Fallece Cristóbal Colón, navegante y explorador: El navegante y explorador Cristóbal Colón murió en Valladolid, España, a los 55 años, a consecuencia de un ataque cardíaco.
Gran terremoto azota a la capital: Tiene lugar en Santiago un formidable terremoto a las diez y media de la noche.
Continuó temblando casi un año y se extendió hasta Maule. Se cree que murieron más de 1.000 personas. Del fervor religioso despertado por la tragedia ha quedado la tradición del Señor de mayo, un Cristo del templo de San Agustín al que el sismo sólo logró correrle la corona de espinas de la frente a los hombros sin que más tarde pudiera nadie moverla de allí para alzársele.
Elección del primer tribunal de justicia: La Junta de Gobierno, en unión con los diputados del Congreso, eli- jen los miembros que deben constituir el Tribunal de Apelaciones para la administración de justicia.
Combate de San Carlos: Acción bélica durante la Patria Vieja, enmarcada en de la primera expedición realista a Chile al mando del brigadier Antonio Pareja en 1813, quien con la colaboración de Chiloé, Valdivia y Concepción logró formar un ejército de casi 2.000 hombres. El resultado de esta sangrienta batalla quedó indeciso, considerando 100 muertos y 70 heridos patriotas, la dispersión de los cuerpos e indisciplina de las milicias y que las tropas realistas del comandante Sánchez se retiraran durante la noche hacia Chillán.
Combate de Talcahuano: Enfrentamiento ocurrido en la Patria Vieja, en el cual el ejército patriota toma Talcahuano que estaba en manos de los realistas.
Tratado de Lircay: Durante la independencia, se firma una tregua
entre el bando patriota –representado por Bernardo O’Higgins- y el realista –representado por Gabino Gaínza. Entre sus artículos, se estipulaba el reconocimiento de la soberanía de Fernando VII y de la autoridad de la regencia; se enviarían representantes a las cortes de Cádiz, España, “para sancionar en las cortes la constitución que éstas han formado, después que las mismas cortes oigan sus repre- sentaciones”, manteniéndose mientras tanto el gobierno interior con todo su poder y facultades, inclusive el comercio libre con las naciones aliadas y neutrales; el ejército realista debía evacuar la ciudad de Talca en el plazo de 30 horas y toda la provincia de Concepción en el plazo de un mes, a contar de la fecha en que el convenio fuera ratificado por el gobierno chileno y se restablecían las comunicaciones comerciales con el resto de la monarquía.
Combate del Cerro Gavilán: Combate ocurrido durante la Patria Nueva en las cercanías de Concepción, luego de la Batalla de Cha- cabuco, cuando la resistencia realista ocupaba principalmente la zona de Talcahuano. Se organiza la División del Sur al mando del brigadier Juan Gregorio de las Heras para combatirlos. Las fuerzas realistas, que estaban en el sur al mando del coronel José Ordó- ñez, se enfrentan a las fuerzas patriotas, atacando las posiciones defensivas patriotas que estaban en el cerro Gavilán y Caracol para evitar que recibieran refuerzos de O’Higgins. Finalmente, los realistas son rechazados y derrotados.
Acción de Nacimiento. Con la victoria del Ejército de los Andes en la Batalla de Chacabuco el 12 de febrero de 1817 y el nombramiento de Bernardo O’Higgins como Director Supremo del Estado de Chile cuatro días después, el inicio del año 1817 vislumbró una firme reanudación del proceso independentista chileno. El grueso de la fuerza militar realista se retiró a la provincia de Concepción. La causa patriota se halló de nuevo revitalizada por estos logros iniciales, pero sus líderes sabían que la victoria final no estaba asegurada hasta que se lidiara con el peligro que se estaba ges- tando en el sur. Después de reagruparse tras su retirada de Chacabuco, las fuerzas del monarca español quedaron bajo la dirección del coronel José Ordóñez y el puerto de Talcahuano fue erigido como su principal base de operaciones. Estos temores situaron a Talcahuano como la principal amenaza para la nueva administración republicana y ello impulsó su sitio por el Ejército Unido, encabezado por el propio O’Higgins a partir del 5 de mayo de 1817. La primera de estas localidades en ser atacada fue la plaza de Nacimiento, ubicada en la margen izquierda de la confluencia del río Biobío con el río Vergara y al centro de la línea de fuertes realistas. La realización de esta tarea fue asignada la capitán José Cienfuegos. Sin perder tiempo, las fuerzas del capitán Cienfuegos cruzaron el río Biobío el 12 de mayo y atacaron Nacimiento el mismo día. Durante la noche el combate se inte- rrumpió pero, recuperada su energía durante la noche, el ataque fue reanudado a la mañana siguiente. La moral de los defensores también se vio afectada por las victorias patriotas previas, temiendo que no podrían recibir ningún socorro de parte de sus aliados En vista de esta poca halagüeña situación, los defensores decidieron rendirse el mismo 13 mayo a las fuerzas de Cienfuegos e hicieron en- trega del fuerte de Nacimiento.-
