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Un aporte de nuestro socio Raúl Godoy
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Un aporte de nuestro socio Raúl Godoy
A UN AÑO DE UN CRIMEN ALEVOSO Y NO RESUELTO
Humberto Julio Reyes
Me refiero, naturalmente, al asesinato del exteniente venezolano Ronald Ojeda, refugiado político en nuestro país.
Desde que se dieran a la publicidad los primeros antecedentes de su secuestro y el posterior hallazgo de su cadáver, todo ha llevado a presumir alguna participación de la dictadura venezolana, dada su condición de activo opositor político, aunque, como es natural, ello no ha sido reconocido por el gobierno de Maduro.
Últimamente la fiscalía ha declarado contar con testimonios que incriminarían a Diosdado Cabello en lo que sería un crimen por encargo, ejecutado por una célula del “Tren de Aragua”, misma organización criminal cuya existencia en Chile fue inicialmente negada por nuestras autoridades.
Se ha dicho que, de confirmarse la tesis de la fiscalía, se recurrirá a la Corte Penal Internacional.
Pero, ¿qué tan firme puede ser la evidencia como para sostener dicho recurso?
Una cosa es que la eliminación física de un disidente apunte a quienes se beneficien de ella, o que este caso nos recuerde otros famosos durante la era estalinista en que el asesinato de los opositores se perseguía con notable celo por parte de los servicios de seguridad soviéticos, sea recurriendo a fanáticos simpatizantes del comunismo o a sus propios agentes, sin importar donde se hubieren refugiado.
Al respecto y recordando el asesinato de Trotski en México, que ha sido llevado al cine, me permito recomendar la novela de Leonardo Padura, “El hombre que amaba los perros”, un texto apasionante.
Volviendo a los mencionados testimonios incriminatorios, no se conoce quien o quienes serían los testigos de cargo que le permitirían a la fiscalía acusar al poco discreto Diosdado Cabello, y que tan sólidos podrían ser los antecedentes aportados en un caso que podría derivar en un abierto enfrentamiento con un régimen con el cual ya, no existen relaciones de ninguna especie, aunque nuestro gobierno las considere suspendidas, para mofa del mencionado número dos de la dictadura chavista.
Tan delicado asunto me lleva a recordar una película hace poco exhibida repetidamente en el excelente canal Film & Arts.
Me refiero a la segunda versión de “Witness for the prosecution” (testigo de cargo), el inmortal clásico de Agatha Christie, donde la persona que inicialmente confirmaría la coartada del acusado por la fiscalía, termina incriminándolo y pasa a ser testigo de cargo.
Cuando ya se esperaba la consiguiente sentencia condenatoria, un nuevo vuelco y, finalmente, la película termina en forma absolutamente sorpresiva, tanto para quien ofició como abogado defensor como para los espectadores.
Pido excusas por la aparente frivolidad de esta comparación, entre un crimen con todos los agravantes y la fértil imaginación de una prolífica y famosa autora de novelas policiales, pero esta abreviada narración me ha llevado a pensar en la posibilidad que tras este alevoso crimen pudiere existir una astuta maniobra de intoxicación destinada, en última instancia, a desprestigiar a nuestro poder judicial.
Las maniobras de intoxicación y la desinformación también fueron de uso frecuente por parte de los servicios soviéticos y el recurso a ellas seguramente ha sido heredado por quienes fueron formados en sus métodos.
En ese orden de ideas, las recientes y crípticas declaraciones de Cabello, improvisadas o meditadas, hacen difícil separar ruido de señales:
“No han podido encontrar a los asesinos, si ellos jorungan (hurgan), van a encontrar a los asesinos facilito.”
¿Estará la fiscalía más cerca de identificar a los verdaderos responsables, como todos quisiéramos?
21 de feb. de 25
Los artículos publicados en esta sección, son de responsabilidad de sus autores y no reflejan necesariamente el pensamiento de la Unión de Oficiales en Retiro de la Defensa Nacional
“SALIR CON UN GÉMINIS ES UN DESASTRE” O
POR QUÉ NI LA AUTOAYUDA NI LOS ASTROS
SOLUCIONAN NUESTRAS RELACIONES FALLIDAS
Andrea Proenza – Flipboard, 14/02/2025
Una mujer lee en el tren de la línea Barcelona-Salamanca un libro cuyo título, en letras mayúsculas que ocupan toda la portada, interpela a cualquiera que lo mire: “TÚ NO ERES EL PROBLEMA”. Minutos después, recibe una llamada y aprovecha para recomendar lo que está leyendo: “Ha sido un antes y un después en mi vida”.
Una búsqueda rápida en Internet nos revela que el libro es de la psicóloga Elizabeth Clapés, quien, según la editorial Montena, cuenta con más de 100.000 lectoras (en femenino) y que su obra funciona como una guía para “entenderse y sanar tras el vínculo con personas narcisistas”.
