Columna de Opinión

POLÍTICOS, DIPLOMÁTICOS Y MILITARES

LAS OPINIONES DE ESTA COLUMNA DE OPINIÓN SON DE RESPONSABILIDAD DE SUS AUTORES Y NO REFLEJAN NECESARIAMENTE EL PENSAMIENTO DE UNOFAR

La desprestigiada clase política actual podrá seguir cometiendo desaguisados como el que acabamos de ver y que –por desgracia? en vez de alejarnos de las posibilidades de un conflicto armado podrían estar acercándonos a ello. Igualmente, seguiremos soportando la presencia de ignorantes conceptuales a cargo de las relaciones exteriores y de la dirección civil de la defensa nacional, lo que por fortuna pareciera que no será tan grave en el gobierno que llega como lo fue en el que nos deja.

El reciente fallo de la Corte Internacional de La Haya ha dejado en evidencia una vez más el divorcio
existente entre la clase política nacional y su responsabilidad en el ámbito político-estratégico. Así, gracias a la
desidia, negligencia, torpeza o –simplemente− ignorancia conceptual, hemos sido objeto del cercenamiento de
parte de nuestro patrimonio, en beneficio de un tercero que de un pasado humillante ha aprendido lo que significa
la seguridad nacional y la estrategia necesaria para su materialización.
Con certeza, podemos decir que aquello que los militares han conquistado con su sangre, los malos
políticos lo han derrochado en aras de intereses mezquinos y cortoplacistas, incluso –como ha ocurrido en este
caso− aquellos cubiertos de un manto puramente mercantilista. Un analista nacional planteaba hace unos días que
“Chile es mucho más que Lan y Fallabella”. Creo −sin embargo− que no todo nace del cálculo del valor futuro de
las acciones invertidas en la empresa de un mal vecino. La raíz del problema radica en la supina ignorancia acerca
de la conducción político-estratégica de un estado y en el desprecio por todo lo que huela a “militar”, concepto
entronizado en nuestra clase dirigente a partir del llamado “retorno a la democracia”. Es allí donde nace la causa
de fondo de la desatención puesta a los problemas limítrofes y a sus consecuencias futuras, dejando el espacio que
requieren los hábiles políticos de nuestros países vecinos para asentar las bases de sus propios intereses. Debido a
ello, nos hemos ido acostumbrando al profundo desinterés mostrado hacia las dos herramientas que aseguran
nuestra supervivencia como estado frente a las presiones geopolíticas de origen externo, brindándonos
profundidad histórica: las Fuerzas Armadas y el Servicio Diplomático.
En el caso del servicio exterior, es evidente que la designación de cargos diplomáticos es utilizada por los
gobiernos como un medio de pago de favores políticos o para alejar de la contingencia interna a algún actor que
pueda amenazar o incomodar la hegemonía de quien ha alcanzado el poder. Salvo algunas honrosas y escasas
excepciones, nuestros excelentes profesionales diplomáticos de carrera se han visto relegados por años a ocupar
cargos secundarios, desperdiciándose así su valiosa experiencia en el servicio exterior, acumulada a través de los
años y nacida de una cuidadosa y completa formación teórica en las delicadas materias que competen a éste. De
este modo, las sensibles actuaciones de nuestra diplomacia se han ido alejando de la histórica doctrina diplomática
chilena, la que alguna vez fuera considerada como un ejemplo por los demás países del orbe. Esta verdadera
escuela del servicio exterior ha ido siendo reemplazada por una corte de aficionados, en la que cualquiera persona
ajena al servicio diplomático puede llegar a ocupar cargos de embajador o incluso de ministro y donde nuestras
autoridades políticas llevan a cabo actos de estado, tales como condecorar a personalidades extranjeras, sin el
menor análisis previo de las razones para hacerlo y de los efectos esperables de ello. Se demuestra así que las
autoridades de turno no parecen comprender que en el mundo diplomático nada ocurre sin una razón y que cada
paso que se da debe ser cuidadosamente estudiado antes de ejecutarlo o siquiera anunciarlo, puesto que
inevitablemente contendrá un mensaje encriptado, con un significado interpretable por el entorno que lo reciba,
generando consecuencias que debieran ser proyectadas o previstas adecuadamente.
A esta demostración de torpe ingenuidad, se suma el desmantelamiento de una instancia constitucional
que en su origen buscaba justamente evitar que el ejecutivo de turno llegase a desmarcarse de los Objetivos
Nacionales Permanentes, conduciendo las relaciones exteriores a su antojo, como ha ocurrido en el caso actual.
Hasta la modificación constitucional introducida por el gobierno de Ricardo Lagos, era el Consejo de Seguridad
Nacional (COSENA) el encargado de representar al Presidente de la República cualquier materia que pudiese
afectar a la seguridad presente o futura de la nación, con capacidad de auto-convocarse ante la sola voluntad de
dos de sus miembros. Para ello, era integrado por los representantes de los reales poderes nacionales, esto es: el
Ejecutivo, el Legislativo, el Judicial y los Comandantes de Jefe de las FF.AA. y de Orden, siendo su secretario el Jefe
de Estado Mayor de la Defensa Nacional, hoy Jefe de Estado Mayor Conjunto, con rango de comandante en jefe. El complejo innegable de los políticos frente al mundo militar y su persistente odiosidad hacia quienes
−junto con evitar que sus desaciertos nos llevaran a una guerra civil− les enseñaron cómo encaminar el país hacia
el desarrollo, consiguió que la noble función del COSENA fuese relegada a un tercer plano, como ha quedado en
evidencia ante el hermetismo con el que el mandatario actual y su canciller manejaron el tema de las relaciones
con Perú, hasta que –asustado por lo que podía pasar y en el último minuto− lo convocara para intentar compartir
culpas y diluir su responsabilidad. Llama la atención que la clase política –siempre atenta a las oportunidades para
sacar ventaja de su oponente− no haya decodificado el significado de que el Presidente haya dispuesto que no se
levantara un acta de la reunión del COSENA, algo absolutamente irregular y que desnaturaliza la condición de una
actividad del más alto nivel del Estado. ¡No es posible que no haya quedado constancia escrita de las posiciones y
planteamientos de cada uno de sus integrantes, lo que constituye una violación grave de su rol constitucional! Lo
irregular del caso y la ridícula disculpa dada en el sentido de que se buscaba evitar que se filtrara lo allí tratado,
hacen pensar en que al primer mandatario no le gustó lo que le dijeron y no quiso que quedara una evidencia
histórica que registrara la magnitud de su eventual irresponsabilidad cívica.
La clase política no escatima esfuerzos para dividir a la ciudadanía del mundo militar, pero –al igual que en
el pasado− ésta terminará reconociendo la lealtad de los uniformados y su irrenunciable fidelidad a la Patria de
todos, no el pretendido servilismo monárquico hacia quienes dirigen el gobierno solo por cuatro años. El mayor
error de la clase política es seguir creyendo que con las medidas discriminatorias hacia los militares y su soberbia
ostentación de la autoridad formal que ejercen sobre ellos podrán conseguir que se alejen de su sagrada misión de
defender los reales intereses de la Patria. ¡Ojo con la historia! Ella enseña que cada vez que el mundo político pone
en peligro la existencia del Estado, es decir: su Nación, el Territorio o la Soberanía, los militares no se limitan a
esperar por ello, anticipándose en función de su superior obligación de velar por su supervivencia, para el bien de
todos sus ciudadanos, sin excepción.
La desprestigiada clase política actual podrá seguir cometiendo desaguisados como el que acabamos de ver
y que –por desgracia− en vez de alejarnos de las posibilidades de un conflicto armado podrían estar acercándonos
a ello. Igualmente, seguiremos soportando la presencia de ignorantes conceptuales a cargo de las relaciones
exteriores y de la dirección civil de la defensa nacional, lo que por fortuna pareciera que no será tan grave en el
gobierno que llega como lo fue en el que nos deja. Lo que pero jamás conseguirán, sin embargo, es que los
militares subordinen su fidelidad a la Patria a los mezquinos intereses de un mundillo político decadente, ejemplos
patentes de la carencia de cultura cívica y del irrespeto por las doctrinas nacionales que –superando las
contingencias y coyunturas− nos han dado la condición de nación soberana.
Ante los hechos vistos en esta actuación propia de una republiqueta −como nos calificó el condecorado
Alan García− la comunidad nacional y los pocos dirigentes que comprenden la gravedad del asunto debieran
promover una profunda revisión del rol del COSENA y de las excesivas atribuciones del ciudadano-presidente ante
temas de relaciones exteriores, poniendo término a una farra que ha permitido la comisión de verdaderas
traiciones a la Patria por parte de algunos “iluminados”. El servicio exterior debe regresar a las manos expertas de
quienes saben cómo conducirlo y−por último− la clase política debiera por fin aprender la lección, asegurando el
término del trato degradante de todo lo que huela a militar, dejando ya de discriminarlos en todo sentido, incluso
en el asimétrico e injusto trato jurídico que se les brinda en la actualidad. Solo así podremos seguir avanzando
como una nación soberana, manteniendo vivo en todos nuestros ciudadanos el interés por defender un territorio
que –con su sangre− nos legaron nuestros antepasados, aquellos que hoy deben estar llorando en sus tumbas por
la innecesaria y estúpida pérdida de parte del patrimonio marítimo heredado de Prat y sus marinos.
29 de Enero de 2014
Patricio Quilhot Palma

