PUTIN, “EL NUEVO MEJOR AMIGO DE TRUMP”
Hitler y Stalin se repartieron Polonia. Trump y Putin se están repartiendo el negocio del petróleo de Medio Oriente y Rusia.
Trump rompe con décadas de política exterior de EE UU, para priorizar la normalización con Rusia. El presidente culpa a Zelenski, y no a Moscú, de la guerra: según él, debió aceptar la pérdida de territorio para evitar el conflicto Trump: “Cualquier negociador de medio pelo podría haberlo hecho”.
La última vez que Estados Unidos intentó un acercamiento a Rusia fue en 2009. La recién asumida Administración de Obama declaró el reinicio de las relaciones, botón de reseteo incluido. El experimento no acabó bien: cinco años después, en 2014, Rusia ocupó Crimea. Los dos países comenzaron, así, una larga era de sanciones mutuas.
Llama la atención la reticencia de EEUU y aun más de la UE, en aceptar que la Guerra Fría había concluído. Incluso cuando Rusia insinuó la posibilidad de que su país se incorporara a la OTAN. “Occidente”, bajo la batuta norteamericana siguió en la Guerra que había terminado, invocando la hostilidad rusa, su amenaza constante y sobre todo, su maldad irremediable heredada del maligno Imperio Soviético.
La OTAN -(EEUU / Biden)- siguió en sus afanes de expandirse, que culminaron con la incorporación de Suecia, Finlandia y finalmente el intento de incorporar a Ucrania.
Cambió el gobierno y las políticas de EEUU dieron una voltereta: Trump se lanzó a abuenarse con Rusia para orientar sus esfuerzos hacia China: Zelenski resultó ser un dictador, la OTAN hizo una de sus “verónicas” habituales y se hizo a un lado.
El ucraniano quedó solo, Europa sumida en preguntas existenciales, reticente a reducir su bienestar social para aumentar su gasto militar y dispuestas a hablar, hablar y hablar.
¿En qué estamos ahora? Rusia y EEUU conversan a solas en Arabia Saudita. En realidad la presencia de Arabia Saudita es clave. Se habla de Petróleo y Gas. Se habla de negocios descomunales a largo plazo. Los tres países unidos controlan la producción, refinación, transporte, venta y distribución de petróleo y gas a escala mundial Sin el menor recato Trump ha perifoneado que lo primero es que los tres hablen entre ellos y lleguen a acuerdo, Ucrania, sus muertos y su problemática es un side-show irrelevante.
Rusia y Arabia Saudita producen petróleo y pueden controlar el precio, EEUU controla su transporte y comercialización y en el proceso podría hacer su MAGA.
Es curioso que EEUU haya incluido la “Transferencia de Infraestructura” ucraniana en su pedida, además de las “tierras raras”, elecciones democráticas, entrega de territorios a Rusia y de materiales estratégicos: ¿Qué infraestructura?: Oleoducto desde Rusia a Oriente y desde Oriente a Europa.
En breve, el negocio es claro, la sociedad administra los precios y la competencia. Arabia Saudita y Rusia, le venden petróleo barato a EEUU, éste se queda con parte sustantiva de las ganancias derivadas del transporte, provee la seguridad del abastecimiento y mantiene el orden en los mercados, incluido el consumo. También evita su sustitución por otras fuentes energéticas. En breve, da estabilidad para hacer negocios tranquilos a largo plazo.
Un elemento clave será la actitud de Trump frente al dueño de las mayores reservas de petróleo: Venezuela. Maduro tiene una buena carta en sus manos. Veremos. Se está organizando una troika: EEUU, RUSIA y CHINA.
Melosilla, 20 de febrero de 2025
Fernando Thauby García
Capitán de Navío Infantería de Marina (r).
Un aporte de nuestro Past Presidente Humberto Julio Reyes