TANTO VA EL CÁNTARO A LA FUENTE por Humberto Julio Reyes —–QUE VIVAN LOS ALARMISTAS por Cristián Warnken El Mercurio, Columnistas, 10/02/2022 —– EVOLUCIÓN Y PROYECCIONES DEL USO DE BIG DATA EN DEFENSA 2021. Cuaderno de Trabajo N° 9- 2021de la ANEPE
Las opiniones en esta columna son de responsabilidad de sus autores y no reflejan necesariamente el pensamiento de la Unión.
Quisiera, al igual que muchos, que los condenables incidentes no se repitieren pero ¿Cuál es la probabilidad de que lo dejen trabajar en paz o que goce esta vez de la protección eficaz de la fuerza pública como espera todo ciudadano que respeta la ley y paga sus impuestos?
A medida que se aproximaba otro viernes confieso que un sentimiento mezcla de angustia e impotencia me ha ido dominando.
¿Volverán mañana los “jóvenes manifestantes”, en jerga periodística, a entretenerse vandalizando nuestra querida Fuente de tan gratos recuerdos?
¿Seguirá resistiendo el señor Siri, solo y desamparado, a la turba que lo ha elegido para descargar su instinto destructivo en reemplazo del desaparecido monumento?
Quisiera, al igual que muchos, que los condenables incidentes no se repitieren pero cuál es la probabilidad de que lo dejen trabajar en paz o que goce esta vez de la protección eficaz de la fuerza pública como espera todo ciudadano que respeta la ley y paga sus impuestos?
Veamos:
Si no bastare con la evidente satisfacción que determinadas personas experimentan al agredir y destruir lo que se ponga por delante, existe todo un ambiente propicio para que los vergonzosos incidentes continúen.
La oposición política que sigue callando al respecto mientras tozudamente persiste en amnistiar los delitos cometidos en un determinado período pero sólo por parte de los delincuentes y no por quienes pudieran haberlos cometido al tratar de hacer respetar la ley de acuerdo a su ineludible deber.
Un INDH que, aunque tomado hace más de medio año, saca inmediatamente la voz para advertir a los agentes del Estado que estará alerta para controlarlos y asegurarse que no se exceden en el uso de sus atribuciones lo que sería innecesario a menos que se busque inhibirlos.
Unos convencionistas que superándose en sus desvaríos (sí, ello es posible, recordando que Murphy decía que siempre puede ser peor) proponen ahora amnistiar “a futuro” lo que equivale a un grotesco llamado a actuar en la absoluta impunidad.
Una autoridad responsable del orden público que para decir lo “políticamente correcto” ha reprochado al Sr. Siri que usara un arma de aire comprimido para intentar disuadir a los “manifestantes”. ¿Y si acaso el Sr. Siri sintiendo amenazada su vida o la de sus clientes y empleados hubiera usado un arma de fuego no habría estado en su derecho ante la ineficacia de la fuerza pública?
El Imbunche
Son muchas las voces —afortunadamente— que están encendiendo las alarmas, desde distintas sensibilidades, sobre los peligros que se ciernen sobre Chile y nuestra democracia, por las propuestas que están siendo aprobadas en las comisiones de la Convención.
Ya no es solo el alarmismo habitual de una cierta derecha que durante décadas (las décadas de la Concertación, que hoy añoran) decía igual que el personaje de un viejo cuento: “viene el lobo, viene el lobo” y el lobo no venía… Hasta que el lobo llegó: el lobo de la avidez y desmesura refundacional en este caso, pero ya nadie le cree.
No. Esta vez son alarmas bien fundadas, que vienen desde gente de centro, centroizquierda e incluso izquierda, que votaron “apruebo” en el plebiscito y que hoy se sienten complicados ante muchas propuestas que parecieran encaminadas más a deconstruir el Chile republicano que a proponer una Constitución que nos represente e incluya a todos.
Hay quienes están advirtiendo, incluso, que habría algunos peligros para la soberanía territorial de Chile en algunos artículos de las resoluciones de las comisiones.
“El gran peligro no es solo que los delirios sean aprobados por los dos tercios, sino que se termine redactando un ‘imbunche’ “. |
La plurinacionalidad propuesta —por ejemplo—, inspirada en las ideas de Evo Morales (quien estará muy contento con esto), apuntaría a convertirnos en una corta y angosta faja de tierra, no en el país que somos. Se cumpliría con ello la frase de Parra: “creemos ser país/ y somos apenas paisaje”.
Entre quienes están señalando esto, está el experto en temas internacionales y Premio Nacional de Humanidades José Rodríguez Elizondo, destacado intelectual, del que nadie podría decir que es un opinólogo alarmista.