Acción de Carampangue:
Habiéndose reanudado el proceso independentista chileno con la Batalla de Chacabuco el 12 de febrero de 1817, el progreso inicial de las fuerzas patriotas pronto dio paso a un parcial estancamiento de las operaciones militares para mediados del mismo año. Las fuerzas realistas, reagrupadas bajo la figura del coronel José Ordoñez, lograron atrincherarse firmemente en el puerto de Talcahuano y el asedio patriota comandando por Bernardo O’Higgins no lograba quebrar sus defensas. La Península de Tumbes fue transformada por los seguidores del monarca español en un corredor impregnable y la llegada de la temporada de lluvias dificultó la posición de los sitiadores, situación que rememoraba el infructuoso asedio de Chillán en 1814. Pero la mayor ventaja con la que contaban los asediados era su acceso y control del mar, por medio del cual recibían vasto aprovisionamiento proveniente de la región del Biobío. O’Higgins entendió que si de verdad deseaba quebrar el cerco de Talcahuano, tenía que suprimir el dominio de los realistas en ese territorio.
Esta labor fue encomendada a la columna del comandante Ramón Freire, quién, con la asistencia de las fuerzas comandadas por el capitán José Cienfuegos, fue conquistando las bases realistas del sector una por una. Abriendo la campaña con la Acción de Nacimiento el 12 de mayo de 1817[1] , la línea de fuertes que bordeaba la banda sur del rio Biobío fue gradualmente cayendo en manos patriotas y, para el 14 del mismo mes, solo la guarnición del pueblo de Arauco seguía en pie. A pesar de la seguidilla de victorias que vino a coronar sus esfuerzos, Freire y Cienfuegos eran conscientes que dicha plaza era la mejor resguardada en toda la zona y fallar en su asalto podía revertir completamente su fortuna.
La ubicación del pueblo de Arauco era particularmente beneficiosa y los monarquistas hicieron buen provecho de ella. Su vecindad al río Biobío lo mantenía en estrecha comunicación con el resto de los asentamientos realistas en la región y así pudieron coordinar una extensa red de aprovisionamiento para los defensores de Talcahuano, a la vez que lograron hostigar a los sitiadores de Concepción con una serie guerrillas móviles. El establecimiento se hallaba protegido en el oriente por la cordillera de Nahuelbuta y el río Carampangue[2] , y para su defensa contaba con alrededor de 200 milicianos experimentados y 17 cañones de diversos calibres. También acompañaban a la guarnición algunos frailes misioneros provenientes de Chillán, cuyos llamamientos en lealtad al rey afirmaron la moral de los soldados y fortalecieron su determinación a resistir la embestida de los patriotas[3] .
El comandante Freire y el capitán Cienfuegos partieron de la plaza de San Pedro el 26 de mayo de 1817 para llevar a cabo la última etapa de su empresa, llevando consigo unos 350 milicianos para el asalto. En un comienzo la situación pareció favorecer a la expedición patriota, logrando sus fuerzas tomar posesión del fuerte abandonado de Colcura y enterándose Freire que los defensores de Arauco planeaban detener su avance a la altura del río Carampangue, perdiendo el resguardo de la fortaleza de Arauco. Pero en la medida en que se acercaban a su objetivo, las lluvias empezaron a caer con una fuerza perniciosa e ininterrumpida, y el cruce por los empinados cerros de la cuesta de Villagrán requirió de todas las fuerzas de los soldados[4] .
Poco después de las tres de la tarde del 27 de mayo, Freire llegó a la banda derecha del río Carampangue y pudo presenciar el grueso de las fuerzas enemigas extendidas en la orilla opuesta. Presentando fusiles en buen estado y cañones listos para disparar, los defensores realistas estaban listos para acribillar a cualquiera que intentara cruzar el torrente. El río en si era un obstáculo duro de atravesar, habiendo las lluvias desbordado sus vados y acrecentado la fuerza de su corriente. Un ataque directo en estas condiciones era suicida.
