U al dia

OTRO 11 DE SEPTIEMBRE

También, sin alterar el orden público ni ofender a quienes pudieran aun percibirnos como enemigos, hemos rendido homenaje a esos grandes hombres que asumieron la tremenda responsabilidad de encabezar la reconstrucción de un país al borde del abismo.

            Seguramente, nadie que no haya vivido los 1000 días de la Unidad Popular podrá entender y justificar el 11 de septiembre de 1973.
            Hace 37 años, y a la misma hora en que se escriben estas líneas, ya nos habíamos enterado de la identidad de nuestros primeros camaradas caídos.
            Todos muy jóvenes, todos subalternos.
            Ninguno deliberó ni participó de las decisiones que llevaron a reemplazar por la fuerza un gobierno caído en la ilegitimidad.
            Se limitaron a cumplir con su deber de obediencia, a costa de sus vidas.
            Honraron su juramento a la Bandera y murieron sin saber si su temprano sacrificio tendría valor y significado para nuestra Patria.
            Hoy los hemos recordado nuevamente en forma privada y respetuosa, con aprecio por los camaradas perdidos y rogando porque algo similar no vuelva a producirse en el devenir de nuestra sociedad.
            También, sin alterar el orden público ni ofender a quienes pudieran aun percibirnos como enemigos, hemos rendido homenaje a esos grandes hombres que asumieron la tremenda responsabilidad de encabezar la reconstrucción de un país al borde del abismo.
            Mientras ello sucedía en nuestra sede, una masiva manifestación se organizaba en las proximidades del palacio de La Moneda.
            El ambiente se apreciaba festivo, mientras predominaban banderas rojas y emblemas de los partidos que conformaban la Unidad Popular de triste recuerdo, junto con himnos y canciones de esos felizmente lejanos 1000 días.
            ¿Algo que celebrar?
            Probablemente la respuesta sea positiva para quienes han logrado imponer su sesgada versión de la Historia.
            Para quienes seguimos asumiendo todos los costos, nada habría que celebrar, sólo recordar con la esperanza de días mejores en un país más justo.
2010-09-11
U al dia

Eficiencia en lo equivocado. Vea títulos y temas que se encuentran en nuestra biblioteca

Mientras en otras situaciones las autoridades hacen oídos sordos a todos los argumentos esgrimidos para que se respete el Estado de Derecho en Chile, en este caso se cede a las presiones de quienes lo han violentado y lo desconocen, invocando derechos ancestrales.

            La huelga de hambre declarada por 32 comuneros mapuches ha desencadenado una rápida respuesta por parte del Gobierno con miras a modificar la Ley Antiterrorista y el Código de Justicia Militar.
            Con diligencia digna de mejor causa, se legisla al revés, modificando las normas vigentes a objeto se adapten a una demanda de discutible legitimidad.
            ¡Envidiable eficiencia!
            Pero nos parece que en lo equivocado.
            Mientras en otras situaciones las autoridades hacen oídos sordos a todos los argumentos esgrimidos para que se respete el Estado de Derecho en Chile, en este caso se cede a las presiones de quienes lo han violentado y lo desconocen, invocando derechos ancestrales.
            ¿Hasta dónde se llegará por este camino?
            Paralelamente, las declaraciones de un terrorista que cumple pena en el extranjero han obligado a reactivar la causa por el asesinato del Senador Jaime Guzmán Errázuriz (QEPD).
            Después de 19 años en que los hechores materiales han permanecido impunes y los autores intelectuales ignorados, se enciende una luz de esperanza para aclarar este crimen odioso y cobarde.