Columna de Opinión

El terrorismo. Por Adolfo ibáñez

LAS OPINIONES DE ESTA COLUMNA DE OPINIÓN SON DE RESPONSABILIDAD DE SUS AUTORES Y NO REFLEJAN NECESARIAMENTE EL PENSAMIENTO DE UNOFAR

No es solo la justicia lo que está mal. Somos todos en el país los que estamos desenfocados con lo que ocurre en aquella zona. Pareciera que hay algo en el plano de los conceptos que no se condice con la realidad de las cosas y que permite que el terrorismo se despliegue impunemente no solo a costa de las personas, de sus vidas y de sus bienes, sino que también de las instituciones y del ordenamiento general que regula la convivencia nacional.

El fin de año y la llegada del nuevo se transformó en la gran fiesta del terrorismo. Así como ahora recordamos el macabro asesinato de los Luchsinger MacKay, el próximo enero será el aniversario de los incendios criminales que marcaron este cambio de año en La Araucanía. Y, así, seguiremos sumando acontecimientos infaustos, hasta que las llamas nos calcinen.

En el plano judicial, el abogado querellante de los Luchsinger MacKay celebra que se haya reconocido la validez de las numerosas pruebas que se han reunido en contra del único inculpado, que lo está solo por haber caído herido durante aquel hecho luctuoso. Es decir, al cabo de un año todavía se está iniciando el proceso.
No es solo la justicia lo que está mal. Somos todos en el país los que estamos desenfocados con lo que ocurre en aquella zona. Pareciera que hay algo en el plano de los conceptos que no se condice con la realidad de las cosas y que permite que el terrorismo se despliegue impunemente no solo a costa de las personas, de sus vidas y de sus bienes, sino que también de las instituciones y del ordenamiento general que regula la convivencia nacional.

Es sabido que este terrorismo tiene el respaldo de organismos internacionales, con el falso título de constituir una causa noble y humanitaria. También dentro del país cuenta con el respaldo tácito de un amplio sector del espectro político: el curiosamente llamado mundo progresista, que reúne todos los postulados fracasados durante los últimos cien años y que, no obstante, aún goza de buena salud en nuestro país.

