se proponga a la ciudadanía.
El desenlace nos revelará qué rumbo tomará Chile por, al menos, los próximos 30 o 40 años. Aprovechar estas oportunidades dependerá de una mayoría que anhela vivir en paz pero se encuentra profundamente hipnotizada; y no me refiero a esa “derecha” bobalicona, narcisista y adicta a la ambigüedad, sino a la gran mayoría de los ciudadanos asqueados de lo que vemos pasar por nuestras propias narices todos los días.
Tendremos que despertar de nuestro letargo y dar la batalla convencidos que las mismas causas producen siempre los mismos efectos y estos ya los conocimos de muy cerca no hace tanto tiempo atrás.
No podemos olvidar que, como decía alguien por ahí, entre un gobierno que lo hace mal y un pueblo que lo consiente, hay una cierta complicidad vergonzosa.
 Para diluir pronto los efectos del narcótico que aún mantiene sus efectos en una mayoría, necesitamos de un pastor que se esfuerce por su rebaño disperso. Un verdadero pastor que sea capaz de reorientar a Chile por su ruta de progreso por la que caminábamos entusiastas y esperanzados, un pastor capaz de llamar las cosas por su nombre, que sea sordo a los cantos de sirenas y valiente en combatir el comunismo y sus secuaces con toda energía.
Evitar un próximo reinado luciferino dependerá exclusivamente de nuestro pueblo despabilado y advertido, ya que, por razones demasiado obvias, no tendremos a nuestras valerosas Fuerzas Armadas que defiendan a esta nación; varios cientos de sus miembros ya han sufrido el pago con que Chile les agradeció el haber podido mantener nuestras cabezas sobre los hombros. Es imposible que quieran recibir, de nuevo, el mismo pago por liberar al país.
Si desdeñáramos aquellas dos oportunidades, nos estaría quedando únicamente el recurso de amparo ante la corte celestial y con serias probabilidades de perderlo por tontos.
Así las cosas, me he vuelto a enfundar en mi vieja y querida chaquetita azul, brillosa pero irreversible, y dispuesto a defender a nuestro querido Chilito de los comunistas y sus aliados, esos chaquetas reversibles cófrades de un mismo amasijo gelatinoso.

Es cierto que intenté convencer a mi señora que el resplandor era mío, no de la chaqueta. Pero, tan buena ella, desde entonces se ha limitado a describirme los estragos psicológicos que ha estado provocando la pandemia del murciélago de Wuhan.
Un aporte del Director de la Revista UNOFAR Antonio Varas C.
Columna de Opinión

Paula Schmidt: Cuentas claras conservan la amistad. — A propósito del “proyecto de Nueva Constitución”, se adjunta link de parte de una entrevista a J Guzmán por Dn Francisco, previo a la votación de la propuesta de Constitución de 1980

Paula Schmidt: Cuentas claras conservan la amistad. — A propósito del “proyecto de Nueva Constitución”, se adjunta link de parte de una entrevista a J Guzmán por Dn Francisco, previo a la votación de la propuesta de Constitución de 1980.
LAS OPINIONES EN ESTA SECCIÓN SON DE RESPONSABILIDAD DE SUS AUTORES Y NO REFLEJAN NECESARIAMENTE EL PENSAMIENTO DE LA UNIÓN
En pedir no hay engaño. Es verdad, cuando se trata de dinero es mejor ser transparente, pero la solicitud, que bien califica como pedigüeña, proviene de quienes, más que recursos monetarios para redactar la nueva Constitución, necesitan demostrar verdadero compromiso