Siendo un hombre de poca reflexión y enorme arrojo, el comandante Freire decidió emprender inmediatamente el ataque esa noche. Mientras el grueso de sus fuerzas mantuvo su posición en la orilla derecha del Carampangue para atraer el fuego del enemigo, el propio comandante comandó una partida de 50 granaderos para cruzar el río por un paso superior[5]. La operación fue riesgosa, dificultada por la oscuridad, la copiosa lluvia y el fuerte cauce del río. Algunos de los soldados no pudieron hacerle frente a las circunstancias y la corriente del río desfiló sus cuerpos ahogados la mañana siguiente[6] .
A pesar de ello, Freire cruzó exitosamente el arroyo y logró contar con el grueso de su fuerza para el ataque. Arremetiendo contra la posición enemiga por el flanco izquierdo y contando con el fuego de apoyo de aquellos que dejó en la orilla opuesta, la carga de las fuerzas patriotas fue imparable y el enemigo pronto se dio a la fuga. El amanecer del próximo día pudo atestiguar 30 realistas muertos y 40 prisioneros, mientras que el Ejército Patriota solo sufrió unas 14 pérdidas[7] .
Con la victoria de Carampangue, la influencia realista en la región del Biobío fue terminada y Talcahuano se halló completamente aislado. El evento también logró afianzar la fama y la capacidad del naciente Ejército Chileno, asegurando Bernardo O’Higgins de honrar a sus participantes con un escudo de honor bordado en cada una de sus casacas.
José Miguel Olivares.
Lic. en Historia UANDES
Muerte de Manuel Rodríguez Erdoíza: Es asesinado en Til Til el guerrillero de la Independencia de Chile, Manuel Rodríguez Erdoíza.
Don Diego Barros Arana expone en su historia, que tras la batalla de Chacabuco, Manuel Rodríguez ocupó el área de san Fernando, en donde llevó a cabo “actos de violencia vituperable, imponiendo gruesas contribuciones y decretando la prisión de vecinos considerados y prestigiosos y que en realidad no habían cometido otra falta que no haber cooperado a la insurrección popular.”(1) Al llegar esto a oídos de O’Higgins, y en vista que contrastaba notablemente con sus planes de gobierno, se ordena que Manuel Rodríguez fuese apresado, y tras ser reprendido por sus actos, recibió como castigo ser “detenido en Valparaíso hasta que se presentase un buque que partiese para los Estados Unidos. El gobierno lo embarcaría allí con una comisión oficial y con una renta que asegurase su subsistencia.”(2) Sin embargo, Rodríguez rechazó esta posición, dada la hostilidad que sentía al nuevo gobierno, por lo que se opta dejarlo preso y sometido a proceso.
Mientras se decidía qué hacer con él, se le confía la vigilancia del guerrillero a un oficial de nombre Antonio Navarro, que servía con el grado de teniente primero. Se ordena entonces el traslado del coronel Rodríguez a Quillota, siguiendo al batallón Cazadores de Los Andes, para que se diera inicio al proceso que debía seguírsele. Barros Arana comenta que hubo una conspiración en contra de la vida del guerrillero por parte de la Logia Lautarina, al considerársele demasiado problemático para seguir viviendo, por lo que se le pide al teniente Navarro que lo ultime. Todo parece indicar que Navarro “se resistía a tomar participación en el crimen, y que habría querido que se produjera cualquier acontecimiento que lo impidiese.”(3) Mas, llevó a cabo la orden durante la noche en las cercanías de la localidad de Tiltil.
Se le otorga el nombre al Ejército Libertador del Perú: El plan concebido por el general argentino José de San Martín, era continuar las campañas hacia el territorio peruano una vez que se obtuviera la independencia en Chile. Tras el triunfo de Maipú, O’Higgins se abocó a organizar la Expedición Libertadora al Perú; para ello debió equipar un Ejército y una fuerza naval con esfuerzos y recursos chilenos y propios. El nombre del Ejército Libertador del Perú era una “nominación alusiva a la grande y filantrópica empresa que le conduce hacia las provincias litorales del Perú”. A su mando San Martín, para lo cual fue nombrado brigadier del Ejército de Chile, y al momento de marchar, se le dieron los despachos de Capitán General. Compuesto por unidades del Ejército de Chile y del de Los Andes, contaba con cerca de 4.300 plazas, los que, para el día del zarpe de la Escuadra Libertadora, el 20 de agosto de 1820, fueron embarcados en Valparaíso en 17 transportes rumbo al Perú. Se esperaba la adición de algunos soldados peruanos voluntarios que irían consiguiendo una vez comenzado el avance sobre el territorio. Desembarcaron en la Bahía de Paracas y después de ocupar Pisco y Chincha, entraron triunfantes a la ciudad de Lima, y se proclamó el Acta de Independencia el 28 de julio de 1821.
