La escuadra británica estaba en busca del Huáscar
La escuadra británica estaba en busca del Huáscar, cuando lo avistó el 29 de mayo de 1877 a las 13:00. El Huáscar se dirigía a tierra cuando el HMS Amethyst le cerró el paso y a las 14:11 el HMS Shah le lanzó un cañonazo para ponerlo al habla. El combate empezó a las 15:06 con los disparos del HMS Shah, seguidos por el del HMS Amethyst tres minutos después.
Intimidación
La escuadra británica estaba en busca del Huáscar, cuando lo avistó el 29 de mayo de 1877 a las 13:00. El Huáscar se dirigía a tierra cuando el HMS Amethyst le cerró el paso y a las 14:11 el HMS Shah le lanzó un cañonazo para ponerlo al habla. El contraalmirante De Horsey envió al teniente Rainier para que comunique al Comandante del Huáscar, el capitán Astete, que apresará el buque a consecuencia de actos ilegales que el Huáscar ha cometido contra súbditos, buques y propiedades británicas, que no procede en nombre del gobierno peruano, que si se entrega el buque serán respetadas la libertad de todos a bordo y desembarcados en un sitio neutral, en donde desee el comandante, pero en caso contrario, el Huáscar será tratado como buque pirata. El teniente Rainier regresó con la respuesta que el Presidente del Perú estaba a bordo, que el Huáscar no ha cometido ningún acto ilegal y que no arriarían la bandera.
La acción
El combate empezó a las 15:06 con los disparos del HMS Shah, seguidos por el del HMS Amethyst tres minutos después. Era en momentos que el Huáscar trataba de alcanzar el poco fondo frente a Ilo (Pacocha) aprovechando su menor calado, pero el Amethyst se movió para impedirlo y el fuego se abrió a mil yardas. Piérola arengó a su tripulación, jóvenes entusiastas sin mayor experiencia marina, con “Ya la revolución ha terminado, ahora no somos sino unos peruanos a quienes nos ha tocado en suerte defender el honor de nuestro pabellón y el de América entera”. El coronel Marcelino Varela y el teniente coronel Espinosa, presos con centinela de vista en un camarote, solicitaron que se les concediera un puesto cualquiera para participar en la lucha, por lo cual recibieron aplausos y abrazos de sus adversarios políticos.
El Huáscar era un blanco muy difícil de acertar pues sólo tenía 3 pies fuera del agua se mantuvo pegado a la costa y por esto el Shah, debido a su mayor calado, tuvo que mantenerse lejos e impedido de usar sus cañones. Astete esperaba que el Shah fuera en su persecución para hacerlo encallar, algo similar a lo ocurrido entre el BAP Independencia y la Goleta Covadonga dos años después. Desde la población, hubo algunos tiros de fusil por fuerzas gobiernistas, aunque cesaron al poco tiempo al darse cuenta de los serio de la agresión británica.
Los tiros más certeros fueron del HMS Amethyst, pero ninguno de estos pudo perforar el blindaje del Huáscar. Recién a las 16:36, el Huáscar dispara contra el Amethyst. Previamente, el Shah había disparado dos andanadas de estribor accionados eléctricamente al Huáscar.
Debido a su poca efectividad en los tiros, el Huáscar intentó usar su espolón contra los buques británicos alrededor de las 17:00, pero la buena maniobrabilidad de éstos, impidió que tuviera éxito.
A las 17:13 p. m. el Shah y el Huáscar estaban tan cerca, que el buque británico empleó su ametralladora Gatling y se hizo vivo fuego de fusilería entre ambos buques. Al minuto de eso, aprovechando que el Huáscar presentaba su costado, el Shah le disparó un torpedo Whitehead, pero el buque peruano puso su popa para esquivarlo.
Los fuegos cesaron a las 17:45, cuando ya estaba oscureciendo y el Huáscar estaba pegado a tierra y en línea con la población.