Al grupo de constituyentes insatisfechos, un recordatorio: el poder que ostentan les impone demostrar que entienden que su labor es dar antes de recibir.
El título de esta columna pertenece a un refrán (como diría mi abuela) más viejo que el hilo negro, que nos debería recordar el valor de pagar las deudas a tiempo o por lo menos dar cuenta para evitar los roces que sobrevienen cuando el prestatario se hace el leso mientras que su fiador va perdiendo, de a poco, tanto su paciencia y confianza. Por otra parte, algunos creen (equivocadamente) que el dinero tiene la capacidad de hacerlo todo, por lo que terminan ellos haciéndolo todo sólo por dinero, y como el tema “platas” siempre resulta sensible, esto de que algunos miembros de la Convención hayan manifestado que las 50 UTM que recibirán al mes (alrededor de $2 millones 600 mil, sin contar futuras asignaciones) no les serán suficientes me parece impresentable.
Hay otro refrán, quizás aún más popular, que expresa: en pedir no hay engaño. Es verdad, cuando se trata de dinero es mejor ser transparente, pero la solicitud, que bien califica como pedigüeña, proviene de quienes, más que recursos monetarios para redactar la nueva Constitución, necesitan demostrar verdadero compromiso. Por otra parte, quienes se acuerden del extraordinario personaje que Tom Cruise interpreta en la película Jerry Maguire y su célebre frase “Show me the money!” recordarán cómo un monto importante de dinero puede desviar las acciones hasta del más pintado llevándolo a engañarse no sólo a sí mismo, sino, lo que es peor, engañando a los demás; pero como soy bien pensada por naturaleza, no voy a adelantar conclusiones sobre el tema de las remuneraciones de los constituyentes hasta que la cosa esté más encaminada. Lo que sí espero es que, a lo largo de todo el proceso, sea la sensatez la protagonista y no el estado permanente de insatisfacción que utiliza la izquierda extrema para de a poco ir corriendo el cerco e invadir los límites democráticos. Obviamente, si le ha resultado efectivo en el pasado, porqué no ahora. Justamente es por eso que no me explico por qué esta estrategia, archiconocida, termina casi siempre recibiendo concesiones de quienes dicen valorar nuestra institucionalidad. A quienes caen en ese juego creo que se los denomina buenistas. En fin, está claro que tanto buenismo ha dañado la credibilidad del país y podría intervenir, no de la mejor forma, sobre nuestro futuro por lo que, a estas alturas, y por como va todo, creo que a sus exponentes hay que ir llamándolos de otra forma.
Por último, si hay constituyentes que antes de siquiera instalarse en sus respectivos puestos en el Palacio Pereira ya quieren enmendar la plana en el ámbito de los recursos, qué nos espera para cuando haya que consensuar un decálogo suficientemente razonable sobre temas estructurales, como la iniciativa exclusiva del Ejecutivo en materia de gastos. Justamente, para evitar el desorden fiscal y limitar los conflictos político-electorales, Chile ha perpetuado desde los primeros atisbos que aparecen al respecto en la Carta Fundamental de 1833 las facultades presidenciales en materia de gastos, para prevenir situaciones que pudiesen afectar la coherencia económica que un país necesita para proyectarse. Es por eso que al grupo de constituyentes insatisfechos un recordatorio: el poder que ostentan les impone demostrar que entienden que su labor es dar antes de recibir. Así no sólo mantendrán las cuentas claras, sino también la amistad con la ciudadanía. (Sin engaños de por medio) ¿Será mucho pedir?
@LaPaulaSchmidt
Un aporte de nuestro Director Christian Schmidt
A propósito del ” Proyecto de Nueva Constitución”, se adjunta link de parte de una entrevista a Jaime Guzmán por Don Francisco, previo a la votación de la propuesta de Constitución de 1980.” ( Jaime Guzmán, posteriormente fue asesinado por terrorista)

 https://youtu.be/p2i2eDauCQw

Un aporte de nuestro Director Enrique Villalobos A.

Columna de Opinión

PERLA O´HIGGINIANA N° 3-2020. LA ICONOGRAFIA DE DON BERNARDO. por Mario Barrientos Ossa

 PERLA O´HIGGINIANA N° 3-2020. LA ICONOGRAFIA DE DON BERNARDO. por Mario Barrientos Ossa

LAS OPINIONES EN ESTA SECCIÓN, SON DE RESPONSABILIDAD DE SUS AUTORES Y NO REFLEJAN NECESARIAMENTE EL PENSAMIENTO DE LA UNIÓNPERLA O´HIGGINIANA N° 3-2020.

LA ICONOGRAFIA DE DON BERNARDO. Mario Barrientos Ossa

Oleografía de Don Bernardo O' Higgins | Artículos Militares

Siempre ha surgido en nosotros una inquietud natural:¿cómo era en vida, físicamente, nuestro Libertador? Cómo nos gustaría tener su figura material ante nuestra vista, y apreciar su estampa. No queda nadie que lo haya conocido en persona que pueda ilustrarnos. Recurrimos, entonces, a la iconografía.

Entendemos por iconografía, conforme nos lo dice el Diccionario , en su segunda acepción, la “representación o imagen de un personaje o de una realidad determinados”.

Tal representación se hace efectiva mediante la pintura, la escultura u otras manifestaciones artísticas, a través de las cuales, los seres humanos intentamos preservar la imagen de un personaje. Combatimos el paso fugaz del tiempo creando figuras que amarran a la materia esas imágenes que la vida extingue. Recordemos que, en el caso de los grandes personajes, ellos no mueren, solo se desvanecen en las sombras del tiempo. Los rescatamos desde allí con los pinceles del pintor, con el martillo del escultor, con todo lo que el talento humano es capaz de crear para luchar contra el devenir de la vida.