Libros de autoayuda que prometen curarnos de relaciones dañinas o ‘tiktokers’ que predicen qué signos del zodiaco sufrirán más en el amor. En una época marcada por la incertidumbre, la autoayuda y la astrología se han convertido en herramientas populares para buscar sentido y control
La proliferación de la literatura de autoayuda se produce en un momento en el que la cultura neoliberal nos dice que tenemos el poder de decidirlo todo: desde alcanzar el éxito hasta encontrar el amor.
Un discurso que, paradójicamente, se superpone con el auge de una espiritualidad centrada en la astrología y el tarot, donde nuestras interacciones con el mundo y los vínculos sexoafectivos que establecemos dependen de la posición de los astros. “Tú tienes el poder para encontrar el amor, pero este 2025 los Géminis y los Tauro lo van a tener más complicado”, parece ser una de las contradicciones más recurrentes en estos días.
Pero ¿qué sucede cuando dejamos que esta clase de discursos se infiltren en nuestras vidas y, especialmente, en nuestras relaciones? ¿Realmente tienen la capacidad de ayudarnos a establecer vínculos más conscientes o, por el contrario, dirigen la mirada únicamente al interés particular?
La cultura del “yo” frente a los problemas estructurales. A pesar de sus diferencias —la astrología es considerada una pseudociencia, mientras que los manuales de autoayuda suelen estar escritos por profesionales de la psicología pero con un uso poco riguroso de la ciencia— ambas comparten el mismo punto de partida: la búsqueda de consejo en “un Otro”.
Sin embargo, este “Otro” no es una comunidad o una red de apoyo que busca el bienestar colectivo, sino una voz que se centra en el “yo”.
En La voz del oráculo (Reservoir Books), la historietista Liv Strömquist analiza el auge de la industria de desarrollo personal y cuestiona cómo el vocabulario terapéutico impregna cada vez más todos los ámbitos de la vida humana: “En MI viaje hacia la sanación…”, “MIS herramientas internas y MIS estrategias…” son algunos de los ejemplos que abundan en esta clase de discursos.
Vivimos en una época en la que el “yo” parece sobredimensionado pero que, dice Strömquist, tal vez debería ser interpretado como “un ‘yo’ extremadamente frágil, que está fragmentado, confuso y expuesto a una enorme presión”: “Estoy inseguro”, “estoy cansada”, “siento que la vida se me escapa de las manos”, “no me gusta mi cuerpo” …
Ante estos problemas aparentemente individuales, la cultura de la autoayuda —y, en menor medida, también la astrología— buscan “producir y regular un individuo que es libre de elegir” y capaz de solucionar sus propios problemas, tal y como explica el sociólogo Nikolas Rose.
La psicóloga Isa Duque y el equipo de Psico Woman atribuyen esta confusión del individuo, especialmente de las generaciones más jóvenes, a la situación de gran incertidumbre que les ha tocado vivir. “Han crecido en un contexto de crisis sistemática: la crisis económica, una pandemia mundial, conflictos bélicos, un genocidio, el ascenso de la ultraderecha en este país… No han tenido nada de certezas, ni del presente ni del futuro, y es normal que se hayan acercado o enganchado más a cualquier tipo de herramienta que te haga sentir que tienes más agenda, más autonomía, más gobernanza sobre tu destino, sobre tu cuerpo, sobre tu alimentación, sobre lo que sea”, explica.
Estos libros defienden que, con la actitud correcta, es posible atraer relaciones saludables, mejorar la vida amorosa y alcanzar objetivos personales, lo que indirectamente minimiza o ignora factores estructurales que influyen en nuestras vidas.
Al centrarse en la psicología individual, estos discursos invisibilizan problemas como el machismo, el racismo, la precariedad laboral, la crisis de la vivienda o la falta de protección a las personas migrantes, presentando el éxito y la felicidad como elecciones personales, en lugar de reconocer la influencia de sistemas de poder desiguales.
Además, este tipo de literatura tiende a negar el papel del azar o la suerte, lo que refuerza la idea de que quienes no logran sus metas simplemente no se han esforzado lo suficiente o no han “vibrado” en la frecuencia adecuada.
Sin embargo, la realidad es que, al igual que Laura (nombre ficticio), muchas personas consumen estos libros e ideales “pensando ‘este me va a ayudar o cambiar la vida seguro’, porque te venden que puedes tener un control total sobre tu vida. Pero luego te hacen sentir muy culpable. Si no consigues lo que sea, es tu culpa”.
En esta misma línea, cuando el libró Tú no eres el problema: Entiéndete y sana tras el vínculo con psicópatas narcisistas clasifica como tales a “maridos aparentemente maravillosos, pero infieles”, “padres ejemplares de cara a la galería, pero maltratadores a puerta cerrada” o “exitosos empresarios que no merecían sus puestos” está patologizando e individualizando estos comportamientos.
En lugar de señalar que responden a un sistema social que los permite y perpetúa, la solución propuesta es “identificarlos, alejarse y sanar”. Un enfoque que omite la necesidad de cambios políticos, económicos y sociales que prevengan y combatan estas violencias en primer lugar.