 

            Lo anterior se une a la denuncia de la Fiscalía Colombiana relativa a los nexos entre la guerrilla de las FARC y el inefable Partido Comunista, cuyo brazo armado, el FPMR, realizara innumerables actos de violencia, incluso durante los gobiernos de la Concertación.
            Los dirigentes de este último partido piden explicaciones.
Sin comentario.
¿Y qué hay de las armas internadas ilegalmente por Carrizal Bajo y que nunca han sido encontradas?
¿Habrá algún día similar diligencia para buscarlas?
2010-09-04         
U al dia

NO SE OYE, PADRE

Aplausos a todos, menos a los que no quieren oír. La semana que termina, quienes seguimos empeñados en que se aplique la igualdad ante la ley a nuestros camaradas condenados y procesados, nos enteramos de varias buenas noticias que nos indican que en esta desigual lucha no estamos solos

  

            La semana que termina, quienes seguimos empeñados en que se aplique la igualdad ante la ley a nuestros camaradas condenados y procesados, nos enteramos de varias buenas noticias que nos indican que en esta desigual lucha no estamos solos.
            Estas, posiblemente permanecieron ignoradas por el grueso público que tiene, naturalmente, otras preocupaciones más prioritarias, pero imaginamos que habrán llegado a conocimiento de las autoridades de gobierno que tienen la responsabilidad de aplicar la ley sin discriminaciones.
            Nos referimos, en primer término, a las declaraciones de dos religiosos y un connotado político, a quienes nadie podría suponerles alguna especial simpatía por los uniformados.
            En una, Monseñor Bernardino Piñera manifiesta sin ambages su postura favorable al indulto propuesto por la Iglesia y que fue prematura y abruptamente desechado por el Presidente de la República.
            En otra, el Padre Fernando Montes, en entrevista publicada en la revista SÁBADO de El Mercurio, explica por qué apoyó el indulto y la sorpresa que le causó el fracaso de la petición de la Iglesia Católica.
            Finalmente, Don Gabriel Valdés Subercaseaux, ha señalado en forma inequívoca que el indulto, a su juicio, debiera aplicarse sin excepciones o con poquísimas.
            ¿Se lee o escucha esto en Palacio?
            Aparentemente ni lo uno ni lo otro. Mejor hacer oídos sordos.
            Por otra parte, dos mujeres excepcionales, honrando una tradición nacional, siguen empeñadas en este esfuerzo que, por momentos, pareciera estéril.
            Una es la diputada María Angélica Cristi quien, con su conocida franqueza y valentía, planteó el tema que nos preocupa en la reciente elección de la UDI en discurso público en presencia del Presidente de la República.  
            No podrá decir que no la escuchó.
            ¿Y el Ministro de Justicia? Bien, gracias.
            En segundo término, la Sra. Clara Szcaranski, incansable defensora de la legalidad, lanzará un nuevo libro este lunes 30, titulado “La obediencia forzada en crímenes contra los Derechos Humanos”.  
            Aplausos a todos, menos a los que no quieren oír.
2010-08-29
U al dia

ARREPENTIMIENTO Y PERDÓN (Boletín Nº2 y programa 11 sep. UNOFAR Va. Región en Filiales)

