U al dia

Carabineros Carne de Cañón. Por María Angélica Cristi, Dipútado

Uno no logra comprender por qué los jueces no utilizan las herramientas que la ley les entrega y los sancionan drásticamente, para así terminar con estos atropellos y abusos a la figura de la autoridad. Los jueces deben contribuir a solucionar este grave problema social, es la única manera de que la ley cumpla su rol disuasivo

 

     Día a día vemos con estupor y horror como Carabineros de Chile, Institución encargada de resguardar el orden y el cumplimiento de las leyes, son agredidos en forma inaceptable, reiterada y cada vez más violenta por jóvenes encapuchados, quienes muchas veces más allá del fondo de las protestas,  se agrupan con el fin único de agredir de la peor forma posible a los policías,  con los elementos que tengan a su alcance, incluyendo bienes fiscales y municipales, piedras, palos, elementos incendiarios, rejas papales, sillas, etc y también destruyen  la propiedad pública y privada, sin medir las consecuencias ni el daño producido y paradójicamente, exentos de toda sanción en la mayoría de los casos.

     En todos los países desarrollados esta actitud es inaceptable, hechos como estos serían sancionados con las máximas penas y nadie osaría  cometer tales actos. Nuestras leyes protegen a la autoridad y sancionan los daños a la propiedad pública y privada, entonces cabe preguntarse, porque se permiten hechos como los descritos? Porque las pocas personas que son detenidas quedan en libertad? Uno no logra comprender por qué los jueces no utilizan las herramientas que la ley les entrega y los sancionan drásticamente, para así terminar con estos atropellos y abusos a la figura de la autoridad. Los jueces deben contribuir a solucionar este grave problema social,  es la única manera de que la ley cumpla su rol disuasivo. El resto de las autoridades no podemos permanecer expectantes frente a este flagelo social. Carabineros no puede seguir siendo Carne de Cañón, exponiendo a diario su integridad física y degradando su dignidad como personas y sujetos de derechos.  

Columna de Opinión

Carta de Luis Valentín Ferrada a GDD Hernán Nuñez M. Los archivos del “Cardenal”?????

Las opiniones vertidas en esta columna son de responsabilidad de quienes las emiten y no representan necesariamente el pensamiento de UNOFAR
Las personas que aparecen retratadas en este documento junto al General Pinochet son, todas ellas, personas que tienen y han tenido, durante los últimos veinte años, grandes responsabilidades políticas en sus manos y la oportunidad objetiva – en cuanto altas autoridades nacionales – de haber hecho por nuestros soldados todo lo necesario para que jamás un vejamen, tan indigno como al que han sido sistemáticamente sometidos, pudiere ser cometido.

 

Muy Estimado Hernán,

La fotografía que se nos hace llegar – publicada ayer en diferentes medios electrónicos – es un verdadero documento histórico de apreciable valor, en diversos sentidos. Una imagen, dice el periodismo universal, vale más que un millar de palabras.

Las personas que aparecen retratadas en este documento junto al General Pinochet son, todas ellas, personas que tienen y han tenido, durante los últimos veinte años, grandes responsabilidades políticas en sus manos y la oportunidad objetiva – en cuanto altas autoridades nacionales – de haber hecho por nuestros soldados todo lo necesario para que jamás un vejamen, tan indigno como al que han sido sistemáticamente sometidos, pudiere ser cometido.

El sufrimiento moral y personal inconmensurable de tantos soldados, durante tan largo tiempo, el de sus familias y el de sus compañeros de armas en general, y – más grave aún, en un sentido nacional – la completa tergiversación de la historia de Chile que por inexplicable indolencia e ingratitud se ha permitido deliberadamente manipular en la conciencia de nuestra ciudadanía , compromete a mi entender de un modo grave la responsabilidad política de quienes pudiendo haberlo impedido…nada han hicieron.

En los días de esta semana, o la próxima, saldrá a la luz una teleserie de “ficción”, llamada Los Archivos del Cardenal, mediante la cual se dará una vuelta de tuerca más para dejar bien apretado, en el inconciente nacional, el perno ya introducido hasta el fondo, con el que se ha sujetado la falsa historia en nuestra pobre memoria.

No soy yo quien pueda ni deba calificar esta actitud de extraña prescindencia o aparente ajenitud de quienes – siendo ampliamente conocido el hecho de que hicieron parte activa y principal del Gobierno Militar de 1973, y amigos de los soldados de Chile – luego se abstuvieron de todo compromiso con ellos. ¡ Que la historia juzgue el valor o desvalor de tales conductas que, inevitablemente, un día serán analizadas con la imparcialidad del tiempo!

De mi parte, mi preocupación continúa siendo principalmente otra diferente y, si bien se piensa, de mayor envergadura y trascendencia que aquella de recordar lealtades que, visto está, fueron hace ya mucho tiempo defraudadas: mi preocupación arranca de la observación común (la que todos podemos fácilmente hacer con solo abrir los ojos) de ver a toda nuestra buena gente marchando aislada y dispersa, hacia cualquier lugar que desconocen y ni siquiera presienten , con SUS BANDERAS ENRROLLADAS.

¿ Sustos, temores, inseguridades en sí mismos, falta de fe, pérdida de las creencias, ausencia de patriotismo, vergüenza, sentimientos de culpa inoculados por una hábil y sostenida propaganda…? No es fácil saber el porqué se adormeció el sentimiento nacional hasta creerle desaparecido.

No son solo, pues, las personas retratadas en la fotografía que Usted nos envía las que han faltado a sus responsabilidades y compromisos.