Por ejemplo, sustituir, en muchos casos, el concepto de “violencia machista” por el de “psicópatas narcisistas” o “relaciones tóxicas” invisibiliza esta realidad y el trabajo de numerosas teóricas feministas como Adrienne Rich, que politizaron la heterosexualidad como un régimen que refuerza la dominación masculina a través de diferentes fuerzas como “la violación, la socialización de las mujeres para hacerlas creer que el «impulso» sexual masculino equivale a un derecho, el control del aborto y la anticoncepción, la negación del acceso a la educación”, entre otros factores.
Estos sistemas de opresión interactúan con variables como la raza, la clase o la identidad sexual, produciendo desigualdades específicas. Detrás de cada “psicópata narcisista” hay una estructura que lo protege. Y tal vez una mujer tenga las condiciones materiales necesarias que le permitan “alejarse y sanar” —para que luego otra ocupe su lugar—, pero muchas otras simplemente no contarán con esa posibilidad.
Prejuicios en lo afectivo. Más allá de los contextos de violencia explícita, el desplazamiento de la fe religiosa hacia nuevas espiritualidades, como la astrología, las energías o el tarot, también influye en las relaciones afectivas.
Cuando una persona sufre en sus relaciones —especialmente amorosas— es natural querer encontrar explicaciones a “por qué me han hecho daño”. Tanto la autoayuda como la astrología ofrecen ese alivio momentáneo.
Como señala Strömquist, del mismo modo que las religiones brindan consuelo ante el miedo a la muerte, atribuir una mala relación a una “incompatibilidad zodiacal” ayuda a justificar por qué alguien que nos quería nos hizo daño.
Isa Duque explica que si existiera “un acompañamiento de calidad en el bienestar emocional de las personas desde que van a Infantil, luego no necesitarían aferrarse tanto a cuestiones como el signo del zodiaco o la carta astral”.
En este contexto, cada vez es más común que, en realities como Love is Blind, la cuestión de los signos zodiacales aparezca en los primeros encuentros de los participantes. En el programa, las solteras y solteros entran con el propósito de encontrar el amor verdadero en una época marcada por la superficialidad de las relaciones. Para ello, entablan citas a ciegas desde cabinas aisladas que no les permiten verse, solo escucharse.
En muchas de estas primeras conversaciones, preguntas como “¿qué signo eres?” se suman a otras como “¿dónde te gustaría vivir?” o “¿qué valores buscas en una relación?”, reflejando cómo la astrología ha pasado de ser una curiosidad esotérica a un filtro más en la selección amorosa (las apps de citas, por ejemplo, también permiten cribar por signos).
Este fenómeno no solo ocurre dentro del programa, sino también en la audiencia. Algunas creadoras de contenido, como The Amateur Guru, analizan la compatibilidad astrológica de los participantes y ofrecen su interpretación de por qué algunas parejas han funcionado y otras han fracasado.
Nuevamente volvemos a ese sesgo de confirmación que estas dinámicas infiltran en los vínculos afectivos. Esto, a su vez, “te va a cerrar la puerta a poder conocer gente y tener experiencias maravillosas”, razona Duque (Psico Woman), “ya que actúan como un filtro que busca protegerte. Vincularnos en los amores y vincularnos con otra persona implica mucha incertidumbre, implica soltar, tienes que abrirte de alguna manera al interrogante”.
Otra forma de contar historias. Sin embargo, la astrología no solo funciona como generadora de prejuicios, sino que también puede ser utilizada como fuente de creatividad. Este es el caso de Charas Vega, conocida en redes como @charcastrology, quien utiliza los doce signos del zodiaco como “un sistema de símbolos en el que se puede empaquetar todo” y que “le permite hablar de lo que le da la gana, desde la sociedad neoliberal obsesionada con el yo hasta los aspectos culturales que más le interesan, como el cine, la música, el arte, la cultura de Internet o los memes”, explica.
Vega, que es crítica con las pseudociencias, los gurús, los coaches y la autoayuda, utiliza la astrología como fuente de valor iconográfica y una herramienta narrativa: “Del mismo modo que puedes estudiar la iconografía católica siendo atea, yo uso la astrología para contar historias con humor y parodia”, como su post en el que puedes descubrir qué momento icónico de Montoya en La Isla de las Tentaciones eres según tu signo.
Sin embargo, su uso como recurso creativo no cambia el hecho de que, en muchos otros espacios, la astrología —al igual que la autoayuda— refuerza una lógica individualista. Ambas ofrecen soluciones personalizadas que sitúan al individuo como único responsable de su destino, desviando la mirada de los sistemas que condicionan su vida.
Pero la promesa de encontrar respuestas dentro de uno mismo o en los astros actúa solo como un espejismo contra la incertidumbre y no nos acerca a relaciones más justas ni a una sociedad más equitativa. Al final, ni los signos ni los libros de autoayuda tienen la respuesta: la clave está en no perder de vista lo colectivo, lo estructural y lo político.
