U al dia

Invitación a Asamblea General de Socios en Santiago y UNOFAR Va Región (Ver invitación en filial Va Región); Saludo del Almirante Jorge Martínez Busch al Pdte. de UNOFAR

Asumirá la Presidencia el General de Brigada Aérea Sergio Contardo Flores para el período 2010-2011. Con posterioridad a esta Asamblea, se le invita a un almuerzo de camaradería en los comedores del Club

Estimado Socio

Humberto Julio Reyes, GDB Presidente de la Unión de Oficiales en Retiro de la Defensa Nacional tiene el agrado de invitar a usted a la “Asamblea General de Socios” a efectuarse el día lunes 06 de diciembre de 2010 a las 11:45 horas, en el Club de Oficiales de la Fuerza Aérea de Chile (Agustinas 741, Santiago (frente al Teatro Municipal de Santiago).

En la  oportunidad se efectuará el informe del período y asumirá la Presidencia el GBA Sergio Contardo Flores para el período 2010-2011.  Con posterioridad a esta Asamblea, se le invita a un almuerzo de camaradería en los comedores del Club.

El GDB Julio agradecerá su participación en este importante evento de la Unión.

Santiago, noviembre de 2010.

 Saludo al Presidente de UNOFAR

Distinguido General y Amigo:

Le hago llegar mis cordiales felicitaciones por la conducción de Unofar. La revista que han publicado siempre atrae el interés y sirve para mantenerse informado, sin olvidar la situación de abuso de poder a que muchos de nuestros camaradas se encuentran sometidos por ciertas autoridades del Poder Judicial apoyadas por políticos resentidos.

Un gran abrazo.Jorge Martínez Busch

U al dia

UN NUEVO ANIVERSARIO DE NUESTRA UNIÓN

En la actualidad, gracias a una activa campaña de promoción de ingresos, a la que invitamos a todos nuestros socios a sumarse, nos acercamos nuevamente a los 1000 adherentes, habiendo tramitado además una modificación a nuestros estatutos que permite la incorporación de oficiales en retiro de Carabineros de Chile y de empleados civiles con categoría de oficial, todos ex servidores de la Defensa Nacional

 
 
                                            La Unión de Oficiales en Retiro de la Defensa Nacional ha cumplido 47 años de existencia, acercándose al medio siglo de edad.
                                            Fundada en un período en que la Defensa Nacional experimentaba una evidente postergación en las prioridades del gobierno de la época, se apuntó inicialmente a buscar soluciones a una serie de necesidades del personal en retiro, sin descuidar lo relativo a nuestra soberanía, como queda constancia mediante la creación de una sección “Frontera Patagónica” y la aspiración de “crear espíritu nacional sobre la defensa de fronteras”.
                                            Numerosas inserciones y oficios a las autoridades responsables dan cuenta de la incansable actividad de sus fundadores, entre quienes es de justicia mencionar a quien fue justamente apodado “el artífice de la Unión”, Coronel Romeo Barrientos Rosas.
                                            Avanzado el tiempo, de la Unión surgieron las organizaciones gremiales que hoy se abocan principalmente a los temas de esta naturaleza, la Asociación Gremial y la Cámara “Chile mi Patria”.
                                            La difícil coyuntura que en la actualidad afrontan judicialmente muchos de nuestros camaradas, mayoritariamente en situación de retiro, nos ha llevado a priorizar este aspecto, sea actuando coordinadamente con otras organizaciones que persiguen que se respete la igualdad ante la ley o directamente mediante nuestra revista Unofar, cuyo número 22 está próximo a publicarse.
                                            No hemos abandonado el proyecto de editar una historia de la guerra que no fue, la crisis vecinal de 1978, la más grave afrontada por nuestro país en el siglo XX y felizmente superada por la hábil conducción del Gobierno Militar encabezado por el General Augusto Pinochet Ugarte.
                                            También hemos logrado revertir últimamente la tendencia decreciente en el número de nuestros socios.
                                            Al cumplir 38 años, contábamos con 1144 socios, pero con posterioridad esta cifra se fue reduciendo progresivamente, quizás por cierta proliferación de nuevas organizaciones y también por desinterés en ingresar.
                                            En la actualidad, gracias a una activa campaña de promoción de ingresos, a la que invitamos a todos nuestros socios a sumarse, nos acercamos nuevamente a los 1000 adherentes, habiendo tramitado además una modificación a nuestros estatutos que permite la incorporación de oficiales en retiro de Carabineros de Chile y de empleados civiles con categoría de oficial, todos ex servidores de la Defensa Nacional.   
                                           