Don Eugenio Orrego Vicuña, en el año 1937, con el patrocinio de la Universidad de Chile, publicó su obra “Iconografía de O´Higgins”ii , y de ella nos valdremos para exponer lo que luego decimos.

En la obra mencionada, su autor describe minuciosamente las pinturas, esculturas, monumentos y otras manifestaciones gráficas que han permanecido en los años, unas creadas mientras el Libertador vivía, otras originadas con posterioridad, sea por encargo, sea por la espontaneidad del autor. Determinar con certeza la efigie de don Bernardo es tarea difícil, no es materia pacífica, porque los numerosos cuadros que lo representan, muestran imágenes diferentes, si no contradictorias, de su rostro, de su corporeidad, de su estampa, lo que da origen a discusiones no menores en el ámbito de nuestra historia patria.

El Estado de Chile asumió una imagen del rostro de don Bernardo, que lo hizo aparecer en billetes fiscales y en estampillas de Correos, hoy piezas de colección, los que son elementos importantes de su iconografía, pero que no parecen adecuarse a la verdad histórica. Y esto lo afirmamos porque, cuando posteriormente, el mismo Estado estampó en el cuño de las monedas el rostro del Libertador, apareció con rasgos diferentes, es decir, se cambió la percepción de su efigie.

Entre las pinturas del Libertador, destacan claramente las confeccionadas por el pintor peruano, un tiempo avecindado en Chileiv, José Gil de Castro, quien pintó a otros notables próceres, tales como San Martín y Bolívar, para nombrar los más conocidos. Posteriormente, pintó a don Bernardo en Perú, en su ostracismo de Cañete.

La virtud y verosimilitud de estas pinturas, descansan en que don Bernardo posó para Gil en persona, lo que es prenda de exactitud. Los otros retratos no tienen esta misma condición, tan favorable.

Don Pedro Lira, destacado pintor y crítico de arte, expresó acerca de la obra de Gil: “En su pintura rudimentaria, las figuras son tiesas, pobre el colorido y casi nulo el claro-oscuro, pero hay mucha sinceridad en el estudio de las fisonomías y de los detalles”v

Orrego, en su obra citadavi , expresa que, luego de un prolijo estudio, concluye que tres retratos, salidos del pincel de Gil, pueden considerarse como los que expresan de un modo auténtico la iconografía de nuestro Libertador. Menciona, asimismo, una talla en madera, confeccionada por un famoso tallista, don Ambrosio Santelices.

Los tres retratos de Gil, son: el primero, de 76 centímetros de alto por 58 de ancho, perteneció a Vicuña Mackenna, que lo tuvo en su gabinete de trabajo en la Quinta del Camino de Cintura, en Valparaíso, quien lo consideraba el mejor y el más auténtico del Libertador. El segundo, fue pintado en Montalván, mide 44 y medio centímetros de alto por 34 de ancho, en el cual la fisonomía de don Bernardo está más afinada. Y la tercera pintura, también confeccionada en Montalván, de 60 centímetros de alto por 49 de ancho, representa al Libertador pasada ya la edad de 55 años, pero vigoroso todavía y juvenil en la expresión.

De los tres retratos mencionados, en los cuales don Bernardo posó, podemos extraer lo que entendemos era la fisonomía auténtica del Libertador. En los tres se conservan los mismos rasgos, modificados por el paso del tiempo, pero manteniendo su autenticidad.

Los detalles los examinaremos en una crónica posterior.

i Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española. Ii Eugenio Orrego Vicuña, “Iconografía de O´Higgins”, Universidad de Chile, Imprenta de Prisiones, 1937, iii La primera emisión postal fue con motivo de la conmemoración del centenario de la Independencia Nacional. Aparece en siete de las catorce piezas en que consta (opus cit). iv O´Higgins le dio el grado de capitán de ingenieros, y tuvo el honor de ser nombrado miembro de la Legión de Mérito. Hacia 1822 regresó al Perú. v Citado por Orrego. Vi Página 10.