Prejuicios en lo afectivo. Más allá de los contextos de violencia explícita, el desplazamiento de la fe religiosa hacia nuevas espiritualidades, como la astrología, las energías o el tarot, también influye en las relaciones afectivas.
Cris, científica de profesión y escéptica de estas creencias, admite sin embargo que a veces ha encontrado patrones de comportamiento similares en personas de ciertos signos. “Tengo mucha afinidad con los géminis, pero en relaciones de amistad. Las dos veces que salí con chicos de este signo, fue un desastre. En cambio, tengo problemas con los cáncer: mi expareja, mi exjefa, incluso el exnovio de mi madre. No creo en esto, pero a veces dudo”, explica.
Un aporte del director de la revista UNOFAR, Antonio varas Clavel
PUTIN, “EL NUEVO MEJOR AMIGO DE TRUMP”
Hitler y Stalin se repartieron Polonia. Trump y Putin se están repartiendo el negocio del petróleo de Medio Oriente y Rusia.
Trump rompe con décadas de política exterior de EE UU, para priorizar la normalización con Rusia. El presidente culpa a Zelenski, y no a Moscú, de la guerra: según él, debió aceptar la pérdida de territorio para evitar el conflicto Trump: “Cualquier negociador de medio pelo podría haberlo hecho”.
La última vez que Estados Unidos intentó un acercamiento a Rusia fue en 2009. La recién asumida Administración de Obama declaró el reinicio de las relaciones, botón de reseteo incluido. El experimento no acabó bien: cinco años después, en 2014, Rusia ocupó Crimea. Los dos países comenzaron, así, una larga era de sanciones mutuas.
Llama la atención la reticencia de EEUU y aun más de la UE, en aceptar que la Guerra Fría había concluído. Incluso cuando Rusia insinuó la posibilidad de que su país se incorporara a la OTAN. “Occidente”, bajo la batuta norteamericana siguió en la Guerra que había terminado, invocando la hostilidad rusa, su amenaza constante y sobre todo, su maldad irremediable heredada del maligno Imperio Soviético.
La OTAN -(EEUU / Biden)- siguió en sus afanes de expandirse, que culminaron con la incorporación de Suecia, Finlandia y finalmente el intento de incorporar a Ucrania.
Cambió el gobierno y las políticas de EEUU dieron una voltereta: Trump se lanzó a abuenarse con Rusia para orientar sus esfuerzos hacia China: Zelenski resultó ser un dictador, la OTAN hizo una de sus “verónicas” habituales y se hizo a un lado.
El ucraniano quedó solo, Europa sumida en preguntas existenciales, reticente a reducir su bienestar social para aumentar su gasto militar y dispuestas a hablar, hablar y hablar.
¿En qué estamos ahora? Rusia y EEUU conversan a solas en Arabia Saudita. En realidad la presencia de Arabia Saudita es clave. Se habla de Petróleo y Gas. Se habla de negocios descomunales a largo plazo. Los tres países unidos controlan la producción, refinación, transporte, venta y distribución de petróleo y gas a escala mundial Sin el menor recato Trump ha perifoneado que lo primero es que los tres hablen entre ellos y lleguen a acuerdo, Ucrania, sus muertos y su problemática es un side-show irrelevante.
Rusia y Arabia Saudita producen petróleo y pueden controlar el precio, EEUU controla su transporte y comercialización y en el proceso podría hacer su MAGA.
Es curioso que EEUU haya incluido la “Transferencia de Infraestructura” ucraniana en su pedida, además de las “tierras raras”, elecciones democráticas, entrega de territorios a Rusia y de materiales estratégicos: ¿Qué infraestructura?: Oleoducto desde Rusia a Oriente y desde Oriente a Europa.
En breve, el negocio es claro, la sociedad administra los precios y la competencia. Arabia Saudita y Rusia, le venden petróleo barato a EEUU, éste se queda con parte sustantiva de las ganancias derivadas del transporte, provee la seguridad del abastecimiento y mantiene el orden en los mercados, incluido el consumo. También evita su sustitución por otras fuentes energéticas. En breve, da estabilidad para hacer negocios tranquilos a largo plazo.
Un elemento clave será la actitud de Trump frente al dueño de las mayores reservas de petróleo: Venezuela. Maduro tiene una buena carta en sus manos. Veremos. Se está organizando una troika: EEUU, RUSIA y CHINA.
Melosilla, 20 de febrero de 2025
Fernando Thauby García
Capitán de Navío Infantería de Marina (r).
Un aporte de nuestro Past Presidente Humberto Julio Reyes
ENCUESTA DEMOSTRARÍA QUE LA PELEA PRESIDENCIAL
SERÍA ENTRE DOS MUJERES QUE YA SE ENFRENTARON:
55 % TIENE DECIDIDO O PODRÍA VOTAR POR MATTHEI Y
UN 50 % LO HARÍA POR BACHELET
Cambio21 – 17/02/2025
Un 45 % de los encuestados en la última medición de la empresa encuestadora Cadem respondió que “decididamente” no votaría por Evelyn Matthei. En el caso de la expresidenta Michelle Bachelet, un 49 % no sufragaría por ella.