Muerte de Francisco de la Lastra: A los 75 años muere en San- tiago el destacado patriota Francisco de la Lastra quien fue confi- nado a la isla Juan Fernández luego del Desastre de Rancagua ocurrido en octubre de 1814. Asumió en dos ocasiones y por cor- tos períodos el mando del país como Director Supremo.
Creación de la Oficina Hidrográfica de la Marina Nacional: Créase la “Oficina Hidrográfica de la Marina Nacional”, establecida anexa al Ministerio de Marina con el propósito de proponer al Gobierno los reconocimientos hidrográficos que deban hacer los buques de la Armada en los mares y ríos de la República. Entre sus funciones figuran las de dirigir la publicación de las cartas que mande imprimir el ministerio citado; dar instrucciones para realizar las observaciones meteorológicas y magnéticas e indicar los procedimientos para el sondaje del mar; proporcionar cartas y noticias hidrográficas a los buques que vayan a emprender viajes; y publicar anualmente un periódico que llevará por título Anuario Hidrográfico de la Marina de Chile.
Partida de la escuadra chilena de Iquique al Callao: Parte la flota chilena en la expedición al Callao dejando las dos uni- dades más débiles las corbetas Esmeralda y Covadonga al car- go del bloqueo, ignorando que los peruanos se han hecho a la mar.
Combate Naval de Iquique: El combate naval de Iquique fue uno de los primeros y más importantes enfrentamientos ocurridos durante la campaña naval de la Guerra del Pacífico. Tuvo lugar en la bahía de Iquique el miércoles 21 de mayo de 1879. En él se enfrentaron el monitor peruano Huáscar al mando del capitán de navío Miguel Grau Seminario y la corbeta chilena Esmeralda, al mando del capitán de fragata Arturo Prat Chacón. El resultado de esta acción fue el hundimiento de la corbeta chilena y el levantamiento del bloqueo del puerto de Iquique. El 16 de mayo, la escuadra chilena dejó bloqueando el puerto de Iquique a sus naves de guerra la Esmeralda y la Covadonga, además del transporte chileno Lamar y zarpó rumbo al norte para enfrentar a la flota peruana, a la que esperaba sorprender en el puerto del Callao. Sin embargo, el mismo día los buques de la marina de guerra del Perú habían salido con rumbo al sur con la intención de defender sus puertos en el sur. Ambas flotas se cruzaron sin verse y las naves peruanas se encontraron el día del combate con las tres naves chilenas en Iquique. En el desigual combate, el Huáscar espoloneó tres veces a la Esmeralda antes de que se hundiera. En el primer espolonazo, el capitán Prat y dos marinos de la Esmeralda saltaron al abordaje resultando muertos en su cubierta. La hazaña de este distinguido marino infló de espíritu patrio a los ciudadanos chilenos, los cuales concurrieron en masa a enrolarse en el ejército chileno, factor que, a la larga, resultó decisivo para el desarrollo de la guerra y triunfo de las armas chilenas.
Combate Naval de Punta Gruesa: El combate naval de Punta Gruesa es como
se designa a una acción simultánea al Comba- te Naval de Iquique, ocurrida el miércoles21 de mayo de 1879 En la cual la goleta chilena Covadonga, al mando de Carlos Condell, siguiendo las órdenes de Prat, emprendió su navegación hacia el sur siendo perseguida por la fragata blindada peruana Independencia, bajo el mando de Juan Guillermo Moore Ruiz. La persecución se desarrolló por medio de un combate de artillería entre los dos buques. El comandante peruano Moore, notando a su artillería ineficaz por la inexperiencia de sus marinos, ordenó emplear el espolón de la Independencia mientras la goleta chile- na, para evitar esta arma, escapaba cerca a la costa aprovechando su menor ca- lado. En el tercer intento de espolonear a la goleta chilena, la Independencia cho- ca con una roca submarina y queda varada, comenzando a hundirse cerca de la bahía de Cheureñate, mientras la Covadonga detiene su marcha para regresar a atacarla. El desenlace inesperado del combate sepultó las esperanzas del Perú de enfrentar exitosamente, bajo circunstancias convencionales, a la flota chilena.
La Covadonga fondea en Tocopilla: La Covadonga fondea para dejar los restos del cirujano Pedro Segundo Videla y los cuerpos de los marineros Blas Segundo Téllez y Felipe Ojeda, heridos en el Combate de Punta Gruesa. Luego continúa viaje hacia Antofagasta.
Primer combate de Antofagasta: El capitán Miguel Grau se enfrenta con el buque chileno Covadonga, causándole grandes bajas. El primer combate naval de Antofagasta o Bombardeo de Antofagasta fue uno de los enfrentamientos de la guerra del Pacífico y el primer bombardeo naval nocturno de la guerra.