El terrorismo es una imposición violenta que nace de la automagnificación de sus protagonistas, unida al desprecio por los demás. De aquí derivan la implacabilidad y la frialdad con que es usado, como una formidable herramienta política disuasiva y amedrentadora, para despejarles el campo a sus impulsores, camuflados de idealistas iluminados.

Más allá del hecho político y noticioso, el dominio del terror nos daña mortalmente, llevándonos a la disolución social. Liquida la comunicación y la confianza en las personas, y la proyección hacia el futuro. Reduce, hasta clausurarlos, el horizonte vital y el vuelo espiritual de cada uno de nosotros. Liquida la vida civilizada, objetivo hacia el cual ha apuntado la humanidad a lo largo de milenios desarrollando un complejo entramado institucional.

De la persona altiva, digna y libre que hemos buscado ser por millones de años, retrocedemos a formar una especie biológica tan primaria que solo puede reptar.

Ver controversia planteada por Perú

http://www.lanacion.cl/noticias/videos/pais/video-que-explica-el-limite-marino-entre-chile-y-peru/2013-12-13/131547.html

Columna de Opinión

La Nueva Mayoría o la insoportable levedad del Ser, por Cecilia Fernández Taladriz y Partiendo el año 2014. Melnick, Sergio , blog

LAS OPINIONES DE ESTA COLUMNA DE OPINIÓN SON DE RESPONSABILIDAD DE SUS AUTORES Y NO REFLEJAN NECESARIAMENTE EL PENSAMIENTO DE UNOFAR
Piñera entregará el gobierno con las cuentas fiscales ordenadas, habrá corregido casi todo el déficit fiscal heredado de Velasco (4%, según el FMI), y habrá restituido el fondo del cobre, dilapidado también por Velasco, a una cifra en torno a los US$ 23.000 millones.
Los líderes que componen la extensa y contradictoria gama de idearios que se amalgamaron en la denominada Nueva Mayoría, y que obtuvieron un resonante triunfo en el balotaje presidencial de diciembre, comparten un factor común. Dentro de su diversidad todos sufren de pánico, individual y colectivo, a quedar desalineados con Bachelet, a caer en desgracia insinuando una agenda propia, defendiendo públicamente algún principio intransable, algún objetivo político prioritario.

El programa de la Nueva Mayoría, en determinados aspectos esenciales, es un acuerdo sobre un ideario negativo. Expresa el rechazo a una constitución que admite una visión liberal y humanista (es decir el posible gobierno de “los otros”); que resguarda además la constitucionalidad de las leyes y los derechos de las minorías; que establece límites a la discrecionalidad del Estado y a su ámbito de acción en la economía. ¿No son acaso aspectos esenciales del Estado de Derecho? El programa rechaza también la desigualdad económica y busca eliminar toda forma de lucro en la educación.

“Otra cosa es con guitarra”, como dice el dicho popular. Un programa colectivista inevitablemente privilegiará a un grupo limitado, a determinados particularismos y visiones, perjudicando o postergando a otros. Incubando así una herencia ideológica que cimentará sus bases por un futuro indeterminado.

De ahí que la incomodidad con la ausencia de definiciones programáticas se vuelve especialmente notoria cuando observamos los extremos del arco político que componen este proyecto. Rayando en lo cómico, la Democracia Cristiana se abalanzó en masa a acallar las declaraciones de Gutemberg Martínez, ex presidente de la colectividad, quien advirtió sobre los peligros de cohabitar con el PC. “El diputado Juan Carlos Latorre no está de acuerdo con las declaraciones de Gutenberg Martínez, asegurando que los dichos no sirven de nada para lo que realmente importa, en cuanto a sacar adelante un programa de gobierno.[1]” La Presidenta electa no tardó en aclarar que será ella quien determinará la composición de su gabinete.

En el otro extremo se encuentra el Partido Comunista, quien por primera vez desde 1970 puede aspirar a conformar un Gabinete de gobierno, y ya ha declarado su interés en una de las vicepresidencias de la Cámara de Diputados[2]. Debemos recordar que la extinta Concertación alcanzó su punto más bajo durante el auge del movimiento estudiantil, en los años 2011 y 2012, y que ?por contraste y como fruto de un diseño y ejecución explícita? el Partido Comunista se tomó la agenda, a pesar de representar alrededor de 8% de las preferencias del electorado.

Al igual que los simpáticos personajes de la Warner que solían decir: “Dime, Cerebro, ¿qué haremos mañana? – Lo de siempre Pinky… ¡conquistaremos el mundo!”, el PC mantiene inalterable su meta final. No importa demasiado el porcentaje de votos. Han aprendido que en este siglo XXI no es necesario eliminar la democracia, sino agregarle el calificativo de “socialista” al amparo de una transitoria mayoría. Una reedición de las extintas repúblicas democráticas. Bachelet es solo un medio para un fin, que en esta “etapa de la historia”, como gustan decir, se puede reducir a un gran y único objetivo: remplazar la actual Constitución por una “constitución democrática” que dé estabilidad a su proyecto.

Incluso ellos deben acomodar su estrategia para no perder su base de poder ?la temida calle. Sienten también las tensiones que producen sus líderes, los que comparten la esquiva cumbre del poder y que ahora caminan por la cuerda floja que tendieron con el bacheletismo[3]. “Ciudadanos comunistas de Chile: ¡rebélense contra quienes los conducen hacia la nada! Aunque esto implique rebelarse contra sí mismos ¡rebélense! Por lo más sagrado de su propia ideología ¡rebélense! La disciplina es correcta cuando la conducción es recta, pero no cuando va en la dirección contraria. Sean disciplinados consigo mismo y sus ideales, el resto de los chilenos los necesita para impulsar el proceso constituyente que ha de emancipar este país.[4]”

Evidentemente mucho más cómodos se sienten los dirigentes del partido socialista, luego de purgar a históricos como Camilo Escalona[5] y José Antonio Viera-Gallo, senadores que contribuyeron en diversas responsabilidades desde los sucesivos gobiernos de la (antigua) Concertación. No es su hora. El ex Presidente Lagos entiende como nadie cuando es momento de no hablar, y hasta aquí guarda silencio con respecto a los alcances y concreción del programa de su ex-ministra.