A quienes sean escépticos respecto a esta última medida les recordamos que fue nuestra unión en 1973 y 1978 lo que hizo posible rescatar a la Patria de sus mayores amenazas interna y externa. 
Hoy en día enfrentamos también a un enemigo común, representado por el odioso lema “ni perdón ni olvido”. Unidos podemos derrotarlo.
Tengamos fe. Mientras más seamos nuestra voz podrá escucharse con más fuerza.
Finalmente contamos con una página en Internet que está abierta a las opiniones y colaboraciones de nuestros socios, procurando mantenerlos informados por está vía respecto a situaciones puntuales.
Hemos incorporado últimamente una sección donde nuestras filiales pueden subir la información que les interese.
Invitamos a nuestros socios a visitarla e indicarnos cómo podemos mejorarla y hacerla más interactiva.
2010-10-24 
U al dia

JUSTIFICADA ALEGRÍA

Quisiéramos que el supremo gobierno pueda actuar en la solución de los conflictos planteados por diversas minorías étnicas con sabiduría y prudencia, pero haciendo respetar integralmente el estado de derecho y sin efectuar concesiones que lleven el germen del separatismo o establezcan privilegios que puedan alentar mayores exigencias a futuro.

 

Tras setenta días de angustia y denodados esfuerzos ha terminado felizmente el rescate de los 33 mineros que nos han dado un ejemplo de entereza y fe.
            Hay justificadas razones para estar alegres y optimistas.
            El eficaz empleo de todos los recursos humanos y tecnológicos que fueran apropiados para la difícil tarea hizo posible lo que seguramente muchos considerarán un verdadero milagro.
            ¿Cuántos imponderables podrían haber hecho fracasar parcial o totalmente los intentos de rescate?
            Imaginamos que todo creyente, en particular los rescatados y sus familias, ha expresado su profundo agradecimiento a Dios.
            El país y especialmente las autoridades responsables han dado un ejemplo de acertada dirección y unión de propósitos.
            ¡Cómo progresaríamos si todo desafío se enfrentara con igual resolución!
            Superado felizmente este accidente debemos volver la vista hacia los otros desafíos pendientes, dentro de los cuales sigue teniendo primera prioridad la reconstrucción de las zonas devastadas por el sismo del 27 de febrero.
            Esta tarea de largo aliento también requiere de unidad de propósitos, tanto en la dirección como en la ejecución, resultando por ello de negativos efectos la constante activación de diversos conflictos que apuntan precisamente en la dirección contraria.
            Quisiéramos que el supremo gobierno pueda actuar en la solución de los conflictos planteados por diversas minorías étnicas con sabiduría y prudencia, pero haciendo respetar integralmente el estado de derecho y sin efectuar concesiones que lleven el germen del separatismo o establezcan privilegios que puedan alentar mayores exigencias a futuro.
            Que esos nubarrones de tormenta no lleguen a oscurecer nuestro cielo que por estos días nos ha parecido más azulado que nunca.
2010-10-15
U al dia

SOLIDARIDAD IDEOLÓGICA Y CONSECUENCIA

Resulta irónico que se pretenda que la justicia chilena, que ha perseguido eficazmente a quienes tuvieron que enfrentar al terrorismo, no ofrezca garantías de juicio justo para alguien que tuvo activa participación en actos terroristas.
 