La encuesta se realizó entre el último miércoles y el viernes, entrevistándose telefónicamente a 703 personas, tras 7.263 llamados, con una tasa de respuestas de 9,7 %.
De acuerdo con el sondeo, un 55 % dice que tiene decidido o podría votar por la exalcaldesa Evelyn Matthei y 50 % tiene decidido o podría votar por la expresidenta Michelle Bachelet.
Por otra parte, un 40 % tiene decidido o podría votar por el líder republicano José Antonio Kast, un 35 % tiene decidido o votaría por Johannes Kaiser y un 35 % también tiene decidido o votaría por el alcalde Tomás Vodanovic. Un 28 % tiene decidido o podría votar por la ministra Carolina Tohá.
A la vez, un 60 % no votaría por Kast, un 61 % no lo haría por Kaiser, un 63 % no lo haría por Vodanovic y un 70 % no lo haría por Tohá.
En la encuesta Cadem dada a conocer la semana pasada, Evelyn Matthei lidera la carrera presidencial, pero cayó 3 puntos con respecto al mes pasado a 20 %.
Le siguen el diputado Johannes Kaiser con 13 %, quien subió tres puntos y la expresidenta Michelle Bachelet con 12 % (7 puntos más que hace un mes).
El líder republicano José Antonio Kast bajó del tercer al cuarto lugar con 8 % (2 puntos menos que en enero).
Mas atrás aparecieron el alcalde Tomás Vodanovic con 4 % (un punto más que hace un mes) y la ministra Carolina Tohá con 3 % (un punto más que en enero).
Respecto a los atributos para ser presidente de Chile, Matthei aparece liderando en “trabaja con sentido de urgencia” (26 %), “tiene buenas ideas y propuestas” (26 %) y “hace que las cosas pasen de manera rápida” (27 %).
Mientras, Bachelet se queda con “tiene capacidad para hacer cambios en salud” (35 %), “es cercana” (36 %), “tiene la experiencia para ser presidenta” (42 %), “es capaz de generar diálogo y acuerdos” (36 %) y “es genuina, creíble y confiable” (26 %).
En evaluación de figura políticas, Tomás Vodanovic es nuevamente el personaje mejor evaluado con 71 % (un punto menos que hace un mes) de imagen positiva.
Es seguido por Evelyn Matthei (62 %, 3 puntos menos que en enero), Claudio Orrego (60 %, 7 puntos menos que hace un mes) y Michelle Bachelet (58 %, 1 punto menos que en enero).
Por su parte, en la aprobación presidencial en la segunda semana de febrero, un 32 % (2 puntos menos que la semana pasada) aprueba y un 62 % desaprueba la gestión del Presidente Gabriel Boric.
Un aporte del director de la revista UNOFAR, Antonio Varas Clavel
BAQUEDANO: LA MANO DEL GOBIERNO DETRÁS DE
LA POLÉMICA SESIÓN DEL CONSEJO DE MONUMENTOS
Francisco Artaza – La Tercera, 16/02/2025
El 5 de febrero pasado, a las 16.30 horas, el calor arreciaba en el salón de reuniones del segundo piso del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, en pleno centro de Santiago, donde sesiona habitualmente el Consejo de Monumentos Nacionales (CMN).
Llevaban dos horas y 10 minutos reunidos cuando la subsecretaria de Patrimonio Cultural, la frenteamplista y exmilitante de RD Carolina Pérez Dattari, pidió pasar al punto 6 de la tabla: “Iniciativa de cambio de ubicación del monumento público al general Manuel Baquedano, comuna de Providencia, Región Metropolitana”.
En una tensa reunión, y pese al rechazo de los consejeros, la subsecretaria de Patrimonio Cultural, Carolina Pérez, insistió en acotar la discusión sobre una futura ubicación del monumento a los lugares que han planteado desde el Ministerio de Defensa y que ya habían sido descartados por el mismo consejo en dos ocasiones.
Algunos consejeros se miraron sorprendidos. El tema había sido incorporado en la tabla de la sesión ordinaria apenas unas horas antes por la subsecretaria Pérez en su calidad de presidenta del consejo, por lo que nada se les anticipó. Algo completamente inusual en el funcionamiento del CMN. Tampoco pasó previamente por la comisión técnica de Patrimonio Histórico, como dicta la práctica dentro de la entidad.
Pero la sorpresa fue aún mayor cuando se dieron cuenta de que no había ningún antecedente técnico nuevo que ameritara la urgencia por tratar y votar esta materia, sobre todo, porque el mismo consejo en varias ocasiones, desde el año 2022, ya había autorizado el retiro, siempre en carácter temporal, de las diversas piezas que componen el conjunto escultórico que fueron vandalizadas durante el estallido social para proceder a su restauración.
Lo que vino después fue aún más inusual: al término de la cita se hizo un comunicado oficial que refrendaba el traslado de la estatua.