Bachelet denota su historia personal, su exilio en la Alemania Oriental y la convivencia con la clandestinidad violentista de los ‘80. Exige a sus colaboradores más cercanos un completo ostracismo a la hora de las definiciones, y explota con maestría ?tal vez su atributo más distintivo? la ambigüedad pragmática en público y un sentido del suspenso digno de un thriller hollywoodense. La gente, su base electoral, entiende que es ella y solo ella quien debe resolver cuestiones complejas, y evidentemente se satisface con sus generalidades.

Incluso la oposición, aquí y allá, manda mensajes destacando el carácter apaciguador y la sabiduría de gobernante de la Presidenta electa, tal vez esperando el amanecer de una nueva Madiva. Al efecto, Juan Andrés Fontaine, ex ministro de Piñera, declara: “Si (la Presidenta electa) se rodea de un equipo competente, si descarta las propuestas más radicales o improvisadas de su programa y si busca forjar acuerdos ampliamente compartidos, (…) el nuevo gobierno puede sorprender a los pesimistas.” (El Mercurio, 29 de diciembre de 2013). En otras palabras, no debe temer a la calle si sabe interpretar a una mayoría de electores no vociferantes, incluyendo una derecha huérfana de liderazgos.

Va quedando a la vista la polaridad insostenible de los actores que conforman esta Nueva Mayoría. Por una parte promover o entrabar el objetivo de hacer tabla rasa y partir de cero, y por otra mantenerse dentro del único alero de poder. En la cumbre del éxito escasea el oxígeno, y quienes pretendan permanecer en ella deben compartirlo. Por ahora su líder, en una encarnación chilena inédita de liderazgo personalista, es la única que respira a pleno pulmón. Por ahora.

[1] http://www.biobiochile.cl/2013/12/25/sectores-de-la-dc-respaldan-al-pc-ante-criticas-de-gutenberg-martinez.shtml

[2] http://www.cooperativa.cl/noticias/pais/politica/camara-de-diputados/pc-pedira-ocupar-la-vicepresidencia-de-la-camara-de-diputados/2013-12-08/102211.html

[3] “Reafirmo completamente lo que he dicho acerca de que la movilización social no es renunciable (…): los líderes sociales, quienes hemos representado a las bases en sus justas exigencias, que tenemos raigambre en defender los derechos de las personas, no podemos darnos el lujo de darle la espalda a la calle porque sería una traición a nuestros respectivos movimientos. Si elevamos demandas es porque consideramos que son correctas y no podemos, por ocupar un escaño, olvidarnos de ellas. Sería imperdonable.” Camila Vallejo, diputada electa, Partido Comunista. 8 de febrero de 2013. Diario The Clinic.

PARTIENDO EL AÑO 2014
Les deseo a todos de corazón lo mejor para este año, y en particular al país y al nuevo gobierno. Necesitamos más cohesión social y menos pugnas ideológicas. Vamos todos en el mismo barco.

A partir de marzo le veremos la mano a una administración que ha ofrecido tres grandes ejes de trabajo: Constitución, educación y reforma tributaria. La economía mundial repuntará un poco más el 2014, de modo que eso ayudará significativamente a Chile.

Diversos personeros de la DC han dado por muerta la asamblea constituyente, lo que muestra la prudencia de ese sector, y han acotado los cambios a tres temas: los quórums, el tribunal constitucional y el sistema binominal. Cualquiera sea el camino que adopte el nuevo gobierno, es fundamental que entienda que las constituciones, para ser legítimas, requieren un apoyo del 75% o más de la población. Eso es lo que obliga a ponerse de acuerdo realmente y a considerar de manera efectiva a las minorías. Buscar esos grandes consensos es señal de madurez de un gobierno.

La reforma tributaria irá sí o sí, ya que la Nueva Mayoría tiene los votos. Hay que tener presente que esos cambios no son neutros para la economía, más allá del voluntarismo de algunos sectores de izquierda. Nuevamente, la prudencia es fundamental. Jorge Awad, destacado bacheletista DC, ya ha puesto una gota de cordura al señalar en una entrevista de televisión que el cambio del FUT quizás, podría, eventualmente, ocurrir el cuarto año del gobierno, deslizando así que es una muy mala idea. Si leemos entre líneas, lo da por terminado, dando un aire de esperanza a la mediana empresa, que no tiene posibilidad alguna de repartir dividendos por restricciones permanentes de la caja, y sería ridículo pagar impuestos por dividendos no distribuidos.

Piñera entregará el gobierno con las cuentas fiscales ordenadas, habrá corregido casi todo el déficit fiscal heredado de Velasco (4%, según el FMI), y habrá restituido el fondo del cobre, dilapidado también por Velasco, a una cifra en torno a los US$ 23.000 millones.

Por eso, el verdadero partido de Bachelet se juega en la educación, donde está difícil la pista. La Nueva Mayoría cayó un poco en la trampa del populismo al ofrecer tres condiciones que compiten entre sí: calidad, gratuidad y carácter público. Para mí, lo correcto era ofrecer enfáticamente calidad y que nadie quedara afuera por problema de recursos. En efecto, sólo la calidad es el objetivo central y fundamental en la educación, todo el resto es instrumental, ideológico; poner los tres objetivos a la misma promete tempestades.