Diríase más bien que todos nosotros, en un grado u otro, con rarísimas excepciones, hemos cometido fallas capitales imperdonables al definir nuestras actitudes y conductas más esenciales.

Si, únicamente un cierto grupo de personas hubiesen dado vuelta sus espaldas a su propia historia – por una razón u otra que, a ellos mismos, les cabe explicar o justificar – el problema sería triste pero menor. En un extremo, es posible llegar a entender lo que le sucede a un político, que vive y se desvive por los votos, cuando el país entero es el que da vuelta la espalda a su historia y conciencia. Yo no lo justifico … pero entiendo el mecanismo según estos cambios operan.

Lo verdaderamente grave sucede cuando no es un cierto grupo de personas el que actúa de una manera inaceptable o incomprensible, sino un país entero… y esta es la verdadera situación que hemos enfrentado: la de un Chile que se dio vuelta por entero la chaqueta o permitió sin chistar que se la dieran vuelta …

Y, en esta responsabilidad caemos todos, mi apreciado General, en uno u otro grado, pero TODOS. También muchos soldados… porque al fin de cuentas son chilenos.

Hace pocas horas atrás, un ex – cadete de nuestra Escuela Militar, Oficial de Servicio, ha dado un ejemplo más elocuente y sobresaliente que casi todos los demás: tres años en injusta prisión extranjera, sometido a los peores vejámenes personales, invirtiendo la mayor parte de sus bienes en una defensa aparentemente imposible, a los 76 años de edad, ha librado de las “galeras romanas” obteniendo, con el derecho en sus manos y sin renunciar jamás a sus convicciones, una victoria excepcional. La primera vez que un “criminal de guerra” (así lo llamaban) ha sido absuelto por un Tribunal europeo después de la 2° guerra mundial.

Este hombre, pequeño de estatura y con su físico ya gastado, pero dotado de un corazón enorme y más firme que una roca, jamás claudicó ni arrió sus banderas; jamás perdió la fe ni el sentido de su lucha; jamás se le vio desfallecer ni caer en indignidades; siempre patriota, siempre declarando su inocencia absoluta, siempre inconmovible frente al temporal que sobre su vida vino a caer… mientras muchos de sus antiguos amigos le negaban toda ayuda y aún ignoraban el haberlo conocido siquiera… ALFONSO PODLECH MICHAUD. Su nombre escrito con mayúsculas.

Ahí hay – distinguido General y Amigo – una luz encendida sobre nuestros caminos del presente. La luz de la fe en Dios, en la Patria y sus valores, en nosotros mismos y en nuestra propia historia.

¿ Cuándo y quien tocará la trompeta que llame a urgente reunión de compañía y se ordene la marcha con las banderas de nuestros principios nacionales desplegadas ?…

Esta es la pregunta central que se encuentra pendiente.

Esta es la pregunta que, en otras etapas pasadas de nuestra historia, personas de muy alta talla moral y entereza patriótica supieron responder con dignidad. Por citar un solo ejemplo, dígase cuanto quiera, la figura de don Carlos Ibáñez del Campo debe o debiera rondar hoy en día por las olvidadizas cabezas de todos aquellos que nada saben de Historia de Chile y, la de otros que conociéndola, han preferido nublarla para que la vergüenza personal no les arrebate sus últimos aprestos.

Su amigo,

Luis Valentín Ferrada

 

 

16 de Julio de 1973

” Hablamos en una hora dramática para Chile. Lo hacemos por ser fieles a Cristo y a nuestra ” “Patria. Hablamos en nuestra condición de Obispos de la Iglesia católica, porque creemos “tener una obligación especial de hacer un llamado extremo para evitar una lucha armada entre “chilenos.
“No representamos ninguna posición política, ningun interés de grupo, solo nos mueve el “bienestar de Chile y tratar de impedir que se pisotee la sangre de Cristo en una guerra “fraticida…. A estos grupos políticos o sociales antagónicos les imploramos que den los “pasos necesarios para crear las condiciones de un diálogo que haga ´posible un “entendimiento. Diálogo que, para ser fructífero, requiere que se verifique en la verdad, que “se diga toda la verdad, que haya sinceridad para proclamar las intenciones reales, que se “desarmen los espíritus y las manos…La Virgen del Carmen inspiró a los padres de la patria “cuando luchaban por la Independencia. ¿ De qué nos serviría lo que ellos ganaron tan “duramente si ahora asesinamos a la Nación?

CARTA PASTORAL DEL COMITÉ PERMANENTE DEL EPISCOPADO, FIRMADA POR EL CARDENAL RAUL SILVA HENRIQUEZ Y EL OBISPO AUXILIAR DE CONCEPCIÓN, MONSEÑOR CARLOS OVIEDO CAVADA.

¡¡ QUE TELEVISION NACIONAL DE CHILE CUENTE LA HISTORIA VERDADERA, CON LA PLATA DE TODOS LOS CHILENOS. LA HISTORIA RECIENTE DE NUESTRO PAIS NO SE INICIÓ EL 11 DE SEPTIEMBRE DE 1973, SINO QUE SE COMETIERON VILES ASESINATOS Y HECHOS ANTES DE ESA FECHA, POR LOS CUALES NINGÚN POLITICO SE HA RESPONSABILIZADO, Y CUYOS AUTORES SE PASEAN TRANQUILAMENTE POR LAS CALLES DE CHILE O LEGISLAN SOBRE EL BIEN Y EL MAL DESDE ALTOS CARGOS !!

Gral. HERNAN NUÑEZ MANRIQUEZ

Luis Valentín Ferrada