            Sorprendente hubiera sido que se concediera la extradición del frentista Galvarino Apablaza.
            La negativa de las autoridades administrativas argentinas, a pesar del dictamen de su propia Corte Suprema que consideraba que no procedía conceder el solicitado refugio político, sólo pone en evidencia lo que muchos sostenemos invariablemente:
            La solidaridad ideológica de la izquierda tiene absoluta prioridad por sobre cualquier otra consideración.
            Es lo que algunos llaman “consecuencia”.
            Resulta irónico que se pretenda que la justicia chilena, que ha perseguido eficazmente a quienes tuvieron que enfrentar al terrorismo, no ofrezca garantías de juicio justo para alguien que tuvo activa participación en actos terroristas.
            Casi se podría anticipar que, de haber sido sometido a proceso en Chile, se le habrían aplicado todas las figuras jurídicas que son desconocidas cuando de juzgar uniformados se trata y pronto estaría libre de polvo y paja.
            En este caso no sólo ha operado la solidaridad ideológica para frustrar el tardío intento de aclarar un crimen alevoso, sino que también un desconocimiento de la realidad nacional que llega al absurdo.
            Pero, lamentablemente, debemos reconocer que en este tema, así como en muchos otros, han terminado por imponerse las sesgadas versiones de la izquierda más dura.
            Pese a que recientemente la Corte Suprema de Justicia pronunció su centésima condena en causas referidas a la represión del extremismo, se sigue sosteniendo majaderamente que en nuestro país ha existido impunidad para los uniformados, ocultando que ella se ha aplicado a los terroristas, todos amnistiados, indultados y en libertad, situación que les ha permitido volver a delinquir, ahora sin el pretexto de “combatir a la dictadura”.
            Pero lo más triste y vergonzoso quizás ha sido la justificación del asesinato (“ajusticiamiento” para sus verdugos) del Senador Jaime Guzmán Errázuriz (QEPD), por tratarse de un “ideólogo de la dictadura”.
            Él, para la izquierda, no tenía derechos humanos. Eso es “consecuencia”.  
2010-10-02 
             
U al dia

Saludo Bicentenario UNOFAR Va. Región

Saludo del Presidente UNOFAR Va Región

Francisco Alomar Marchant CF. ®, Presidente de la Unión de Oficiales en Retiro de la Defensa Nacional (UNOFAR), Sede V Región, junto al Directorio y Socios les desean, con pena y alegrías, a todos los Oficiales en Retiro de las FFAA y de Orden  que tengan unas felices fiestas en los 200 años de Chile y Glorias del Ejército,  junto a sus seres queridos.

 

¡¡¡Hoy más que nunca nos sentimos y estamos unidos de corazón con nuestros presos políticos!!! 

 

                  

 

 

 

  

 

 

                                  

 

 

 

                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                         Valparaíso, Septiembre de 2010

U al dia

LA IGUALDAD ANTE LA LEY, SIEMPRE, SIN EXCLUSIONES

En la realidad, no todos podemos celebrar, especialmente cuando persisten situaciones que obligan a mirar el futuro con menos optimismo que el que se proclama. Para nuestros compatriotas que aguardan esperanzados su rescate desde las profundidades de la tierra, así como para sus familias y amigos, el festivo ánimo generalizado quizás sea sólo un alivio para su aflictiva situación. Para otros compatriotas que han resuelto mantener una huelga de hambre para presionar a las autoridades para que no se les apliquen las leyes vigentes, tampoco sería esta una ocasión de alegría. ¿Y para nuestros camaradas en prisión o que siguen enfrentando interminables procesos?. ¿Habría algo que celebrar?