De las nueve asociaciones estudiantiles, sólo una es liderada por la Nueva Mayoría, y eso es una mala señal para el gobierno. Todos deberemos apoyarlo para tratar de neutralizar esa marea, que en algunos casos se autodefine como anarquista, pues si bien está calificada legítimamente para representar el problema, no tiene ni cerca la capacidad de definir las soluciones. Son sin duda inteligentes, pero aún muy jóvenes, con poco conocimiento y ninguna experiencia en esas ligas. Los políticos deben comportarse como adultos y poner los límites adecuados.

La discusión sobre calidad, que debe ser anterior a la propuesta de cualquier reforma, ni siquiera ha empezado, aunque hoy se trata de un debate a nivel mundial. La clave de la educación en el siglo 21 es el lenguaje post simbólico, que tiene que ver con la nueva sociedad digital, la cual funciona con otros códigos. Lenguaje no es lo mismo que idioma, una diferencia que los estudiantes quizá ni sospechan. Nuestro sistema de titulación universitaria está claramente obsoleto, es muy rígido y obliga a los alumnos a especializarse a los 16 años, lo que es un absurdo. Eso obliga a la PSU, una aberración que transforma toda la educación media en una fábrica para pasar esa prueba, en desmedro del sentido profundo de la educación. La brecha digital debe ser una prioridad, pues ése es el verdadero analfabetismo del siglo 21.

Pensar que la educación va a mejorar porque pasa de los municipios al gobierno central es un serio error; pensar que se pueden fijar aranceles universitarios comunes para todas las universidades y mantener la calidad es otro. Esperemos que prevalezcan la sabiduría, la cordura y los acuerdos.

Columna de Opinión

ODIO Y VENGANZA por Fernando Navajas I. Vicealmirante

Las opiniones vertidas en esta columna de opinión, son de responsabilidad de sus autores y no reflejan necesariamente el pensamiento de UNOFAR
El Poder Judicial en nuestro País se ha politizado, lo que es una grave desviación de la sana doctrina y que tendrá un alto costo para el País, todo ello a la vista del Poder Ejecutivo, del ministro de Justicia y del Presidente de la Corte Suprema que debiera preocuparse de la pureza del sistema, todos ellos tienen responsabilidad en lo que está ocurriendo.
Bastante se ha escrito sobre la forma que han actuado los jueces chilenos para juzgar los casos contra los Derechos Humanos, que se han atribuido a Oficiales en retiro de las FF.AA., cuyos fallos han sido aberrantes, tal como lo ha expuesto la Sra. Raquel Camposano, ex jueza y candidata a Ministra de la CORTE SUPREMA cuyo camino hacia esa corte le fue bloqueado por sus propios colegas.¿ la razón?, no era de izquierda, ya que la mayoría de los jueces son de esa tendencia y más aun; son marxistas, ¿qué podemos esperar entonces del Poder Judicial? Además el libro del capitán de Navío y Abogado Adolfo Paul en que se analizan las injusticias y violaciones a las leyes por parte de los jueces es clarísimo en señalar que se ha actuado con un ánimo de venganza vergonzoso para un poder judicial.

Me recuerdo que en 1989, conversando con una Sra. Ministra de una Corte me dijo: “ha ingresado cierta clase de gente al Poder Judicial que mejor nos pillen confesados cuando sean jueces”; lamentablemente ella falleció, caso contrario habría comprobado que su predicción resultó cierta. Todo esto es producto del odio que engendró en ellos el Pronunciamiento de 1973 y posteriormente el éxito del gobierno militar en la conducción del país.

De acuerdo al Catecismo de la Iglesia Católica (ART.2303). EL ODIO voluntario es contrario a la caridad. El odio al prójimo es pecado cuando se le desea deliberadamente un mal. EL ODIO AL PRÓJIMO, es un pecado grave cuando se le desea deliberadamente un daño grave.”Pues yo os digo: Amad a vuestros enemigos y rogad por los que os persigan, para que seáis hijos de vuestro padre celestial…” (Mt 5,44-45). Sic. ¿PERO ENTENDERÁN LOS JUECES MARXISTAS Y ATEOS LO QUE QUIERE DECIR ESTE ARTÍCULO?, lo dudo porque si así fuera actuarían cristianamente, es decir, aplicando las leyes como corresponde y no a su arbitrio y que tanto mal han causado. Siempre tuve la mejor opinión del Poder Judicial, pero eso cambió desde que se comenzaron a cometer injusticias en los juicios contra los MILITARES Presos Políticos. Es muy importante la opinión de las FF.AA. RESPECTO AL Poder Judicial y me parece que esta no es buena.

Este ODIO GENERA LA VENGANZA, que constituye otra ofensa a Dios.”Desear la venganza para el mal de aquel a quien es preciso castigar, es ilícito; pero es loable imponer una reparación “para la corrección de los vicios y el mantenimiento de la justicia”(S.TOMÁS DE A.s.th.2-2,158,1 ad3).Todo esta situación anómala sería imposible, si tuviéramos jueces cristianos que actuaran en forma justa y con honradez profesional; es perfectamente lícito que un juez tenga sus ideas políticas o adhiera a una determinada ideología, pero ello no puede ni debe influenciarlo en la dictación de sentencias, resoluciones, fallos, dictámenes etc. los que deben ceñirse estrictamente a los procedimientos judiciales y los que disponen los códigos. Lamentablemente eso no ocurre en el CHILE DE HOY y los afectados quedan al arbitrio de la particular manera de pensar de un juez.

El Poder Judicial en nuestro País se ha politizado, lo que es una grave desviación de la sana doctrina y que tendrá un alto costo para el País, todo ello a la vista del Poder Ejecutivo, del ministro de Justicia y del Presidente de la Corte Suprema que debiera preocuparse de la pureza del sistema, todos ellos tienen responsabilidad en lo que está ocurriendo.

Estimo sumamente grave para los ciudadanos esta politización pues no hay certeza de que se hará justicia en forma imparcial, ni que se acabará con la venganza: lo peor que puede exhibir un Poder Judicial.