Resuelta negativamente la iniciativa de indulto por el Bicentenario planteada por la Iglesia Católica, sigue abierta la puerta para que el Gobierno resuelva caso a caso el conceder indultos o beneficios intrapenitenciarios a quienes ya han sido condenados
            Resuelta negativamente la iniciativa de indulto por el Bicentenario planteada por la Iglesia Católica, sigue abierta la puerta para que el Gobierno resuelva caso a caso el conceder indultos o beneficios intrapenitenciarios a quienes ya han sido condenados.
            Naturalmente y como es costumbre en nuestro reconciliado país, ya se han levantado voces para oponerse, recurriendo a los más variados argumentos para mantener indefinidamente la desigualdad ante la ley que aflige a nuestros camaradas.
            Circula en Internet la larga carta de un parlamentario de oposición quien sostiene que todos los que están en prisión cometieron horribles crímenes y no se han arrepentido ni solicitado perdón públicamente.
            Esta persona no dice la verdad, quizás por no conocer el tema en profundidad.
            Aun si aceptáramos que las condenas impuestas fueran merecidas, no todos habrían cometido “horribles” crímenes y nos consta que más de alguno está arrepentido por los excesos en que pudo incurrir. Igualmente nos consta el pedido de perdón de al menos uno de los autores de un crimen emblemático.
            Luego, si ése fuera el inconveniente final, para algunos no existiría.
            Pero, por otra parte, la prensa nos informa de la reciente detención de un grupo de personas que habrían participado en la colocación de bombas “en plena democracia”.
            Entre ellos se identifica a dos extremistas que, habiendo participado en el asesinato de tres detectives en 1992, fueron indultados en 2004.
            Es más, uno de ellos recibió sanción adicional por tenencia de explosivos en prisión.
            ¿Alguien les pidió que demostraran arrepentimiento o que imploraran perdón a las familias de sus víctimas?
            Persona alguna lo exigió y fueron tranquilamente indultados, al igual que la totalidad de quienes cumplían penas por la ley antiterrorista.
            Es que en Chile algunos dicen que existe la igualdad ante la ley y muchos lo creen.
2010-08-16    
U al dia

COMPÁS DE ESPERA

Paralelamente nos hemos enterado de un proyecto presentado por el Ministro de Defensa Nacional y que busca modificar el Código de Justicia Militar para incorporar la pena accesoria de degradación a los delitos llamados contra los derechos humanos y que muchos desinformados confunden con los de lesa humanidad.
            Las organizaciones de personal retirado de las Fuerzas Armadas y Carabineros de Chile nos encontramos expectantes ante la proximidad de nuestras Fiestas Patrias y lo que el Gobierno podrá resolver con motivo de estas festividades.
            Nos hemos agrupado en una instancia de coordinación, el Consejo de Defensa de Militares y Carabineros (CODEMCA), con el objeto de intercambiar información respecto y aunar esfuerzos en las acciones que cada una realiza con miras a lograr la anhelada igualdad ante la ley para nuestros camaradas presos y procesados.
Estamos expectantes pero no inactivos.
Toda idea que se nos proponga con el señalado fin será presentada a dicha instancia y debidamente analizada sin precipitarnos ni caer en la desesperanza.
En la semana que termina hemos advertido buenas y malas señales.
La diputada María Angélica Cristo ha visitado el Penal de punta Peuco y ha nuevamente expresado sus puntos de vista, con claridad y valentía, ante la opinión pública.
Su permanente labor de apoyo a nuestra causa merece todo nuestro reconocimiento y gratitud, lo que hacemos extensivo a otros parlamentarios que también se han sumado a esta cruzada por hacer respetar nuestros derechos.
Paralelamente nos hemos enterado de un proyecto presentado por el Ministro de Defensa Nacional y que busca modificar el Código de Justicia Militar para incorporar la pena accesoria de degradación a los delitos llamados contra los derechos humanos y que muchos desinformados confunden con los de lesa humanidad.
Se dice que, de aprobarse esta iniciativa, no tendría efecto retroactivo.
¿No se adoptaron similares resguardos al tipificarse en nuestra legislación los delitos de lesa humanidad, hace poco más de un año?
¿Y qué ha ocurrido?
La respuesta está en la prensa y en las intervenciones públicas de diversas autoridades: en la práctica sí tiene efecto retroactivo.
¿Qué vendrá a continuación? ¿La supresión de los derechos previsionales para castigar adicionalmente a nuestras familias?
Pareciera que, en este esfuerzo por contentar a un sector siempre insatisfecho, no hay límites.
2010-08-10
U al dia

SE HA PERDIDO UNA BATALLA

Derecho al debido proceso y a la presunción de inocencia, para cualquiera que sea citado por tribunales o procesado. Derecho a ser juzgado por tribunales competentes y de acuerdo con las leyes vigentes al momento de cometerse los hechos que se investiguen

 