 
            En estos días en que según las expresiones del Cardenal Francisco Javier Errázuriz, “Chile entero está de fiesta”, ¿qué sentido tiene insistir nuevamente en una de nuestras principales motivaciones?
            Lo que ocurre es que tan bien intencionada afirmación nos parece más bien un ideal que todos quisiéramos que se hubiera hecho realidad para poder recordar, sin sentimientos encontrados, los 200 años de la Primera Junta Nacional de Gobierno.
            En la realidad, no todos podemos celebrar, especialmente cuando persisten situaciones que obligan a mirar el futuro con menos optimismo que el que se proclama.
            Para nuestros compatriotas que aguardan esperanzados su rescate desde las profundidades de la tierra, así como para sus familias y amigos, el festivo ánimo generalizado quizás sea sólo un alivio para su aflictiva situación.
            Para otros compatriotas que han resuelto mantener una huelga de hambre para presionar a las autoridades para que no se les apliquen las leyes vigentes, tampoco sería esta una ocasión de alegría.
            ¿Y para nuestros camaradas en prisión o que siguen enfrentando interminables procesos?
            ¿Habría algo que celebrar?
            Ha habido numerosas y comprensibles demostraciones de apoyo, preocupación y solidaridad hacia quienes laboran diariamente en situaciones de alto riesgo y que todos quisiéramos que no se vuelvan a repetir.
            También se ha expresado en todo discurso la preocupación por los comuneros en huelga de hambre, así como los llamados a que depongan su actitud, mientras se avanza diligentemente para modificar la normativa legal, a posteriori.
            ¿Y para quienes sólo pretendemos el cumplimiento de la ley vigente?
            Salvo algunos llamados en abstracto a la unidad, que cada cual puede seguir interpretando a su manera, sólo el silencio generalizado, a excepción de una nueva intervención, solitaria e inequívoca, de la cual nos hemos permitido extractar el título para esta columna.
            Así se ha expresado, en parte, Clara Szczaranski, ante la pregunta ¿Qué desear para nuestro país?
            Bueno sería para la paz social no estirar ni restringir circunstancialmente las normas según nuestros intereses o militancias.
            Es posible y necesario concordar en un mínimo común denominador: la igualdad ante la ley, siempre, sin exclusiones. Debemos rehusar en conciencia emplear una norma de manera dispar según nuestra relación de simpatía o rechazo hacia los destinatarios de ella, evitar toda discriminación para hacer, así, realidad la organización jurídica de la sociedad, dejando atrás la ley del más fuerte.
            A muchos les vendría bien ponerse este sayo, comenzando por nuestra ilustre visitante, la Presidente de Argentina, quien dilata la requerida extradición de un terrorista pidiendo que ello no sea “dramatizado”.
            También podría hacerlo nuestro Ministro de Justicia, en lo que le es propio, o los jueces prevaricadores que fallan contra la ley expresa con tal de condenar a como de lugar.
            Cada lector podrá agregar nombres y cargos según su personal experiencia y podrá también intentar responder la pregunta:
            ¿Qué podemos celebrar? 
2010-09-20
U al dia

OTRO 11 DE SEPTIEMBRE

También, sin alterar el orden público ni ofender a quienes pudieran aun percibirnos como enemigos, hemos rendido homenaje a esos grandes hombres que asumieron la tremenda responsabilidad de encabezar la reconstrucción de un país al borde del abismo.

            Seguramente, nadie que no haya vivido los 1000 días de la Unidad Popular podrá entender y justificar el 11 de septiembre de 1973.
            Hace 37 años, y a la misma hora en que se escriben estas líneas, ya nos habíamos enterado de la identidad de nuestros primeros camaradas caídos.
            Todos muy jóvenes, todos subalternos.
            Ninguno deliberó ni participó de las decisiones que llevaron a reemplazar por la fuerza un gobierno caído en la ilegitimidad.
            Se limitaron a cumplir con su deber de obediencia, a costa de sus vidas.
            Honraron su juramento a la Bandera y murieron sin saber si su temprano sacrificio tendría valor y significado para nuestra Patria.
            Hoy los hemos recordado nuevamente en forma privada y respetuosa, con aprecio por los camaradas perdidos y rogando porque algo similar no vuelva a producirse en el devenir de nuestra sociedad.
            También, sin alterar el orden público ni ofender a quienes pudieran aun percibirnos como enemigos, hemos rendido homenaje a esos grandes hombres que asumieron la tremenda responsabilidad de encabezar la reconstrucción de un país al borde del abismo.
            Mientras ello sucedía en nuestra sede, una masiva manifestación se organizaba en las proximidades del palacio de La Moneda.
            El ambiente se apreciaba festivo, mientras predominaban banderas rojas y emblemas de los partidos que conformaban la Unidad Popular de triste recuerdo, junto con himnos y canciones de esos felizmente lejanos 1000 días.
            ¿Algo que celebrar?
            Probablemente la respuesta sea positiva para quienes han logrado imponer su sesgada versión de la Historia.
            Para quienes seguimos asumiendo todos los costos, nada habría que celebrar, sólo recordar con la esperanza de días mejores en un país más justo.
2010-09-11