Ello levantó las suspicacias entre los representantes de las organizaciones de la sociedad civil ante el CMN de que estaba en marcha una operación política desde el gobierno para dar la impresión de que el consejo había dado su conformidad para una reubicación definitiva del conjunto escultórico levantado por erogación popular e inaugurado el 18 de septiembre de 1928 en homenaje al general Manuel Baquedano, héroe de la Guerra del Pacífico, y cuya figura histórica ha sido cuestionada por algunos sectores a partir del estallido social por su rol en la llamada “Pacificación de la Araucanía”.
La idea de que se estaba intentando avanzar en el traslado definitivo del monumento a otro lugar generó un fuerte debate que involucró desde personalidades del mundo político, historiadores y expremios nacionales de Arquitectura.
Recién el jueves de esta semana la subsecretaria Pérez, en medio de la polémica que se generó, cedió a la molestia de los consejeros que alegaban que el comunicado oficial de la entidad no representaba lo que habían acordado.
La autoridad debió sacar una nueva declaración para “precisar que el consejo solamente se pronunció conforme respecto de la solicitud de iniciar el proceso para el traslado del plinto del monumento al general Baquedano para su restauración, en el marco del proyecto Nueva Alameda. Lo anterior, en coherencia con anteriores acuerdos suscritos por el consejo”.
Este es el relato de la controvertida sesión del consejo y de cómo fueron desoídas por la autoridad las reiteradas advertencias de los consejeros sobre la confusión que se iba a generar, por lo que insistieron en que fuera modificada la redacción del acuerdo. Y de cómo, una y otra vez, la subsecretaria de Patrimonio Cultural exigió dejar en el texto del acuerdo que el consejo tomaría en consideración los lugares que presentaba el Ejército como posibles destinatarios finales del monumento a Baquedano, pese a que no existía ninguna solicitud específica sobre este último punto.
“Estoy confundido”. Ataviada con un vestido rojo intenso sin mangas, Carolina Pérez -quien al asumir la Subsecretaría de Patrimonio Cultural ya había tenido que apaciguar una polémica debido a la fotografía que se tomó como candidata a la Convención Constituyente y en la que se le ve con el puño en alto arriba del pedestal de la estatua ecuestre de Diego Almagro, destruida durante el estallido social- fue quien abrió el debate al anunciar la iniciativa de cambio del monumento público al general Baquedano.
“Esta es una conversación tremendamente importante”, dijo Pérez al señalar que “tenemos una solicitud por parte del Ministerio de Obras Públicas, tenemos también un oficio por parte del Ministerio de Defensa, en particular la Subsecretaría de Fuerzas Armadas, respecto de la ubicación actual del plinto” (base del conjunto escultórico en homenaje al general Baquedano), señaló, antes de agradecer el trabajo que habían llevado adelante esos ministerios y de acotar que “desde esa perspectiva vamos a abordar esta iniciativa”.
A última hora de la tarde del martes 4 de febrero, en la previa a la sesión del CMN, la directora nacional de Arquitectura del MOP, Loreto Warh, había enviado la solicitud N° 916 mediante la cual se pide la conformidad del consejo para que, en el marco del proyecto de remodelación del espacio público del eje Alameda-Providencia que está en marcha, se pueda iniciar el proceso de retiro y restauración del pedestal de piedra -obra del afamado arquitecto Gustavo García del Postigo, el mismo que diseñó el edificio de la Biblioteca Nacional- y que es la única pieza del conjunto escultórico que aún queda en el óvalo de la rotonda de la Plaza Baquedano, tras el retiro de la escultura del general y su caballo Diamante, y más tarde los bronces alegóricos a las batallas de Chorrillos y Miraflores y las esculturas de La Gloria y El Soldado, todas ellas piezas del reconocido escultor Virginio Arias.
Lo que llamó la atención de algunos consejeros es que al momento de dar cuenta de la solicitud del MOP por parte de la secretaría del CMN, esta se asociara a un oficio que había enviado Luis Lobos, jefe de gabinete del subsecretario de las Fuerzas Armadas, Galo Eidesltein (PC), en el que se detallan las condiciones que planteaba el Ejército para el futuro emplazamiento del complejo escultórico en homenaje a Baquedano, y que luego se les exhibiera una lámina bajo el título “Proyecto MOP 2025 -posibles destinos para la instalación del MP”.
Allí se especificaban tres lugares: la Plaza Ercilla, junto al edificio Bicentenario de la Comandancia en Jefe; el bandejón central de Américo Vespucio Norte, frente a la Escuela Militar, y el bandejón central de la Alameda, entre Morandé y Zenteno, al lado del monumento al general y expresidente Manuel Bulnes.
Sitios que ya habían sido puestos sobre la mesa por el Ejército durante el gobierno de Piñera II, afirma a La Tercera el exsubsecretario de Patrimonio Cultural de Piñera, Emilio de la Cerda, y rechazados en dos oportunidades por el CMN.
