Dirección de Comunicaciones Estratégicas del Ejército
Historia y Vigilia de Armas. Este acto recuerda a los 77 soldados de la gesta heroica de La Concepción, que en la Sierra peruana el 9 de julio de 1882, hace exactamente 140 años rindieron su vida por la Patria y la bandera.
5.573 soldados del Ejército de Chile, de ellos 1.158 mujeres y 4.415 hombres, en todas las unidades militares a lo largo del país, realizaron este 9 de julio, el acto de Jurar ante la Bandera Nacional, en representación de la Patria, comprometiéndose con valores, fidelidad y el cumplimiento del deber de servir a Chile.
El acto central de Juramento a la Bandera se llevó a cabo en la explanada del Templo Votivo de Maipú, y fue encabezado por el Presidente de la República, Gabriel Boric F., junto a la Ministra de Defensa Nacional, Maya Fernández A. y el Comandante en Jefe del Ejército, General Javier Iturriaga D.
En esta ceremonia principal, a la que asistieron las máximas autoridades del país, fueron 1.746 soldados, de ellos 464 mujeres y 1.282 hombres, entre oficiales, suboficiales, soldados de tropa profesional, alumnos de las escuelas matrices y soldados conscriptos, pertenecientes a las unidades de la Guarnición de la Región Metropolitana, quienes realizaron el acto de juramentar.
Inicialmente, luego de los honores de reglamento al Presidente de la República e izamiento del Pabellón Nacional, se dirigió a los presentes el Comandante en Jefe del Ejército, para resaltar el acto con el que se comprometen con el país. “Seremos testigos del compromiso solemne y público, que estos jóvenes adquirirán, ante SE el Presidente de la República, las máximas autoridades del país, sus familias, sus comandantes e instructores. Con su brazo derecho extendido, hacia la estrella solitaria de nuestra bandera nacional, jurarán servir fielmente a su patria y defenderla, incluso con su vida, si la protección de la soberanía y de sus ciudadanos, así lo requiriera”, sostuvo.
En este contexto, agradeció el trabajo de los comandantes e instructores en el proceso de formación para convertirlos en soldados disciplinados y comprometidos, al tiempo de asegurarles un permanente apoyo para su desarrollo personal y profesional.
Tras sus palabras, juraron ante la Bandera efectivos de las escuelas matrices, Comando de Educación y Doctrina, escalón Operaciones Especiales, II División Motorizada, Comando de Apoyo a la Fuerza, Comandancia General de la Guarnición Ejército Región Metropolitana y Comando de Industria Militar e Ingeniería.
Con posterioridad, el General Iturriaga intervino por segunda vez, para enfatizar en la responsabilidad adquirida en esta ceremonia y que deben cumplir durante su trayectoria militar. “Al regresar a sus cuarteles, lo harán con la satisfacción de haber cumplido mucho más que un rito militar, sino un compromiso de vida, con la patria y con ustedes mismos”, junto con destacar que la principal fortaleza de la Institución está en el personal, en los procesos de preparación y capacitación, pero “principalmente en su formación valórica, su disciplina y el cultivo de los principios que sustentan una profesión que debe ser eminentemente vocacional”, puntualizó.
Asimismo, detalló que esos valores han permitido al Ejército, al igual que a las otras instituciones de las FF.AA., de Orden y Seguridad, “apoyar a la población en las difíciles circunstancias que hemos debido enfrentar, durante los últimos años”, recordando a quienes fallecieron y sufrieron accidentes durante su empleo en los distintos Estados de Excepción.
En la misma línea, destacó que, junto con realizar los procesos de instrucción y entrenamiento, se cumple con las demandas que el Estado ha determinado, “para apoyar el normal funcionamiento del país y la seguridad de los ciudadanos”, en alusión al despliegue ante emergencias y al existente en la zona norte del país, apoyando los controles fronterizos afectados por la inmigración ilegal y en la macro zona sur, frente a los delitos que están afectando tan gravemente la vida de las personas. Cerró sus palabras, instándolos a continuar trabajando con la misma entrega que hasta ahora.
Luego se efectuaron las descargas de reglamento, y la correspondiente bendición y oración por el compromiso adquirido de servir a Dios y la Patria, por parte del Pastor Evangélico, Pedro Rubio C. y el Obispo Castrense, Monseñor Pedro Ossandón B., dando paso al tradicional desfile de honor.
Por su parte, el Presidente saludó a los juramentados y recordó a los 77 chacabucanos, “nos tiene que llenar de orgullo e incentivar nuestro actuar como esos valientes que no se rindieron por defender la Patria. Agradezco tremendamente y valoro profundamente el gesto de entrega que hacen con nuestra Patria, y como autoridades debemos hacer valer ese compromiso”, finalizando con “el Estado de Chile está orgulloso de ustedes”.
Historia y Vigilia de Armas. Este acto recuerda a los 77 soldados de la gesta heroica de La Concepción, que en la Sierra peruana el 9 de julio de 1882, hace exactamente 140 años rindieron su vida por la Patria y la bandera.
Por lo mismo, en esta fecha se conmemora también el Día Nacional de la Bandera, símbolo que fue acogido oficialmente el 18 de octubre de 1817.
Asimismo, se realiza la Vigilia de Armas, rito tradicional que se efectúa la noche previa al “Juramento a la Bandera”, para que los jóvenes que jurarán reflexionen sobre los desafíos que depara la carrera militar y los deberes hacia la Patria, “hasta rendir la vida si fuese necesario”.