Batalla de Tacna: Episodio central de la Guerra del Pacífico. Después de las victoriosas campañas de Antofagasta y Tarapacá, el Ejér- cito expedicionario chileno continuó con el desembarco en Tacna, para enfrentar al ejército aliado conformado por peruanos y bolivianos en una batalla memorable por el despliegue de las tres armas: la infantería, la caballería y la artillería. La batalla comenzó con un duelo de artillería y siguió con el avance chileno de las divisiones de Amengual y Barceló, hasta muy cerca de los hombres del coronel Camacho, que sufrieron fuer- tes pérdidas y sumado a la falta de munición, por lo que abandonaron el terreno conquistado. Los soldados de Barceló, también sin munición, debieron retroceder. A las 12:30, todo el poder de fuego se concentró en la I división aliada, incorporando Camacho sus reservas y soldados y cuerpos del centro y del ala derecha. Los jefes peruanos, observaron la retirada de los chilenos, pensaron que la batalla estaba ganada y ordenaron contraatacar. Sin embargo, todavía no habían entrado en acción las otras dos divisiones y la reserva, o sea el grueso de la fuerza del ejército chileno. Avanzó la intacta división chilena de Amunátegui, luego la caballería amunicionó a las divisiones chilenas y amenazó con cargar, frenando el contraataque aliado del sector del ala izquierda. Acto seguido, se produjo el envolvimiento de la IV división y el aniquilamiento de varios cuerpos peruanos y bolivianos, con lo cual la victoria chilena se hizo realidad en el frente de batalla. El triunfo significó la derrota y retirada de los bolivianos hacia el altiplano y de los dispersos peruanos hacia Arequipa. La trascendencia de esta batalla radica en su planificación acertada y una conducción militar exitosa, la cual permite en un momento decisivo de la campaña militar, la derrota de las fuerzas aliadas, pensaron que la batalla estaba ganada y ordenaron contraatacar. Sin embargo, todavía no habían entrado en acción las otras dos divisiones y la reserva, o sea el grueso de la fuerza del ejército chileno. Avanzó la intacta división chilena de Amunátegui, luego la caballería amunicionó a las divisiones chilenas y amenazó con cargar, frenando el contraataque aliado del sector del ala izquierda. Acto seguido, se produjo el envolvimiento de la IV división y el aniquilamiento de varios cuerpos peruanos y bolivianos, con lo cual la victoria chilena se hizo realidad en el frente de batalla. El triunfo significó la derrota y retirada de los bolivianos hacia el altiplano y de los dispersos peruanos hacia Arequipa. La trascendencia de esta batalla radica en su planificación acertada y una conducción militar exitosa, la cual permite en un momento decisivo de la campaña militar, la derrota de las fuerzas aliadas.
Primer vuelo público: El piloto Luis Acevedo realiza el primer vuelo ante el público en Chile, en el Club Hípico.
Cruce aéreo de los Andes: Primer cruce de la Cordi- llera de Los Andes con pasajero, en un avión De Havilland DH-9.
Fundación del Club Aéreo de Chile: Se funda el actual Club Aéreo de Santiago.
Decreto naval del cinco de mayo: Se añade como anexo al decreto de abril sobre las banderas y gallarde- tes de la armada; el cual estipula: La enseña del presidente de la republica será roja, con el escudo nacional en el centro y sus iniciales a cada lado en letras doradas. La enseña de ministro será cuadrada con los colores republicanos y el escudo nacional.l
Escuela de Aviación: Ingresan los primeros alumnos a la Escuela de Aviación Capitán Ávalos.
Fundación de la Escuela de Enfermeros de la Armada. El Director de Sanidad, CA Luis Merino Reyes obtiene la firma del decreto que crea la Escuela de Enfermeros de la Armada.
SAR: Se crea el Servicio Aéreo de Búsqueda y Salvamento de la FACH (SAR)
Vuelo de helicópteros en Chile: Primer vuelo de un helicóptero en Chile, un Bell 47.
Primer puente aéreo nacional. Se inicia el primer y mayor puente aéreo a la zona sur del Chile, producto del terremoto y tsunami que afecto a Valdivia y ciudades aledañas.
Inauguración del Museo Naval y Marítimo de Chile: Se inaugura el Museo Naval y Marítimo de Chile, dependencia en cuya puesta en marcha desarrolló una importante labor el investigador de origen alemán Walter Grohmann, coautor junto al capitán de corbeta Juan Carlos Toledo de la Maza, del ensayo “Arturo Prat” pu- blicado en Valparaíso hacia 1972.