Fernando Navajas I.

Vicealmirante

Columna de Opinión

Carta post elecciones por Carmen García vda. de Martinez Bush,

LAS OPINIONES DE ESTA COLUMNA DE OPINIÓN SON DE RESPONSABILIDAD DE SUS AUTORES Y NO REFLEJAN NECESARIAMENTE EL PENSAMIENTO DE UNOFAR
Una campaña política de este tipo debe ser espantosamente agotadora, pero ella siempre se vio bien y descansada. ¿Cómo lo hizo? Ella ha demostrado que tiene el liderazgo apropiado y no puede perderse fuera de la política. Aunque sea para que les enseñe a otros como debe pararse una persona con carácter, convicciones y valentía para llevar adelante un proyecto en la que ella cree. Bien Evelyn, BRAVO ZULÚ!

He querido dejar pasar una semana para meditar y comentar, sin apuros ni amargura, la derrota que tuvimos en las elecciones pasadas.

Pero, antes que nada, deseo felicitar a esa extraordinaria mujer, Evelyn Matthei, por su coraje y empuje, sin “arrugar” nunca, a pesar de todas las maldades que le hicieron personas mediocres, solo inmersas en sus propios resentimientos y ambiciones personales. También a su familia y a todo el grupo que se la jugó con ella.

Cuando algunos cortos de vista hablan de que el “único” líder que tiene nuestro sector es Sebastián Piñera me dan ganas de llorar. Para ser líder hay que tener cualidades que, claramente, este señor no tiene, más bien al contrario. La Evelyn sí las tiene y lo demostró con creces en esta fase final de la campaña, pero dispuso de un muy corto tiempo para organizarse. Ella supo entender que, al representar a un solo sector de nuestros ciudadanos, debía postergar algunas actitudes que le eran propias, transmitió un gran entusiasmo hasta el final, aunque seguramente presentía que sería derrotada. Muchas personas que conozco que no iban a votar por ella, lo hicieron porque les “enganchó” con su “sí se puede”!

Una campaña política de este tipo debe ser espantosamente agotadora, pero ella siempre se vio bien y descansada. ¿Cómo lo hizo? Ella ha demostrado que tiene el liderazgo apropiado y no puede perderse fuera de la política. Aunque sea para que les enseñe a otros como debe pararse una persona con carácter, convicciones y valentía para llevar adelante un proyecto en la que ella cree. Bien Evelyn, BRAVO ZULÚ!

Dejo a los profesionales políticos el análisis de lo que fueron estas elecciones, pero no puedo sino espantarme con la alta cifra de abstención que hubo.

¿Qué se necesita para que este grupo tan alto de chilenos (casi 8.000.000) se interesen en algo que no sean ellos mismos? Que salgan de su burbuja de consumo y de egoísmo? Abandonen su indolencia y su absoluta falta de amor a la Patria, que parece que nadie les enseñó? Los que sí votamos, que fuimos aproximadamente 5.500.000, estamos condenados, algunos, a sufrir un gobierno que por el proyecto presentado, hará que Chile retroceda en el tiempo, disminuya el empleo, desmoralice a los posibles emprendedores, en el mejor de los casos. Ya tenemos la experiencia.

Ahora, a sujetarse los pantalones (o mejor dicho, las faldas, porque parece que así están las cosas!) y a seguir luchando por enseñarles a nuestro compatriotas lo que son sus deberes, no solo sus derechos. Todos debemos sufrir su indiferencia. Me da vergüenza ajena como piensan de nosotros tantos países que lo están pasando mal. Aquí en Chile, los que lo están pasando bien, abandonan el barco por su pereza e inconsciencia ciudadana.

¡TENEMOS EL PAIS QUE MERECEMOS!

Que la Santísima Virgen del Carmen nos proteja en estos próximos años y que nos enseñe a cumplir con Dios y con la Patria. Un abrazo,

Carmen G. de Martínez

Columna de Opinión

¿Por qué perdió la derecha?. Por Rodrigo García Pinochet. 18/12/2013 | Fuente: Cambio21

LAS OPINIONES DE ESTA COLUMNA DE OPINIÓN SON DE RESPONSABILIDAD DE SUS AUTORES Y NO REFLEJAN NECESARIAMENTE EL PENSAMIENTO DE UNOFAR

Por primera vez luego de la elección, un integrante de la familia de Pinochet, hace un análisis en forma exclusiva para Cambio21, sobre la rotunda derrota de la derecha tanto en la elección parlamentaria como la presidencial. El nieto de Pinochet -que iba en el auto cuando lo intentaron asesinar en el Cajón del Maipo- dice que la derecha perdió “las elecciones por su cobardía y pusilanimidad en defender al gobierno militar”

Podrán decirse miles de razones, algunas más sofisticadas que otras, acerca de la humillante derrota de la “derecha” que tras solo cuatro años gobernando el país, éste 11 de marzo de 2014 deberá entregar la banda presidencial de quien la recibió. “Será un paréntesis”, escuché decir a algún personero de la Concertación a fines de enero de 2010, que con gran clarividencia profetizó el corto paso de la “derecha” por La Moneda.

Creo sí existe una explicación que jamás será expuesta por algún dirigente de “derecha” ya que su omisión es precisamente parte de la misma. Y lo digo con todas sus letras: La “derecha” perdió las elecciones por su cobardía y pusilanimidad en defender al gobierno militar.

La derrota de la “derecha” viene arrastrándose por años, y el resultado de estas elecciones es la manifestación de un proceso en donde la izquierda ha triunfado en diferentes planos de nuestra sociedad. La “derecha”, cual ladronzuelo pillado, ha preferido entregarse a sus presuntos jueces reconociendo su culpa en haber participado en la “más horrorosa dictadura”, pretendiendo, con llorosos arrepentimientos y latosos perdones, conseguir la misericordia de una izquierda que gustosamente la ve humillada. Ha adjurado de su pasado pretendido cautivar a electores que jamás obtendrá, y en este proceso ha validado la supremacía moral de su adversario. Ha levantado banderas ajenas y engrandecido figuras de izquierda (escritores, músicos, columnistas, académicos, etc.) buscando una patética simpatía que se traduzca en votos.

