Columna de Opinión

Homenaje UNOFAR Vª Región a la Fuerza Aérea de Chile. Discurso del Co-Presidente Don Francisco Alomar

Las opiniones vertidas en esta columna de opinión, son de exclusiva responsabilidad de sus autores y no reflejan necesariamente el pensamiento de UNOFAR
La Fuerza Aérea ha sido y se ve y seguirá siendo un tremendo aporte en la asistencia oportuna con sus medios en emergencias nacionales, en las RREE con otros países y apoyo activo al desarrollo nacional en labores cotidianas dentro del rol subsidiario del Estado.

21 de Marzo de 2011

Es para mí un honor representar a la Unión Nacional de oficiales en retiro de las FF AA y Carabineros en la V Región en este homenaje a nuestra Fuerza Aérea con motivo de conmemorar su fructífero 81 aniversario desde su creación en 1930.
Ya desde 1913, la Escuela Aeronáutica Militar había iniciado con el Capitán Manuel Avalos Prado, la instrucción de las habilidades y conocimientos para volar en aviones de las FF AA que requerían de instrucción en una nueva misión y formación de hombres en el fuero militar, disciplinados, capaces y muy audaces.
Han pasado los años de aquella creación de la noble Fuerza Aérea de Chile, naciendo con los medios de los servicios aéreos de las otras instituciones de la defensa nacional, adelantando la impronta de esta nueva institución militar. Nace desde lo más profundo de la fuerza existente, este grupo de selección que con alrededor de 200 hombres inician el desafío de resguardar los intereses patrios, mediante su acción en el espacio aéreo, con su comercio e industria aeronáutica.
Que acertada visión de aquellos que motivaron la generación de esta nueva fuerza en defensa de nuestra patria, ahora en las alas de la mística y el profesionalismo.
La conquista del espacio aéreo sin duda ha tenido presente siempre el crecimiento de la familia aérea y el fortalecimiento permanente del material adecuado para lograrlo.
Que felicidad habrían tenido los fundadores si vieran hoy como los desafíos se van cumpliendo con la misma fuerza de antaño, con la convicción y perseverancia, presente en todos los integrantes de la Fuerza Aérea de Chile.
Su calidad y consigna de ampliar el control aéreo fuera de los límites nacionales ya eran hitos que se iban cumpliendo en la historia, con Dagoberto Godoy, volando hacia mas allá de la cordillera de Los Andes, Roberto Parraguez hacia el Océano Pacífico, Arturo Parodi Alister a la Antártica y hoy con ejercicios de entrenamiento en el extranjero (Brazil, RAF británica) nuestros F-16 y aviones de comunicaciones , reaprovisionadores de combustible, proveen hoy la disuasión necesaria con otras fuerzas de defensa, que pueden cumplir a cabalidad las misiones de destrucción estratégicas , donde y cuando se les ordene, sin obstáculos si los intereses de Chile así lo demandan.

Junto a lo anterior señalado, es notable el resultado y esfuerzo obtenido en el desarrollo actual de su armamento, con la especial preocupación en la capacidad de destrucción, precisión, exactitud y velocidad para una acción moderna, lo que deja ver la labor eficiente de su gente en el logro de óptimos resultados profesionales y eficacia en el uso de la tecnología. Sin duda eso es lo que verdaderamente disuade.
La Fuerza Aérea ha sido y se ve y seguirá siendo un tremendo aporte en la asistencia oportuna con sus medios en emergencias nacionales, en las RREE con otros países y apoyo activo al desarrollo nacional en labores cotidianas dentro del rol subsidiario del Estado.
El apoyo satelital y remotos, en desarrollos propios, especialmente en la perseverante labor de su sostenimiento, donde en el día a día en la instrucción y trabajo sacrificado se obtiene la calidad del hombre mejor, que demanda la identidad actual en nuestra sociedad humanista, cumpliéndose con creces la futura aspiración institucional siempre en el deber militar.
Festejar esta noble institución, de valores permanentes arraigados en la constante de su historia, nos permite agradecer y rememorar en sus hechos el ejemplo en el cumplimiento del deber y vivir el vencer o morir, haciendo nuevos equipos humanos que nos han enseñado desde sus primeros días, la creación de sinergía colegiada que interpreta tan bien su tradicional himno “Camaradas de la vida”.
A esas águilas blancas también camaradas, que sufren hoy la mentira y el odio en la diabólica y siniestra discriminación política concertada, que los mantiene recluidos, también nuestro homenaje y desde aquí continuaremos luchando para terminar con la verdad de la mentira, devolviendo al águila, la justa y merecida libertad en una patria agradecida.
A los queridos integrantes de la Fuerza Aérea, guardianes del honor y salvaguardadores de nuestra libertad, les deseamos un gran liderazgo y éxitos profesionales que contribuyen a las misiones de las FF AA en el espacio aéreo, continuando con la prestigiada huella de su heroica historia y se fundan en la unidad del corazón militar, proyectado siempre por la grandeza y el amor a la patria.
Muchas gracias

Nota: Ver foto asamblea en archivo adjunto