 Un aporte de nuestro Vicepresidente Gustavo Basso C,

Columna de Opinión

INUNDACIONES EN ALEMANIA: ¿LA CULPA ES DEL CAMBIO CLIMÁTICO? Victoria González 8 Muy Interesante, 21/07/2021)

INUNDACIONES EN ALEMANIA: ¿LA CULPA ES DEL CAMBIO CLIMÁTICO? Victoria González 8 Muy Interesante, 21/07/2021)

LAS OPINIONES EN ESTA SECCIÓN, SON DE RESPONSABILIDAD DE SUS AUTORES Y NO REFLEJAN NECESARIAMENTE EL PENSAMIENTO DE LA UNIÓN

“Las inundaciones en Europa son una demostración aleccionadora de cómo incluso los países más desarrollados no están preparados para los impactos del cambio climático”,

Las graves inundaciones que asolan estos días Alemania y Bélgica están dejando a su paso personas muertas y desaparecidas, así como pueblos totalmente arrasados. Como cada vez que ocurre un fenómeno meteorológico extremo de este calibre, cabe preguntarse si se trata de otra de las consecuencias del cambio climático.

Aunque es muy atrevido considerar que cada fenómeno meteorológico extremo – un huracán, una inundación, una ola de calor…- que tiene lugar en la Tierra es atribuible al cambio climático, sí que sabemos que estos van a ser más intensos y deberíamos, por tanto, estar mejor preparados para los mismos.

“Las inundaciones en Europa son una demostración aleccionadora de cómo incluso los países más desarrollados no están preparados para los impactos del cambio climático”, ha explicado a Science Media Centre la profesora asociada del Departamento de Geografía y Ciencias Ambientales de la Universidad de Reading.

“Se espera que los eventos de lluvias intensas de verano ocurran con mayor frecuencia bajo el cambio climático, y los gobiernos nacionales y locales deben tomar conciencia del peligro y asegurarse de que se tomen las medidas adecuadas para evitar el número inaceptable de muertes que se han reportado a partir de este evento. Las inundaciones en Londres a principios de esta semana advierten que no somos inmunes a este tipo de impactos de inundaciones en el Reino Unido y debemos aprender nuestras propias lecciones de este desastre”.

La profesora de Hidrología de la Universidad de Reading Hannah Cloke coincide en este diagnóstico: “Este tipo de lluvias torrenciales repentinas son exactamente lo que esperamos que suceda en un planeta que se calienta a gran velocidad. El hecho de que otras partes del hemisferio norte estén sufriendo olas de calor e incendios sin precedentes debería servir como recordatorio de que nuestro clima podría volverse mucho más peligroso”.

Falta de previsión. Los expertos coinciden en que los planes de adaptación al cambio climático, que incluyen estar mejor preparados para eventos de este tipo, son imprescindibles en este contexto de cambio global.

 

Recopilamos las opiniones de distintos expertos sobre las devastadoras inundaciones que asolan Centroeuropa y sobre otros factores humanos, ajenos al cambio climático, que han sido determinantes en la catástrofe. ¿Cuáles son? 

“El problema de las inundaciones es la falta de aceptación de la incertidumbre. Por lo general no se tienen preparados protocolos para estos casos, como tampoco para las olas de calor o los incendios. Se asume que las cosas van a funcionar en el régimen promedio, y no se preparan las alternativas para los casos extremos”, explica Antonio Ruiz de Elvira Serra, catedrático de Física Aplicada en la Universidad de Alcalá, en un artículo publicado por The Conversation.

“En todo el planeta solo los huracanes tienen protocolos preparados frente a la incertidumbre de sus ocurrencias, trayectorias e intensidades. El resto de los fenómenos atmosféricos u oceánicos extremos parece que resultan siempre sorprendentes. Cuando ocurrió con la gran nevada de enero en España, no había nada preparado para enfrentarse a ella, de forma que los ciudadanos tuvimos que estar más de una semana aislados en los domicilios. Esta vez, en Alemania, un país muy organizado, no había protocolos para controlar la inundación. Y sin embargo se sabe perfectamente que estos fenómenos extremos están aumentando su frecuencia e intensidad, como consecuencia del cambio climático.

No solo el cambio climático, hay otra causa de origen humano. Además, otro asunto que muchas veces pasa desapercibido cuando se producen grandes inundaciones como las de Alemania o se producen las famosas DANA en el Mediterráneo tiene que ver con la planificación urbanística.

“La expansión urbana ha pavimentado espacios verdes y ha canalizado los ríos. Hemos construido casas en llanuras aluviales ahora se inundan mientras canalizaban el exceso de agua río abajo hacia otros lugares. El cambio climático está cambiando el clima, pero el desastre también ha sido promovido por otras acciones humanas a largo plazo”, concluye el profesor de Desastres y Salud en el University College de Londres Ilan Kelman en declaraciones a Science Media Centre.