Con su actitud, la “derecha” solo consiguió que la versión de la historia y las ideas imperantes en nuestra sociedad sean aquellas proclamadas por la izquierda. Permeando a una sociedad, sobre todo a los jóvenes, con una concepción de la vida cuya raíz es de izquierda. Ejemplo claro de ello es el enjuiciamiento que hacen de sus padres los hoy jóvenes políticos de “derecha”, hijos de aquella generación de líderes nacidos al alero del gobierno militar, quienes no reparan en condenar la acción de sus padres y del gobierno del cual fueron parte.

La “derecha” perdió las elecciones porque jamás comprendió que defender al gobierno militar no era defender a Pinochet y a los militares, sino a un gobierno que encarnó, como ningún otro en la historia de Chile, los principios e ideales que sustentan a su sector. Defender al gobierno militar era defender su propia y mejor obra, sus bases ideológicas, su existencia. Era contrarrestar y por ende balancear las concepciones políticas del país para impedir la supremacía de la izquierda en el campo de las ideas, su hegemonía.

Arrinconada y temerosa, alegre de con sus rentas, la “derecha” prefirió por largos años entregar a la izquierda el pasado y el presente, para abrazar un discurso de “futuro” que dejara atrás su origen “autoritario”. Así, la “derecha” solo consiguió el gobierno por cuatro años de la mano de alguien que acomodaticiamente utilizó al sector. Y la culpa de ello no es de Piñera, sino más bien, y hago un mea culpa en ello, de quienes votamos por él por la conveniencia de terminar con los gobiernos de la Concertación más que por la convicción en que su persona nos representaba. Creo muchos no cometeremos igual error en las próxima elecciones presidenciales.

De haber defendido al gobierno militar la derecha tal vez se hubiese demorado 25 en vez de 20 años en llegar nuevamente al gobierno, pero lo hubiese hecho con una base ideológica robusta, propia y sin cuestionamientos morales. Hubiese llegado al gobierno con alguien que realmente representara al sector, sin complejos ni lloriqueos de su pasado… Sí, esto es una ficción, pero no por ello digno de cuestionarse.
Lo cierto es que hoy en día la derecha, la verdadera, se encuentra ante un desafío que amenaza su existencia, una encrucijada que de no resolverla exitosamente podrá significar su extinción definitiva. Y este desafío no involucra solo al sector, sino a todo el país, ya que de no tener éxito la hegemonía imperante de la izquierda no tendrá contrapeso abriéndole camino a sus sectores más radicalizados que presionarán -movilizaciones incluidas- al gobierno de Michelle Bachelet y a los futuros gobiernos de izquierda por mayores cambios que alterarán la estabilidad del país y lo conducirán hacia un extremo socialismo y estatismo. Por ello, creo es sano que la actual “derecha” se divida para que la verdadera, aquella sin el prefijo de “centro”, pueda exponer sus ideas sin complejos ni reparos, sin temores ni vergüenzas. Pudiendo, presumiblemente desde un sector minoritario en un comienzo, cumplir una función de contrapeso de la izquierda para retornar el eje en el cual gira la política del país hacia el real centro político, aquel que Chile definitivamente perdió durante el actual gobierno.

Columna de Opinión

INFORMACIÓN PARA NUESTROS SOCIOS RELACIONADA CON LOS PROCEDIMIENTOS A SEGUIR EN CASOS DE CONSULTAS MÉDICAS EN REGIONES

LAS OPINIONES DE ESTA COLUMNA DE OPINIÓN SON DE RESPONSABILIDAD DE SUS AUTORES Y NO REFLEJAN NECESARIAMENTE EL PENSAMIENTO DE UNOFAR
Ante la frecuencia con que nuestros socios se encuentran con sorpresas al asistir a cualquiera de los recintos que prestan atenciones de salud en regiones, originadas por disposiciones de DIRECSAN relativas a restricciones que se establecen y que no han sido debidamente informadas a los retirados adscritos al SISAN se informa lo siguiente

1.- Ante la frecuencia con que nuestros socios se encuentran con sorpresas al asistir a cualquiera de los recintos que prestan atenciones de salud en regiones, originadas por disposiciones de DIRECSAN relativas a restricciones que se establecen y que no han sido debidamente informadas a los retirados adscritos al SISAN se informa lo siguiente :

PROCEDIMIENTOS DE EMISIÓN DE ORDENES DE ATENCIÓN: Se puede emitir una Orden de Atención a cualquier beneficiario del Sistema de Salud Naval, ya sea por una consulta médica en carácter de urgencia o una ambulatoria de primer nivel requerida por propia decisión del Beneficiario, para lo cual se debe cumplir los siguientes procedimientos

a.- Modalidad de Urgencia: Si se trata de una URGENCIA, el beneficiario podrá solicitar una Orden de Atención en el Emisor correspondiente a su ubicación geográfica para concurrir a la Unidad Ejecutora o Establecimiento de Salud público o privado más cercano para recibir la atención o podrá realizar el pago de la atención y posteriormente solicitar el rembolso en la unidad respectiva. En ambas situaciones, el beneficiario deberá presentar comprobante de atención médica donde se indique el diagnóstico, indicaciones y tratamiento con el respectivo comprobante de pago original cuando corresponda, el que será remitido al Administrador Financiero del Sistema de Salud de la Armada en un plazo no superior a 4 días vía correo electrónico a la direcciónauditoria.clinica.afisan@sanidadnaval.cl donde se autorizarán los pagos o descuentos respectivos, dependiendo de la calificación de Urgencia que Contraloría Clínica AFISAN determine