Este tema va más allá de diferencias entre derechas e izquierdas. Y es solo un botón de muestra de muchos otros desvaríos que están tomando cuerpo en la Convención y que preocupan a demócratas y gente pensante y seria de todos los sectores.
Óscar Guillermo Garretón, economista y ex-subsecretario de Economía del gobierno de Allende, nos hace ver que las nacionalizaciones propuestas llevarían al país a la ruina y que parecen pensadas por personas que no vivieran en nuestro siglo XXI globalizado: como si alguien viajara desde los años 70 hacia el futuro, a aplicar fórmulas fracasadas en todas partes del mundo al Chile de hoy.
Mario Waissbluth, ingeniero y fundador de Educación 2020, quien tiene una evaluación muy positiva de Boric y su futuro gobierno y su gabinete, ante las propuestas de la Convención, en cambio, afirma: “tengo mis escasos pelos completamente parados de punta”. Dice que los redactores de estas propuestas en sus entrevistas “suenan a escolares de segundo medio” (entre ellos, una “dama explicando cómo se podrían producir autos con litio como en Bolivia”) y “causan una mezcla de risa con llanto”.
¿Lo acusarán también de anticiparse demasiado a una improbable debacle? ¿Pero de qué serviría encender las alarmas cuando ya sea demasiado tarde y no tengamos a quién decirle: “¿y ahora, quién podrá defendernos?”.
El gran peligro no es solo que los delirios sean aprobados por los dos tercios (si eso ocurriese, no hay nada más que hablar, sino el rechazo puro y duro), sino que se termine redactando un “imbunche”, un texto que intente satisfacer (y calmar) en algo a los más radicales (que no son pocos) para no llegar al fiasco de no tener texto que presentar al país.
Un mamarracho que haría revolcarse en su tumba a Andrés Bello.
Por eso, no se burlen ni desprecien tan rápido a los alarmistas; en tiempos en que la democracia en el mundo está tan frágil y vulnerable, ellos cumplen una función. Sobre todo, los que, como Garretón y Elizondo, tenían la edad de Boric cuando vivieron la derrota y la tragedia de los 70.
Lo dijo Han Jonas en su libro ‘El Principio de la Responsabilidad’: “Se profetiza la catástrofe, para impedir que llegue. Y sería el colmo burlarse de los alarmistas si la situación no llegó a un punto tan extremo. Su mérito tal vez resida en quedar burlados”. Diversas autoridades, que tienen alguna responsabilidad en este aparente dejar hacer, nada dicen o hacen al respecto.
La “denuncia” de alguien que “pasaba por ahí” y fue impactado por el arma que manipulaba del Sr. Siri y que fue rápidamente recogida por cierta prensa.
Si las diversas expresiones de simpatía o apoyo al Sr. Siri son más bien de carácter testimonial por las duras circunstancias que enfrenta una empresa que a muchos nos ha brindado gratos momentos por mucho más que los repudiados “treinta años” en lugar de promover alguna acción más decidida.
¿Cuál sería entonces la probabilidad que mañana viernes se den un descanso quienes hasta ahora persisten en una abierta forma de desprecio por nuestra legalidad y el derecho de sus semejantes a vivir en paz?
Aunque uno quisiera que fuera alta, el realismo lleva a considerarla muy baja. Quiera Dios que me equivoque.
¿Las manoseadas palabras solidaridad y empatía no aplican a la indefensión en que se encuentra este ciudadano chileno ya por más de dos años ante la indiferencia de gran parte de nuestra clase política?
Lo anterior me lleva a recordar a un personaje a quien nada lo hastiaba más que la política, como no fuesen los políticos (Agatha Christie en “The secret of Chimneys”).
Aunque ficticio me interpreta absolutamente.
10 de feb. de 22
2021
ANDREA LODEIRO ENCINA
Resumen:
Con el propósito de contar con algunas estimaciones acerca de cómo big data
puede dar respuesta a los desafíos estratégicos actuales e identificar las brechas
que representan el desarrollo asimétrico de estas capacidades, tanto en el entorno
regional como nacional, el presente Cuaderno de Trabajo aborda la evolución de esta
noción; el desarrollo de capacidades de Defensa en torno a estas tecnologías por
parte de EE.UU., Reino Unido e Israel y otros ejemplos; la respuesta de las industrias
del sector y los desafíos que representan estas tendencias para Chile. El análisis
sobre el “estado del arte” se prevé que contribuya a sistematizar el panorama sobre la
versatilidad de las aplicaciones de big data en el ámbito de la Defensa y los procesos
que le competen a su implementación.
Ver en: https://www.publicacionesanepe.cl/index.php/cdt/issue/view/118