Los seres humanos siempre tuvimos derechos (orden natural) y no los descubrieron en la Revolución Francesa y en ninguna otra revolución (ni la de “Brilla el Sol” ni en la de las “empanadas con tinto”). Pero también tenemos DEBERES, cosa que hoy por hoy se ha olvidado completamente. Uno de los múltiples deberes que tenemos es buscar la verdad, LA VERDAD, con pasión y aquí fallan todos estos próceres que aúllan (eso hacen) por sus derechos humanos pero olvidan absolutamente sus deberes.
Viña del Mar, 19 de Noviembre de 2011
Queridos amigos,
No puedo dejar sin comentar la ridícula y escandalosa alharaca que han suscitado todos los politiqueros chilenos de todo el espectro, a raíz del lanzamiento de la 4ª Edición del libro sobre Miguel Krassnoff. Primero hay que decir que esta es la Cuarta Edición, alguien cacareó cuando fueron las tres primeras?
Yo tengo el orgullo de tener un ejemplar dedicado y autografiado por él y también por mi amiga Gisela Silva Encina, autora del libro. Es un libro genial, super entretenido y muy bien escrito, como todo lo que escribe Gisela. El tema, la vida de mi querido amigo, el Brigadier Krassnoff y de su familia es increíble. Les he escrito antes y recomendado este libro por lo que considero innecesario hacerlo de nuevo.
Lo que me subleva en esta ocasión es la hipocresía y la cobardía de políticos que, siendo testigos de la época del gobierno militar, hoy rasgan vestiduras diciendo que ellos no pueden aceptar que se homenajee a alguien que haya atentado contra los Diez Mandamientos de la época actual: Los Derechos Humanos!
Los seres humanos siempre tuvimos derechos (orden natural) y no los descubrieron en la Revolución Francesa y en ninguna otra revolución (ni la de “Brilla el Sol” ni en la de las “empanadas con tinto”). Pero también tenemos DEBERES, cosa que hoy por hoy se ha olvidado completamente. Uno de los múltiples deberes que tenemos es buscar la verdad, LA VERDAD, con pasión y aquí fallan todos estos próceres que aúllan (eso hacen) por sus derechos humanos pero olvidan absolutamente sus deberes.
Ya que hoy día, en materia de aplicar justicia, las sensibilidades están a flor de piel y están por lado y lado “pontificando” sobre ella sin realmente verificar si estamos o no en un verdadero estado de derecho, yo desafío a los poderes del Estado a que hagan este importante ejercicio. Todos, o casi todos, los presos políticos militares no han tenido un debido proceso y eso lo saben todas las autoridades, otra cosa es que no les conviene admitirlo, por cobardía, por mala conciencia o por la obsecuencia y temor que le tienen a la izquierda de todo el mundo. Es eso Justicia? No tienen ningún problema de conciencia de saber que tienen presos a compatriotas inocentes (se es inocente hasta que se pruebe su culpabilidad)?
Desgraciadamente, mis amigos, y se los he dicho en otras oportunidades, me resulta insoportable vivir en un país sin justicia, donde la clase política que tenemos es hipócrita y cobarde, con las debidas y honrosas excepciones. Creo que el Alcalde Cristian Labbé ha demostrado ser un hombre de bien, con coraje y dispuesto a luchar por el bien de Chile. Lo ha demostrado con creces estos últimos meses. Si seguimos su ejemplo de compromiso con la VERDAD, que nos puede pasar? Recordemos una de las Bienaventuranzas: “Bienaventurados los que tienen sed de justicia porque ellos serán saciados”
A los que no tienen “sed de justicia” y solo buscan beneficios personales (el negocio de los DD.HH. es conocido e inmenso) o son temerosos en su defensa del bien común, solo les digo que están entregando un lamentable ejemplo a sus descendientes quienes más temprano que tarde sabrán la verdad sobre las ridículas y absurdas sentencias de “secuestro permanente y otras, y se preguntarán ¿que hicieron mis padres, mis abuelos o mis amigos para buscar la VERDAD? El que busca siempre encuentra, lo importante es buscar de verdad, con verdadera pasión.
Carmen G. de Martínez
EXCELENTE CARTA DE DOÑA CARMEN VIUDA DE MARTÍNEZ, ENVIADA POR NUESTRO SOCIO DIRECTOR: Juan Castro