En caso de que una atención de Urgencia derive en Hospitalización, y para hacer efectiva la bonificación, el beneficiario o un familiar solicitará la Orden de Atención en el Emisor respectivo, quien deberá dar aviso al Administrador Financiero del Sistema de Salud de la Armada (A.F.S.A.) al email auditoria.clinica.afisan@sanidadnaval.cl en las primeras 48 horas hábiles siguientes del evento, remitiendo los antecedentes clínicos correspondientes, objeto evaluar la situación clínica del paciente y la indicación de hospitalización respectiva. La comunicación telefónica de este hecho, no exime de la responsabilidad de enviar el email. Los casos que correspondan a la Ley de Urgencia se tratarán y evaluarán de acuerdo a la citada Ley.

b.- Modalidad Ambulatorio. Frente a la solicitud de órdenes de atención por requerimiento del beneficiario y por tanto sin un médico derivador, la entidad autorizada por el Administrador de los Fondos de Salud de la Armada para la emisión de una Orden de Atención, podrá emitir dicha orden, sólo para una consulta médica de Primer Nivel, correspondiente a medicina general.

Para la realización de exámenes, derivados de esta consulta de Medicina General, se podrá emitir una Orden de Atención, hasta por un monto de $100.000. Los exámenes de un costo mayor a lo establecido, deberán ser autorizados por Contraloría Clínica del AFSA. a través del correo electrónico auditoria.clinica.afisan@sanidadnaval.cl

c.-Especialidad Médica. La emisión de Órdenes de Atención para consulta ambulatoria en el Segundo Nivel o Especialidades Médicas, deberán estar respaldadas por una Interconsulta, solicitada por un médico de un Servicio de Urgencia o de la Red SISAN, tanto de atención Primaria como Secundaria, para una Consulta de Especialidad Médica. Se emitirán Órdenes de Atención por exámenes derivados de este segundo nivel hasta por un monto de $ 100.000. Los exámenes de un costo mayor a lo establecido, deberán ser autorizados por Contraloría Clínica del AFSA. a través del correo electrónico auditoria.clinica.afisan@sanidadnaval.cl Las Órdenes de Atención por Hospitalización deberán ser solicitadas por un Médico de la Red SISAN y en ella se indicará Diagnóstico presuntivo y Plan Terapéutico, de acuerdo a la codificación FONASA Modalidad Libre Elección.

d.-Atención Odontológica. La emisión de Órdenes de Atención por consultas Odontológicas a prestadores preferenciales, se regirán por el mismo procedimiento exigido a las atenciones médicas, siendo requisito solicitar autorización a Contraloría Clínica del AFSA. a través del correo electrónico ya mencionado, acompañando presupuesto por el tratamiento total requerido.

e.-Programas Especiales. Aquellos beneficiarios que padezcan enfermedades crónicas tales como; Hipertensión, Diabetes, Dislipidemias, EBOC, Hipotiroidismo, Epilepsia, Artrosis y otras, podrán acceder a la Orden de Atención para especialidad médica directamente, sin requerir la derivación de medicina general. Para esto es necesario que el beneficiario se inscriba en el programa correspondiente, enviando una solicitud de su Médico Tratante donde indique Diagnóstico y Terapia indicada. Estos documentos deberán ser enviados por el Ente Emisor de Ordenes de Atención correspondiente a Contraloría Clínica del AFSA quien registrará a los beneficiarios en este programa especial con controles y exámenes definidos de acuerdo a las guías clínicas de la Autoridad Sanitaria.

2.- Con respecto a los descuentos que aparecen en la glosa DP 280.de la papeleta de pago de pensión se informa lo siguiente

Cada vez que un Beneficiario o Carga Familiar legalmente reconocida en el Sistema de Salud de la Armada, recibe algún tipo de prestación de salud, ya sea en el Policlínico Médico Dental Santiago, Hospital Militar de Santiago, Hospital FACH, CAPREDENA o en entidades de Salud Pública, Privada o de Profesionales Particulares que no pertenezcan al sistema, y con los cuales se haya celebrado convenios de prestaciones de salud y exista un valor no bonificado por el Fondo de Medicina Curativa (COPAGO), éste es tramitado para cobro a través del Policlínico Medico Dental Santiago, remitiendo mensualmente el correspondiente archivo de cobranza a la CAPREDENA, objeto efectuar los descuentos correspondientes a los COPAGO a través de la Papeleta de Pensión bajo la siguiente descripción: DP280 SERVICIO MEDICO DENTAL SANTIAGO (NB_PENS). Para conocer el detalle de dichos descuentos se sugiere contactarse con el Policlínico Médico Dental al FONO: (02) 27405076 o bien al correo electrónico dpena@sanidadnaval.cl .

Si un beneficiario recibió prestaciones de salud en el Hospital FACH, Hospital Militar, CAPREDENA o cualquier otro Centro de Salud, toda la cobranza y facturación de dichas prestaciones es centralizada en el “Policlínico Médico Dental de Santiago”, donde la información es procesada en el Sistema de Cobranza, aplicando las bonificaciones correspondientes (FOSAN, FOFAM y FOSPEN), y generando en forma automática un descuento máximo equivalente al 17,5% de la renta Imponible de cada beneficiario, el cual es efectuado por cada unidad ejecutora del SISAN, donde exista deuda. Es importante señalar que los costos de las prestaciones que reciben los usuarios, son procesados al mes siguiente de haberse efectuado y su descuento en papeleta es al mes subsiguiente a la prestación, en otras palabras, de la fecha de prestación transcurren dos meses (60 días) para su cobro. Ahora, en ciudades más alejadas como Arica y Antofagasta, transcurren hasta 90 días para su cobro.

Gentil aporte de nuestro socio Director don Juan Castro M.