Sí, aunque nos duela reconocerlo, se ha perdido una batalla.
Desde hace años que nuestra Unión, junto a otras instituciones y diversas organizaciones y personas, ha estado firmemente empeñada en un esfuerzo por que se respeten los derechos de nuestros camaradas y se recupere la verdad histórica.
En el ya largo camino recorrido hemos encontrado desde indiferencia hasta franca oposición, pero también hemos logrado importantes apoyos.
La iniciativa del Indulto Bicentenario, planteada por la Iglesia Católica a nuestro Gobierno se contaba entre esos últimos.
Desafortunadamente no ha tenido acogida.
Sin embargo, aunque agradecíamos profundamente la valentía de plantearla, ella excedía nuestras pretensiones que no eran otra cosa que reclamar la igualdad ante la ley.
Eso es lo que seguiremos exigiendo a los responsables del Estado.
Ni perdón ni impunidad, sólo lo que nos corresponde como ciudadanos chilenos.
Derecho al debido proceso y a la presunción de inocencia, para cualquiera que sea citado por tribunales o procesado.
Derecho a ser juzgado por tribunales competentes y de acuerdo con las leyes vigentes al momento de cometerse los hechos que se investiguen.
Derecho a beneficios intrapenitenciarios en caso de ser condenado a pena efectiva.
Naturalmente que, en este último caso, desearíamos alguna muestra de humanidad respecto a nuestros camaradas enfermos o de avanzada edad que les permita volver junto a sus seres queridos aunque sea para vivir sus últimos días.
Nunca es tarde para recapacitar.
Se ha perdido una batalla, esperemos que no se pierda la guerra.
2010-08-01
U al dia

¿PELIGRO PARA LA SOCIEDAD?

Como era previsible, la sola idea de beneficiar a alguno de nuestros camaradas que cumplen condena, encuentra inmediato rechazo en todo aquel que se identifica con el funesto “ni perdón ni olvido”.

            Expectación ha creado la inminente decisión presidencial respecto a la propuesta de la Iglesia Católica del llamado “Indulto Bicentenario” y a la cual han adherido parcial o totalmente otros credos y diversos sectores de la opinión pública.

            Como era previsible, la sola idea de beneficiar a alguno de nuestros camaradas que cumplen condena, encuentra inmediato rechazo en todo aquel que se identifica con el funesto “ni perdón ni olvido”.
            A quienes aspiramos a superar las diferencias del pasado y avanzar unidos, tanto en la reconstrucción material de nuestro país como en el progreso y desarrollo espiritual de nuestros descendientes, tal actitud también nos provoca rechazo, pero la entendemos por tener incorporado un fuerte componente emocional e ideológico.
            Sin embargo, a dicho cerrado rechazo se suman opiniones aparentemente neutras pero que confunden echando mano a toda clase de argumentos.
            El más socorrido es que liberar delincuentes se contrapone con el anunciado esfuerzo del gobierno por reprimirlos.
            ¿De qué delincuentes estamos hablando?
            Si se trata de lo que se entiende por delincuentes comunes, ellos ya se han beneficiado de una reforma procesal penal que da plenas garantías al inculpado y, en su momento, se aplicó la prescripción para absolverlos.
            Si a pesar de lo anterior se encuentran encarcelados es entendible la preocupación por su eventual reincidencia en caso de se indultados.
            No mencionemos a condenados por delitos terroristas. Todos gozan de libertad y más de alguno ha reincido en sus conductas criminales, como es el caso del hasta hace poco tiempo prófugo Juan Aliste Vega.
            Pero, los llamados violadores de los derechos humanos, ¿tienen alguna posibilidad o capacidad de reincidir?
            Posibilidad, ninguna, por cuanto el contexto ha cambiado absolutamente para ellos, ya no son funcionarios del Estado. Capacidad, menos. Muchos de avanzada edad o gravemente enfermos.
            Luego, no son un peligro para la sociedad y tampoco necesitan reinsertarse.
2010-07-25