En ningún momento la propuesta del MOP planteaba la reinstalación del monumento a Baquedano en el mismo lugar donde ha estado emplazado en los últimos 96 años.
“La idea es aprovechar las obras que estamos realizando en la Alameda para sacar el plinto, restaurarlo, mientras se define con el Ejército la nueva ubicación. Ese es el trabajo que queremos hacer y más bien lo vemos como una oportunidad de recuperar el monumento que está fraccionado, dividido y donde ya hay un acuerdo para reubicarlo”, dijo entonces la directora nacional de Arquitectura del MOP, Loreto Warh, quien es la representante de la cartera ante el consejo.
Para entonces las alertas habían saltado entre los consejeros nombrados por las organizaciones de la sociedad civil, los que miraban con recelo el intento por parte de algunos actores gubernamentales de circunscribir el debate sobre el futuro del monumento a Baquedano a una decisión castrense.
“En principio, lo que se pretendía no era solamente confirmar la autorización del retiro temporal del plinto, sino que, además, se pretendió avanzar en la discusión del lugar definitivo que tendría el conjunto monumental después de su restauración, y para eso se plantearon sólo tres alternativas propuestas por el Ejército”, explicó para este reportaje Francisco Herrera, consejero en representación del Colegio de Arquitectos.
Lo anterior quedó en evidencia al momento en que se presentó por parte de la subsecretaria Pérez el texto de acuerdo con los consejeros para su discusión y posterior votación. “El consejo se pronuncia conforme con la iniciativa de cambio de ubicación del MP al general Manuel Baquedano, en el contexto de la ‘habilitación espacio público nudo Baquedano’, considerando la voluntad señalada por el Ministerio de Defensa de reubicar el monumento público a partir de una terna de ubicaciones propuesta por el Ejército de Chile”, señalaba el texto en su encabezado.
Mientras que en segundo plano aparecía lo que a todas luces era lo medular para los consejeros en ese momento: que la autorización para ejecutar las obras de remoción y restauración se otorgarían solo después de que el MOP remitiera los antecedentes con los estudios científicos y técnicos correspondientes, lo que permitiría asegurar que las obras no dañaran aún más el pedestal. Muchos recordaban lo ocurrido años antes con la restauración del monumento a Manuel Rodríguez, que sufrió algunos estropicios con motivo de la ejecución de las obras.
Ya en 2021, el consejo junto al escultor Vicente Gajardo y a una empresa de minería habían realizado una evaluación técnica del estado en que se encontraba el pedestal. Se constató entonces que las piedras superficiales estaban atomizadas y con fisuras debido al calor del fuego ocasionado por vándalos.
Gajardo planteó un plan de restauración que debía realzarse en otro sitio, pues el Estado no garantizaba la seguridad de las personas que iban a ejecutar las obras ante posibles ataques violentos. Cuatro años después, aunque el escenario social en Chile no es el mismo que durante el estallido, el MOP echó mano a ese mismo informe técnico para presentar su propuesta al consejo.
Tras ver la presentación de la secretaría del CMN y la redacción del texto de acuerdo propuesto por la subsecretaria Pérez, el primero en manifestar dudas fue el representante de la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Chile ante el consejo y experto en restauración, Felipe Gallardo. “Estoy un poco confundido”, dijo. “Acá hay dos solicitudes. Una del MOP para trasladar el plinto para restaurarlo, y luego hay otra solicitud que es para la reubicación definitiva del monumento público, por lo que pido aclarar eso”, añadió.
La respuesta de la subsecretaria Pérez, lejos de aclarar confundió aún más las cosas. “Se trata de una solicitud”, refiriéndose a la petición del MOP para tener la anuencia para el traslado del pedestal para su restauración. “Lo que se suma al acuerdo es la voluntad de que, una vez que se restaure el conjunto escultórico, esté en alguna de esas posibles ubicaciones descritas en el oficio que nos envió el Ministerio de Defensa”.
Y añadió la autoridad: “Se define en esta sesión dónde va a estar definitivamente, no. Pero nos abrimos a la voluntad de considerar la propuesta que se ha hecho desde el Ejército junto al Ministerio de Defensa en una mesa de coordinación y trabajo”.
En cuatro ocasiones más, Pérez insistiría ante los consejeros que manifestaban que no era el momento de discutir el destino final del monumento, que “el acuerdo era uno (sólo la restauración), pero dentro de ese acuerdo manifestamos la voluntad de considerar las opiniones que nos entregan desde el Ministerio de Defensa”.
“Un asunto altamente sensible” El interés de la subsecretaria de Patrimonio Cultural por dejar explícito en el texto del acuerdo la voluntad del consejo de que el destino final de la escultura sería uno de los tres lugares planteados por Defensa alarmó a la mayoría de los consejeros. Francisco Herrera, representante del Colegio de Arquitectos, pidió la palabra: “Se trata de un asunto altamente sensible, complejo, por las implicancias políticas, sociales, culturales, técnicas y comunicacionales que están asociadas”.
Aunque anunció que aprobaría el traslado del pedestal para su restauración debido al riesgo en que se encontraba la obra, remarcó que debía ser temporal. “La solicitud del MOP remite al ordinario 2971 del año 2022 que autoriza el traslado y lo dice literalmente: ‘temporal’, del complejo escultórico. Qué entendemos por temporalidad en el consejo, cuál es nuestra capacidad para cumplir los compromisos y honrar los que fueron adoptados por quienes nos precedieron”, dijo.
Además, hizo una extensa reflexión sobre la necesidad de debatir este tema de una manera integral y dar espacio para que se pronuncien otros actores de la sociedad. “La Plaza Baquedano es inherente e irreductible a la existencia de su monumento. Hay una vinculación entre el objeto y el soporte que también debemos abordar desde la perspectiva de la resignificación que va a significar sacar justamente al objeto del lugar que lo soporta”. Y advirtió: “Así va a ser leído por algunos miembros de nuestra comunidad, de que en Chile no se puede hacer respetar el Estado de Derecho frente a eventuales actos vandálicos”.
Uno a uno se sumaron las voces de los consejeros molestos por la forma en que algunos de los representantes del gobierno en el consejo buscaban aunar el debate de la restauración, en el que evidentemente había pleno acuerdo, con la intención de que se dejara asentado el traslado definitivo del monumento. “Lamento que estas conversaciones se hayan hecho entre representantes de ministerios y no con participación de la sociedad civil”, argumentó Cecilia García-Huidobro, representante del Instituto de Conmemoración Histórica.
“Pasar de la discusión del retiro del plinto para su restauración, en lo que estamos de acuerdo, para reunificar la obra, la tumba al soldado desconocido, y la estatua, al lugar donde se va a emplazar, me sorprende; eso no ha sido discutido”, remarcó.
Una vez más, Pérez precisó que no estaba en discusión el destino final del monumento a Baquedano, pero “para nosotros es muy importante poner en el acuerdo que esto (la propuesta de Defensa sobre posibles ubicaciones) ha sido conversado, si bien no está zanjado”.
El deseo de la subsecretaria fue parado en seco por el arquitecto Felipe Gallardo. “Este es un acuerdo cuya redacción es muy delicada. Planteo que la redacción deje en claro que así como puede haber una relocalización del monumento en un nuevo emplazamiento, también está abierta la posibilidad de que permanezca en el mismo lugar al que se conoce como Plaza Baquedano”, señaló el arquitecto y académico de la Universidad de Chile.
Gallardo pidió expresamente que se modificara el orden de la redacción del acuerdo para dejar en el encabezado la anuencia del consejo a la restauración y reunificación del conjunto escultórico, porque de otro modo “se puede inferir una anuencia a un tema que no ha sido debatido”, lo que fue secundado por varios consejeros, quienes demandaron que se pusiera en el texto que la discusión sobre el futuro del monumento debía abrirse a la sociedad.
Para entonces la discusión se había extendido por casi dos horas. Fue en ese minuto que la consejera Verónica Serrano, quien representa al Ministerio del Interior, intentó separar los temas para destrabar la discusión.
Explicó que la propuesta del MOP respondía a que podían usarse para la recuperación del monumento los recursos financieros que tenía el proyecto de modificación del eje Alameda-Providencia, y que se trataba de una oportunidad para avanzar en algo en lo que todos estaban de acuerdo: “Hacer el estudio y luego reparar el plinto y la escultura en su conjunto. Eso es lo primero que hay que hacer. Lo segundo, es lo ocurrido en esta discusión, que es que hemos tomado conocimiento de esta iniciativa del Ministerio de Defensa y que se evaluaría en su minuto, yo no diría nada más, porque no tenemos ningún otro antecedente respecto de cómo proceder con eso”.
Tras la intervención de la asesora de Interior y madre del frenteamplista Miguel Crispi, jefe de asesores del Presidente Boric, la subsecretaria Pérez se allanó a un cambio de redacción del texto del acuerdo.
Mas de 10 minutos estuvo la sesión suspendida. Momentos en que los consejeros Herrera y García -Huidobro discutieron con micrófonos apagados el documento con la subsecretaria.
Varias veces Herrera le pidió a Pérez que pusiera en el encabezado que el traslado del plinto sería temporal, tal como lo señala el acuerdo del consejo de 2021. Pero ella se negó. Tampoco aceptó sacar la frase que comprometía al consejo a “considerar la propuesta de Defensa” cuando llegue el momento de definir el futuro emplazamiento del conjunto escultórico.
Casi tres horas después de iniciado el debate, los consejeros aprobaron el acuerdo, más que nada por la importancia de avanzar en la restauración del monumento, pero llenos de dudas por lo que vendría.
La forma en que se comunicó oficialmente el acuerdo sólo empeoraría las cosas. Algo que sólo fue enmendado esta semana, tras la presión de los consejeros y la ola de críticas que desató en diversos sectores de la sociedad.
Un aporte del director de la revista UNOFAR, Antonio Varas Clavel
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